67. El SME funcionó sin tropiezos en 1998, ya que la mayoría de las monedas que participan en el mecanismo de cambio evolucionó a tipos próximos a sus paridades centrales. La dracma griega entró en el mecanismo de cambio el 16 de marzo ( 1 ) y se mantuvo ligeramente por encima de su tipo central hasta finales de año. El tipo central de la libra irlandesa tuvo un reajuste al alza de 3 %, también el 16 de marzo. ( 2 )