La representación de La Virgen María tiene múltiples tipologías, entre ellas están: El abrazo de San Joaquín y Santa Ana, Santa Ana Triplex, Virgen Apocalíptica, Árbol de
Jessé, Tota Pulchra y La Inmaculada. Esta última, La Inmaculada Concepción, conocida también como la Purísima Concepción, destacada sobre el resto durante el Barroco,
por ello, nos centraremos en ella.