Hace unos meses se ha publicado la obra Inventario del fondo documental de la Junta Facultativa de Archivos, Bibliotecas y Museos (1): series de partes trimestrales de trabajo, partes de asistencia, memorias anuales, anuarios del Cuerpo Facultativo, comisión inspectora de catalogación y guía histórica y descriptiva de los archivos, bibliotecas y museos arqueológicos de España, producto del trabajo de la organización de la documentación archivística de dicha Junta, depositada en la Biblioteca Nacional. La Junta Facultativa de Archivos, Bibliotecas y Museos (1858-1936) era el órgano encargado de asesorar al gobierno de España en todo lo relacionado con este ramo de la Administración pública, y también era el órgano rector del Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos, es decir, de los funcionarios encargados de su regencia y custodia. Las actividades desarrolladas por la Junta Facultativa han quedado reflejadas en su fondo documental, que constituye una fuente imprescindible para la historia de los archivos, bibliotecas y museos españoles. [Seguir leyendo]
La publicación de esta obra es fruto de doce años de trabajo, a lo largo de los cuales se procedió a la reunión, organización, instalación y descripción de la documentación producida por la Junta Facultativa de Archivos, Bibliotecas y Museos a lo largo de su historia. En este primer volumen del inventario del fondo documental de la citada Junta Facultativa se describen 6471 registros, la mayor parte de los cuales se encuentran en el archivo de la Biblioteca Nacional de España (5905), y el resto (566) se conserva, distribuido en cantidades desiguales, entre el Archivo General de la Administración en Alcalá de Henares, el Archivo Histórico Nacional, el archivo del Museo Arqueológico Nacional y la Biblioteca Histórica "Marqués de Valdecilla" de la Universidad Complutense de Madrid.
Las series documentales descritas ofrecen una rica y variada información sobre los archivos, bibliotecas y museos. Esta información puede ser clasificada en cuatro clases de datos: a) los referidos a las labores facultativas o técnicas de carácter interno o régimen interior; b) los relacionados con el servicio público; c) los que tienen que ver con el personal, con los empleados del establecimiento, sus movimientos, sus carencias y los incumplimientos de sus obligaciones; y d) los relativos a los recursos económicos de que disponen los centros para llevar a cabo sus actividades.
Los datos sobre las labores facultativas o técnicas de carácter interno se refieren, en primer lugar, a la situación de los edificios y locales que albergan estos establecimientos y al estado de conservación y organización de los fondos y colecciones que custodian. En los partes trimestrales de trabajo, en las memorias y en los anuarios del Cuerpo Facultativo se informa puntualmente sobre las labores de organización y descripción desarrolladas por cada uno de los funcionarios facultativos. A través de los documentos descritos en este inventario se puede llegar a conocer el grado de formación (incipiente, avanzada, completa) de los índices o catálogos de los distintos establecimientos; además, suministran interesantes noticias sobre los sistemas de clasificación empleados, sobre los métodos de instalación de los libros en los anaqueles, sobre el control y destino de los ejemplares duplicados y sobre las más elementales medidas de preservación y conservación adoptadas (limpieza y encuadernación de los volúmenes). También encontramos información sobre el volumen de los fondos y colecciones y sus movimientos. Además de los datos estadísticos sobre los nuevos fondos ingresados, la documentación suele aportar interesantes noticias acerca de la forma, carácter y procedencia de los fondos ingresados; del mismo modo, los partes de trabajo y las memorias anuales ofrecen información sobre la salida (temporal o definitiva) de documentos, libros y objetos, incluidos los destinados a exposiciones, así como sobre las propuestas de eliminación de documentos.
En lo que respecta al servicio público, además de noticias sobre el horario de apertura de los establecimientos, las series documentales descritas en este inventario suministran información sobre las buscas realizadas y las certificaciones expedidas en los archivos, así como sobre los investigadores que acuden a ellos y sobre los que simplemente los visitan. En cuanto a las bibliotecas, gracias a los datos consignados en estos documentos se puede conocer el número de obras servidas al público clasificadas por materias y por idiomas, el número de lectores que acuden a las salas de lectura mensual, trimestral y anualmente y las incidencias que afectan, positiva o negativamente, al servicio público de lectura y a la mayor o menor concurrencia de lectores. Otros aspectos de interés sobre los que se pueden encontrar noticias en estos documentos son los relativos a las desideratas, los préstamos, la creación de secciones infantiles o populares y las visitas de forasteros y curiosos que no son lectores o usuarios habituales. En lo que concierne a los museos, los documentos inventariados se limitan, en la mayoría de los casos, a consignar el número de visitantes, desglosados con mayor o menor detalle según las épocas y los centros.
