La muestra "La mujer Ochoa. Modernismo y modernidad" del artista Enrique Ochoa (1891-1978) que acogió el Museo Cerralbo en sus salas de exposición del 23 de enero al 26 de abril de 2016, fue una magnífica oportunidad para conmemorar los 125 años de su nacimiento; y conectar la visión de dos intelectuales y una época. Las inquietudes culturales del Marqués de Cerralbo y la sensibilidad de Enrique Ochoa por las Bellas artes, hacen de la Casa-Museo Cerralbo el marco idóneo por donde desfilarán los protagonistas de sus retratos. Mujeres cosmopolitas, mujeres de la aristocracia, la nobleza y la burguesía, mujeres que fueron musas inmortalizadas en los lienzos y que todo el mundo ansiaba adquirir. Sin duda, se trata de uno de los más reconocidos ilustradores del primer cuarto del siglo XX, que con óleos, acuarelas, lápices o pinturas pastel retrató la feminidad de una época [Seguir leyendo].
En la Biblioteca Histórica "Marqués de Valdecilla", acabamos de recibir en donación por parte de la Fundación Pintor Enrique Ochoa, el catálogo de la exposición "La mujer Ochoa. Modernismo y modernidad". En él se expone una cuidada y selecta muestra de algunos de los mejores retratos que sobre las mujeres de los años 20 y 30 del siglo XX realizó Enrique Ochoa. Este artista supo reflejar el mundo femenino de su época con otra mirada distinta de la de sus contemporáneos.
A Ochoa le atraía la historia y la mitología, la música y la poesía. Y de ese universo onírico, surgen los lienzos del maestro. Pero sobre todo le atrajo la mujer. Ochoa es el pintor de la mujer al igual que fue el precursor de numerosas tendencias y el creador de la llamada "Plástica Musical". En sus dibujos, la mujer alcanza su máximo protagonismo, basados en la mitología o en la propia realidad. Ochoa supo captar lo mejor de las mujeres, sobre todo el estilo, la elegancia y glamour de cada momento. Ochoa idealiza a una mujer que vive a caballo entre las modas de los "años locos" parisinos, sin prejuicios, y los tonos oscuros de los palacios y casas de la alta burguesía española. Aunque también refleja a mujeres de su entorno, personajes verosímiles de entre distintos estratos sociales.
En el París de los años 20, Ochoa encuentra a la mujer "flapper", moderna, sensual e independiente, como la del lienzo "Cosmopolita", la obra que utiliza de cubierta en el catálogo, y encabeza este post. "En el cuadro explota la sensualidad con piernas al aire, pero también tiene una finalidad intelectual, ya que tenga un libro en la mesa no es algo dejado al azar"
Para finalizar, reproducimos el homenaje que hace Alicia Aza a Cosmopolita, en 2015, no sin antes expresar el agradecimiento a la Fundación Pintor Ochoa por la donación del catálogo.
"Es el jardín eterno de tus labios,
el murmullo de un libro sin pupilas
sobre lo interminable de tus piernas,
el regreso del día tras la noche
exiliada en el eco de tus hombros.
Eres tú, mujer ávida de sueños,
Colina luminosa tras la siega
del oscuro crepúsculo ceñido
al néctar vulnerable, quien resiste
el cristal de palabras contenidas.
Tú, mujer misteriosa entre los surcos
que desvanece el tiempo ante el espejo
y pone fin al río de quien mira.
Eres un tulipán rebelde al viento."