Tres de los libros que más me han gustado de los que leí el año pasado son del mismo autor. Se trata del escritor cubano Leonardo Padura. El primero fue "El hombre que amaba a los perros", un libro estupendo comentado ya en este blog por nuestra compañera Charo Rodríguez Martí y de actualidad otra vez por su próxima publicación en Cuba. El segundo es "La neblina del ayer" en el que Padura recupera a su detective Mario Conde en uno de sus mejores casos y en una historia llena de libros, bibliotecas, amistad, amor, música... No me voy a extender más sobre él, porque os recomiendo el post de otra compañera nuestra, Marta Torres Santo Domingo en el blog de la Biblioteca Histórica de la UCM Folio Complutense.

Yo os voy a hablar del tercer libro: "La novela de mi vida".

Hace veinte años en los bosques de un pueblo cercano a Dublín desaparecieron tres niños; aquello fue una desgracia y se convirtió en un misterio nunca resuelto. Y, ahora, en la actualidad, se repiten los acontecimientos: en el mismo pueblo desaparece otra niña. Los encargados de resolver el caso son Rob Ryan y Cassie Maddox, detectives de la policía de Dublín. Rob es un personaje complejo y atormentado que  tiene un extraño vínculo con el pueblo y con los acontecimientos pasados, lo cual va a complicar la investigación. ¿Estarán relacionados los casos? ¿Será posible descubrir la verdad?

Mis detectives favoritos siempre suelen ser poco convencionales, con vidas sórdidas y desgraciadas, pero, como en todo, hay excepciones, y no una, sino dos. Os voy a hablar de dos hombres normales, maduros y casados cuya única peculiaridad es que se dedican a desentrañar crímenes atroces.

Harry Bosch es detective de homicidios en Los Ángeles. Lleva más de treinta años en el cuerpo y ha pasado por varios departamentos siempre buscando a los criminales más sanguinarios e investigando los crímenes más horrendos. Ha visto tantas cosas que incluso en una época se retiró, pero ha vuelto... Es zurdo, lleva bigote, tiene los ojos negros y, aunque ya está en la cincuentena, se mantiene en forma y es muy atractivo. Todo el mundo le llama Harry, pero su verdadero nombre es Hieronymus, por otro Jerónimo, "El Bosco".

Harry es el protagonista de muchas de las novelas del escritor Michael Connelly.Yo le conocí en un momento de pesadilla, acusado de la muerte de un sospechoso durante la terrible investigación de unos asesinatos en serie ("La rubia de hormigón". Zeta Bolsillo, 2005). Y me enganché totalmente en su siguiente caso ("El último coyote" Zeta Bolsillo, 2006): las cosas siguen yendo mal; incluso su preciosa casa en Hollywood Hills ha quedado dañada por el terremoto de 1994. Desde entonces he seguido todas sus andanzas.