Doña Bernarda Ferreira de Lacerda es una de las muchas autoras olvidadas en la historiografía literaria, a pesar de que en su época gozó de una gran reputación en los círculos literarios madrileños y portugueses como dama erudita y notable escritora.
Nació en 1595, en Oporto. Era hija de Ignacio Ferreira Leytao, doctor en Leyes por Coimbra y rector del Colegio Real, miembro del Tribunal de la Relação (Oporto) y miembro de la Mesa da Consciencia (Lisboa), caballero de la orden de Santiago, juez de Palacio y canciller mayor del Reino, y de Paula de Saa Pereyra y Menezes, ambos de familia noble reconocida. Se casó con Fernando Correia de Sousa, hijo de Jacobo Correia de Sousa, Fidalgo bien conocido. Enviudó relativamente pronto y sólo sobrevivió una de sus hijas, María Clara de Meneses, que ayudó a publicar alguna de las obras de su madre tras su muerte acaecida en Lisboa en 1644.Se encuentra enterrada en la Capilla de San José del Convento de Nuestra Señora de los Remedios de las Carmelitas Descalzas de Lisboa. El reconocimiento público del que fue objeto llegó a tal grado que Felipe III le propuso ser preceptora de sus hijos don Carlos y don Fernando. Ella desistió.
De gran inteligencia, recibió una sólida educación literaria, siendo muy celebrada como poetisa por varios autores españoles. Escribía en portugués, castellano, latín e italiano, aunque la mayor parte de su obra se encuentra en castellano. Es conocida como la décima musa portuguesa y fue alabada por sus contemporáneos, entre ellos el mismo Lope de Vega, que le dedicó estos versos en la Silva tercera del "Laurel de Apollo" (Madrid, 1630):
"Si pudiera tener la fama aumento 
 Y gloria Lusitana, 
Doña Bernarda de Ferreira fuera, 
 A cuyo Portugues entendimiento
 Y pluma Castellana,
 La España libertada debe: 
 Porque sola pudiera
Partir entre los Reynos esta gloria. 
 tan poderosa inteligencia mueve 
 Estos dos Orbes con su dulce historia,
 Con tanta erudición, con tanto lustre, 
 Que ella queda inmortal, y España illustre".
Aparte de algunos poemas dispersos y pequeñas aportaciones en ediciones de otros autores, sus obras más importantes son el poema épico en octavas titulado "Hespaña Libertada" (1618), y las "Soledades de Buçaco" (1634), conjunto de romances descriptivos en torno a ese famoso eremitorio carmelitano.
La "Hespaña libertada", extenso poema épico, consta de dos partes, publicadas ambas en Lisboa con muchos años de diferencia: la primera en 1618 y la segunda en 1673, cuando la autora ya había fallecido. Y aún así, no quedó completa, puesto que el argumento debía tratar toda la reconquista, pero el libro primero abarca desde Pelayo hasta Alfonso VI y el segundo termina en Alfonso X. Ha sido considerado un texto de segundo orden, de mediocre condición literaria, pero es un documento de indudable valor para el estudio de la literatura portuguesa bilingüe.
En la Biblioteca Histórica de la Universidad Complutense de Madrid se conserva un ejemplar de la primera parte de "Hespaña Libertada" de 1618. Este libro posee en su portada el escudo de armas matrimonial de la autora. En los cuarteles 1º y 3º aparecen las armas de su marido, (Correia y Sousa), mientras el 2º y 4º llevan las propias de su linaje (Ferreira y Lacerda).
Este ejemplar perteneció a una de las más importantes bibliotecas privadas de la nobleza española, la de la primera Condesa de Campo Alange, Agustina de la Torre. Lo podemos identificar por el ex libris con escudo de armas de su casa pegado en la contraguarda del libro.
Bibliografía:
Baranda, Nieves (2003): "Mujer, escritora y fama: la Hespaña Libertada (1618) de doña Bernarda Ferreira de Lacerda". Península. Revista de Estudos Ibéricos, 0, pp. 225-239.
Gloël, M. (2023). Nuevas aportaciones sobre la dimensión femenina y las lealtades políticas en la Hespaña Libertada de Berenarda Ferreira de Lacerda. Revista de Escritoras Ibéricas, 11, 204-232. https://doi.org/10.5944/rei.vol.11.2023.38001

 

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