El sótano de la galería Gloria (c/Hortaleza 116) es una cripta abovedada, solitaria y silenciosa, fuera del ajetreo de las horas comunes del espacio superior. Es el lugar de la instalación Clepsidra, de Ana Iribas.
Allí, a partir de la fecha de envasado (11.2.2012), reposarán muestras de sustancias comestibles, libradas al tiempo y la humedad, al compás de la caída de gotas. Reloj de agua que marcará el lento transcurrir de la digestión del tiempo sobre las cosas. Un proceso eterno, puesto que la obra se prolongará indefinidamente, sin fecha de caducidad.
Acompañarán a la muestra un folioscopio o flip-book que acelera el transcurso de las mutaciones de esta alquimia orgánica, mostrando, en el correr de sus páginas, fotos tomadas cada 24 horas de dos placas de Petri.
Ana Iribas