Gálvez de Montalvo, Luis: El pastor de Filida ... / compuesto por Luys Galuez de Montaluo ...
En Madrid : por Luys Sa[n]chez, a costa de Iuan Berrillo ..., 1600. – [8], 165 [i.e. 167], [1] h. ; 8º.
BHI [BH Res.420].
La edición príncipe de esta novela pastoril vio la luz en Madrid en 1582. De ella tan sólo se ha localizado un ejemplar incompleto que se encuentra conservado en la biblioteca de la Real Academia Española con signatura R 63. Le faltan la hoja de portada y la primera de preliminares en la que, posiblemente, se encontrarían la tasa, la fe de erratas y el retrato xilográfico del autor. El privilegio de impresión para seis años fue concedido a Gálvez de Montalvo y está datado en Lisboa, el 2 de agosto de 1581. Al ser un volumen con estas características, y no tener colofón, se desconoce en que taller tipográfico pudo ser impresa esta edición. Según Salvá (II, nº 1817), Mayans la considera la primera edición, basándose en la fecha de la Carta dedicatoria del autor a don Enrique de Mendoza y Aragón.
El éxito editorial de esta obra condujo a que se hicieran tres ediciones a lo largo del siglo xvi (2ª ed., en Lisboa, por Melchor Rodríguez, 1589; 3ª ed. de Madrid, por la viuda de Alonso Gómez y a costa del mercader de libros Francisco Enríquez, 1590; 4ª ed., en Madrid, por Luis Sánchez, 1600), si bien tan sólo una en el siglo xvii, concretamente en 1613, en Barcelona, en el taller de Esteban Liberos y costeada por Miguel Menescal. Tendremos que esperar a finales del siglo xviii (1792) para tener la edición que, según Palau (VI, nº 97026), es la más bella desde un punto de vista tipográfico. Se publicó en Valencia por Salvador Feliu en 1792 y fue preparada por Gregorio Mayáns y Siscar, quien redactó un amplio prólogo con la vida y las obras del autor, amén de numerosas noticias sobre los poetas españoles contemporáneos a Gálvez de Montalvo.
El ejemplar conservado en la Biblioteca Histórica “Marqués de Valdecilla” corresponde a la cuarta edición de la obra. Fue estampada en el establecimiento de uno de los impresores más prolíficos y acaudalados de la imprenta madrileña: Luis Sánchez. Este comenzó su actividad en 1591 hasta 1627 en su taller de la calle de la Encomienda. Heredó de su padre Andrés Sánchez su imprenta y el título de “impresor del Rey”. Publicó numerosos textos de autores clásicos y otros de diversas materias, costeados y vendidos por diferentes mercaderes de libros y libreros de Madrid.
Fue precisamente uno de estos, Juan Berrillo, quien corrió con los gastos de esta edición. La actividad comercial de Berrillo, instalado en la calle Santiago desde 1593, le llevan a tener tratos con tipógrafos relevantes como Pedro Madrigal, Juan de la Cuesta o el mismo Luis Sánchez. Se sabe que su librería fue visitada en dos ocasiones por la Inquisición y que era muy copiosa.
El ejemplar de la Biblioteca Histórica “Marqués de Valdecilla” no está completo, ya que le faltan dos hojas de preliminares con la tasa, las erratas y la censura de Pedro Láinez (Madrid, 2 de junio de 1581), la cual es la misma que aparece en la primera edición. Además, el colofón, que tendría que estar en una hoja final, signatura X8 recto, ha sido recortado y pegado tras el Soneto de Gregorio de Godoy. Está encuadernado en pergamino y procede de la biblioteca de la Condesa de Campo Alange, según consta en el ex libris impreso.
Y.C.S.R.
|