En uno de los bloques de piedra que levantan el imponente edificio modernista del Palacio de la Justicia de Barcelona, ubicado en pleno centro de la ciudad, descansa el fósil de una madriguera de gusano de hace 12 millones de años. A simple vista, parece un pequeño y alargado rasguño rugoso dibujado en vertical sobre una pulida superficie de piedra. A ojos del paleontólogo Zain Belaústegui, artífice del hallazgo, ese rasguño rugoso es un nuevo icnofósil -huella fósil de un organismo vivo- nunca descrito hasta la fecha que abre la puerta a profundizar en el estudio del comportamiento de ese tipo de invertebrados.
[Seguir leyendo] Las madrigueras fósiles que se esconden en los edificios modernistas de Barcelona