"En mi época no había best sellers y no podíamos prostituirnos. No había quien comprara nuestra prostitución" (Borges)
Aunque llevas leídas tres páginas, ya sabes que leer este libro va a ser largo y arduo. Las complejas construcciones y los ánimos tan detallados de sus personajes, están asentados en las palabras narrando los hechos sólidamente, incluso las menos importantes se apoyan en las demás para que todo siga firme. En una espiral lenta de detalles, no queda hueco para visualizar otra cosa que la descrita en aquella vida rodeada de exactitud, corrección y claros conceptos de la razón de su existencia allí y en cada momento, en su estar y decir, para llegar a ser posible.