-¿Qué estás haciendo acá? -dijo Ato al abrir la puerta de su casa.
-Te dije que encontraría el archivo -dijo Soto. Sus ojos brillaban, aun en la oscuridad de la noche y no dejaban de moverse. Parecía que la emoción le haría estallar de un momento a otro-. Te dije que lo encontraría y acá está.
[Seguir leyendo] Progenitores