Os recomendamos la exposición Burgos, legua 0 del viaje de Magallanes-Elcano. Una historia de reyes, mercaderes y océanos, que se celebra en el Fórum Evolución de Burgos hasta el 29 de marzo de 2020. La muestra aborda en cinco capítulos la importancia de los monarcas castellanos en el viaje a la Especiería, el potencial comercial, financiero y artístico de Burgos reflejado en su Universidad de Mercaderes (1443) y el Consulado del Mar (1494), la relevancia del mercader Cristóbal de Haro y del obispo Juan Rodríguez de Fonseca y la vida de los marineros que culminaron la gesta en la que Colón fracasó.
Se cumple este año el V Centenario de la Primera Vuelta al Mundo (1519-1522), una hazaña náutica llevada a cabo en el siglo XVI que abrió al comercio mundial un nuevo océano e hizo posible a partir de entonces, el tráfico marítimo entre América y las islas Filipinas.
El portentoso periplo ha quedado indisolublemente unido a la memoria de dos personajes: Fernando de Magallanes, el marino portugués que descubrió el estrecho y dio nombre al océano Pacífico, y Juan Sebastián Elcano, el navegante español que, al frente de la nao Victoria, la única que quedaba de las cinco naves que partieron de Sevilla, rindió viaje en Sanlúcar de Barrameda tras una azarosa travesía de tres años (1519-1522), a golfo lanzado.
Pero esta loable hazaña tiene otros importantes personajes protagonistas: Cristóbal de Haro, comerciante y financiero burgalés, que junto a otros mercaderes y los poderosos financieros alemanes Fugger y Welser (llamados "los banqueros de Carlos V"), arriesgó sus dineros costeando parte de la flota que patrocinó la Corona. Para la construcción de las naves y su apresto, Cristóbal de Haro aportó más de un millón y medio de maravedíes. El objetivo de los mercaderes y financieros burgaleses era dominar en todo Occidente, desde el Consulado de Burgos, el comercio de las especias.
La expedición, autorizada por Carlos V, se preparó bajo la atenta mirada del entonces obispo de Burgos, don Juan Rodríguez de Fonseca, como delegado regio en los asuntos de Indias, quien como tal tuvo en sus manos la gestión de la exploración, conquista y evangelización de las Indias, también llamadas el Nuevo Mundo.
Y junto a Cristóbal de Haro y el obispo Fonseca aparecen en esta increíble aventura a las islas de las Especias otros burgaleses que ayudaron a hacer posible la hazaña: Gonzalo Gómez de Espinosa, alguacil mayor de la armada y capitán de la nao Trinidad a la muerte de Magallanes; Juan de Cartagena, veedor general de la armada; Francisco de Espinosa, marinero, natural de Brizuela; Pedro Gómez, de la Merindad de Sotoscueva; Gerónimo Guerra, de Burgos, escribano; Alonso del Río y Pedro de Valpuesta, burgaleses, criados del capitán Cartagena; Juan de Sagredo, merino, natural de Revenga; y Juan Gómez de Espinosa de los Monteros.
173 piezas conforman la exposición, con algunas procedentes del Museo del Ejército, el Museo Naval, el Museo Antropológico Nacional o la Real Chancillería. Destacan los bustos orantes de Cristóbal de Haro y Catalina de Ayala, restaurados para la ocasión, varios cañones (uno de ellos construido en Burgos y empleado durante la guerra de Isabel la Católica y Juana la Beltraneja), monedas de oro, esferas armilares, un cofre de Goa (India) que llegó a Burgos en 1582, mapas como el de Juan de la Cosa u obras de Bartolomé Ordóñez y Diego de Siloé, entre otras.