En el marco de la Semana de la Ciencia y la Innovación 2021 en Madrid, se han realizado en la Biblioteca Histórica varias actividades de difusión de proyectos de investigación relacionados con nuestros fondos bibliográficos.
Aquellos que no han podido asistir, podrán acercarse a estos ejemplares a través de dos vídeos de corta duración sobre los principales manuscritos griegos que alberga la Biblioteca Histórica de la UCM, alojados en la página web de Manuscritos griegos permitiendo así su mejor visibilidad.
[Vídeo 1]Un paseo virtual por el fondo manuscrito griego de la UCM.
[Vídeo 2]BH UCM 22: La recuperación de un manuscrito griego del s. XVI
Los códices griegos de la Universidad Complutense de Madrid proceden del Colegio Mayor de San Ildefonso de la Universidad de Alcalá, en el que ingresaron en la época del cardenal Cisneros, a principios del siglo XVI, con el fin de servir de base para los trabajos de la Biblia Políglota Complutense dirigidos, en la parte griega, por el catedrático Demetrio Ducas. Han sobrevivido sólo 7 códices de un conjunto que, con toda probabilidad, fue más amplio y que fue mermando a lo largo de los siglos debido a préstamos a otras bibliotecas e instituciones, pérdidas y la guerra civil española de 1936-1939.
El más antiguo es un códice lexicográfico de los siglo X u XI procedente de la Abadía del Archimandrato de San Salvador de Lengua Fari en Mesina, que contiene el Lexicon de San Cirilo, y una variada colección de glosas, entre ellas partes abreviadas del llamado Lexicon de Zonaras y la carta de Teodosio el Gramático sobre el Léxico de cánones de San Juan Damasceno (BH MSS 30).Del siglo XIV es un Menologium Graecorum o Calendario griego, con una "Vitae Sanctorum", copiado en letra rojiza por Miguel sacerdote en el Monte Athos (BH MSS 26). Se conservan 2 códices bíblicos, un Antiguo Testamento muy deteriorado del siglo XVI, regalo del senado veneciano a Cisneros (BH MSS 22) y un volumen de Salmos (BH MSS 23).El último grupo es un conjunto de 3 manuscritos del siglo XVI con obras fundamentalmente de Ptolomeo, aunque contiene de otros autores como Heliodoro (BH MSS 27, BH MSS 28 y BH MSS 29).
Durante la Guerra Civil Española (1936-1939) la Ciudad Universitaria se convirtió en frente de combate de la defensa republicana y los libros de la biblioteca de la Facultad de Filosofía y Letras fueron utilizados en barricadas y trincheras y como parapeto en las ventanas. Durante varias décadas el BH MSS 22 se dio por perdido en aquella contienda, hasta que en 1973 el biblista Natalio Fernández Marcos llamó la atención sobre la existencia del manuscrito, que había quedado seriamente dañado por efecto del fuego, aunque todavía en 1974 Gregorio de Andrés lo presentaba en su Catálogo como «deperditus» (1974, 244). Los daños de este manuscrito «redivivo» (Fernández Marcos 2005) han afectado sobre todo a su parte inicial y final, al interior de los fascículos y a la sección superior de los folios, y por supuesto a la encuadernación,que ha desaparecido por completo. Por el contrario, en la parte central del códice el texto se ha conservado con mayor integridad.
Desde su «reaparición», se ha trabajado en la Biblioteca Histórica de la Universidad Complutense en la restauración del manuscrito, cuyos fragmentos, de muy diversos tamaños, se preservan actualmente en fundas de vinilo transparentes guardadas en una caja. A comienzos de este siglo se elaboraron dos CDs con una primera -y meritoria- reproducción parcial de algunos fragmentos, aunque presentados todavía en desorden, con algunos errores de reproducción y sin identificación de los pasajes transmitidos: eran, en total, 116 imágenes correspondientes a 58 fragmentos r-v, en su mayoría de los libros i y ii de Reyes y Macabeos, identificados luego por Fernández Marcos (2005, 72-77).
En 2018, con motivo de la nueva catalogación del fondo antiguo de la Universidad Complutense, se puso en marcha un proyecto de digitalización de la totalidad de los fragmentos por Carlos Martins de Jesus (Universidad de Coimbra) y Felipe G. Hernández Muñoz (Universidad Complutense) en el marco de un proyecto coordinado con la Universidad de Salamanca sobre manuscritos griegos en España. Esta nueva digitalización y ordenación, ya casi completadas a falta de la inserción en los folios correspondientes de algunos fragmentos menores, apenas legibles, consta, a fecha de hoy, de más de 600 imágenes, correspondientes a 223 ff. r-v, en distinto grado de conservación, de los 307 que sabemos que originalmente contenía el manuscrito completo.