Los datos referidos al personal (nombramientos, ceses, traslados, comisiones, licencias, fallecimientos) son otro abundante venero de información, de gran importancia para el conocimiento de la trayectoria profesional de los funcionarios, sobre todo en el caso de aquellos cuyos expedientes personales han desaparecido, y para apreciar la precariedad de personal de la que adolecían muchos archivos, bibliotecas y museos, especialmente los llamados "de provincias", en los que un solo funcionario facultativo debía atender uno, dos e incluso, a veces, hasta tres establecimientos.
Teniendo en cuenta la penuria económica en la que hubieron de desenvolverse los archivos, bibliotecas y museos españoles durante la práctica totalidad del periodo objeto de atención (1858-1936), no puede extrañar que los jefes de los establecimientos aprovecharan la oportunidad que les brindaban los partes de trabajo y las memorias anuales para denunciar reiteradamente ante sus superiores la inexistencia o insuficiencia de consignación presupuestaria para poder llevar a cabo sus actividades.
Merece la pena subrayar el interés de los documentos adjuntos a los tipos documentales inventariados: informes, reglamentos, actas de visitas de inspección, papeletas o fichas de los índices o catálogos, publicaciones impresas, planos, fotografías o dibujos de los centros, de extraordinario valor, pues en muchos casos son los únicos testimonios gráficos que de ellos se han conservado.
Para facilitar su consulta, el inventario va acompañado de un índice de archivos, bibliotecas y museos y de un índice onomástico en el que figuran todos los funcionarios del Cuerpo Facultativo mencionados en los documentos descritos.
La introducción se cierra con un capítulo en el que se revisan los estudios sobre la historia de los archivos, bibliotecas y museos en el periodo 1858-1936, con el fin de determinar el grado de conocimiento y explotación de los tipos documentales que se describen en esta obra por parte de la historiografía. El objetivo que se persigue con el examen de la literatura científica es doble: por un lado, completar las faltas detectadas en las series documentales inventariadas, y por otro, incitar a los profesionales que trabajan en las instituciones que se mencionan en esta obra para que presten mayor atención a los archivos administrativos de sus centros, y se decidan a emprender las labores de organización y descripción de los tipos documentales que son testimonio de las actividades desarrolladas por dichos establecimientos en el ejercicio de sus funciones a lo largo de este periodo de su historia.
La conclusión extraída de esta revisión de la historiografía sobre los archivos, bibliotecas y museos es que existe un vacío o, cuando menos, un notable desequilibrio en la producción de los estudios, pues la balanza se inclina a favor de la edad moderna, quedando aún muchos aspectos de la contemporánea pendientes de investigar. Entre los temas y periodos todavía por estudiar en profundidad cabe destacar el de la formación y desarrollo del que puede considerarse como el antecedente de los actuales sistemas nacionales de archivos, bibliotecas y museos en España, el regido por la Junta Facultativa de Archivos, Bibliotecas y Museos, y la historia de los establecimientos que lo integran entre 1858 y 1936. La causa principal de este vacío era la insuficiencia de las fuentes documentales disponibles hasta ahora. La organización, descripción y difusión de la documentación producida por la Junta Facultativa contribuirá a colmar esa laguna. La edición de este inventario constituye un primer paso en este sentido, que irá seguido de otros en años venideros, pues es propósito de su autor publicar inventarios sucesivos de las series de actas y expedientes de sesiones de la Junta, de la de visitas de inspección y de las varias series de correspondencia (del presidente y del secretario de la Junta, del jefe superior del Cuerpo Facultativo y del inspector general de bibliotecas).
Pérez Boyero, Enrique: Inventario del fondo documental de la Junta Facultativa de Archivos, Bibliotecas y Museos (1): series de partes trimestrales de trabajo, partes de asistencia, memorias anuales, anuarios del Cuerpo Facultativo, comisión inspectora de catalogación y guía histórica y descriptiva de los archivos, bibliotecas y museos arqueológicos de España, Madrid, Biblioteca Nacional de España, 2014 (1393 pág.). Versión en línea (PDF)