Una nueva donación ha entrado a formar parte de los fondos de esta biblioteca, compuesta por los más de seiscientos ex libris de Dª Gloria Rokiski Lázaro, catedrática en el Departamento de Filología Española IV (Bibliografía Española y Literatura Hispanoamericana) de la Universidad Complutense. Gracias a ella tenemos la ocasión de conocer el mundo del exlibrismo. [Seguir leyendo]

Pero, ¿qué es un ex libris?. El diccionario de la RAE lo define como: "literalmente,″de entre los libros″. Etiqueta o sello grabado que se estampa en el reverso de la tapa de los libros, en la cual consta el nombre del dueño o el de la biblioteca a que pertenece el libro". Para Juan Delgado Casado sería la etiqueta que se pega en los libros, diferenciándola así de otras marcas de propiedad, donde aparece al menos el nombre del propietario. De forma tradicionalmente cuadrada o rectangular, suele constar del nombre del poseedor, con alguna formula que indique posesión, "ex libris...", "de la biblioteca de...", "de...", a veces incluye una frase y casi siempre un motivo pictórico relacionado con el nombre, la profesión o las aficiones del dueño del libro. El procedimiento artístico para la realización del ex libris será un grabado, en cualquiera de sus múltiples técnicas.

La historia del ex libris

La aparición del ex libris clásico tuvo lugar en el siglo XVI, aunque se conservan pocos ejemplos. Esta primera etapa del periodo clásico se prolonga hasta mediados del siglo XVIII y está caracterizada por el ex libris heráldico, de uso restringido a las familias nobles, a la jerarquía eclesiástica y a las instituciones religiosas, que eran los únicos poseedores de bibliotecas o colecciones de libros. En ese período también encontramos ex libris tipográficos, compuestos por una fórmula de posesión seguida del nombre del propietario y rodeado todo de una sencilla orla decorativa. La segunda etapa se extiende hasta el último cuarto del siglo XIX, donde continúa el predominio del ex libris heráldico pero ahora más ornamentado, haciendo su aparición en alguno de ellos la firma del diseñador.

El denominado periodo moderno o postclásico transcurre desde el último cuarto del siglo XIX hasta mediados del siglo XX y supone un cambio radical en el diseño del ex libris debido al boom de la burguesía como poseedora de colecciones de libros,a la aparición del coleccionismo de ex libris coincidiendo con un estilo artístico que se expande rápidamente por Europa, el Art Nouveau y que da lugar a obras maestras del exlibrismo, y al desarrollo del asociacionismo para la difusión de la cultura del ex libris.

En España se publica en 1875 un tratado sobre el ex libris, obra de Mariano Pardo de Figueroa, "Doctor Thebussem". En 1878 Alejandro de Piquer comienza su actividad como diseñador de ex libris. Entre finales del siglo XIX y comienzos del XX destacan los diseños de Ramón Casals y Vernís, José Triadó, José de Riquer y Joaquín Renart García, los cuales coinciden con el inicio de la publicación de la Revista Ibérica de Ex Libris dirigida por Ramón Miquel y Planas. Hacia 1921 surge otro grupo de artistas en torno al valenciano Luis García Falgás y la revista Pro Ex Libris y se crea la asociación Unió d'Exlibristes Ibérics.

El periodo contemporáneo transcurre desde el fin de la Segunda Guerra Mundial hasta nuestros días y está marcado por el coleccionismo de ex libris de toda temática y por la celebración de concursos internacionales. A partir de entonces no es raro que un poseedor utilice varios ex libris para marcar sus libros.

En España la Guerra Civil puso fin a todas las actividades, hasta que en los años cuarenta surge la revista Saitabi de la Facultad de Filosofía y Letras de Valencia, con una sección fija sobre ex libris, que en 1947 será el germen de la Asociación de Exlibristas Ibéricos bajo los auspicios de José María Gutiérrez Ballesteros, Conde de Colombí, culminando en 1952 con la publicación de Ex-libris, revista de la asociación, que incluye junto a sus artículos y reseñas, ejemplares de ex libris. En 1950 se celebra la primera Exposición Ibérica de exlibris en Valencia, en 1954 comienza a publicarse la Biblioteca del Exlibrista a cargo de Luis Bardón y en 1958 se celebra en Barcelona el VI Congreso Europeo de Ex libris.

A nivel internacional, en 1966 se crea la FISAE, International Federation of Ex-libris Societies, cuya finalidad es apoyar el coleccionismo, principal impulsor de la creación de ex libris, así como la organización de congresos internacionales. Aunque el afán coleccionista y los concursos han incrementado el número de ex libris en circulación, se ha visto reducida su calidad y se ha producido la aparición de los denominados "falsos ex libris" o "ex libris artificiales", creados para personajes famosos o con carácter conmemorativo pero carentes de función real. Sin embargo, existen destacadas excepciones sobre todo en países del este de Europa, como Chequia, Eslovaquia y Polonia y en algunos países de la antigua URSS, como Ucrania y Rusia, que gracias a la cultura del grabado tradicional continúan realizando excelentes ex libris. De este grupo de países proceden la mayor parte de los ex libris donados a la biblioteca por Dª Gloria Rokiski.

Tipología del ex libris

La variedad y tipología del ex libris es casi infinita, depende de la creatividad del propietario del libro y/o del diseñador. Algunos autores han querido agrupar los ex libris en las siguientes categorías:

• Heráldicos
• Epigráficos - cuando el motivo predominante es un lema o leyenda (aforismos, máxima, sentencia, frases celebres...)
• Monogramáticos - la base del diseño es un monograma, dibujo formado por dos o más letras que corresponden a las iniciales del nombre y apellido del poseedor.
• Figurativos - con viñeta simbólica, alegórica o representativa relativa al titular.
• Tipográficos - constan sólo del nombre del propietario con una simple orla floral o arquitectónica.

Hay algunos tipos curiosos de ex libris, como los "ex libris parlantes", consistentes en motivos figurativos de un animal, planta u objeto fácilmente representable que coincide con el nombre del propietario del libro. Otro tipo sería el de los denominados "ex libris excepcionales", realizados por artistas famosos como Braque, Klee, Giacometti, Manet, Matisse, Mondrian, Pissarro, Renoir... Dentro de los figurativos podrían crearse múltiples subgrupos, por ejemplo el de los ex libris sobre el Quijote, los religiosos, los macabros, los eróticos, etc. También podrían clasificarse por grupos sociales, como los ex libris infantiles, los femeninos, los conyugales, los de profesionales (médicos, arquitectos, ingenieros...), etc.

Coleccionismo de ex libris

El coleccionismo de ex libris comenzó, salvo contadas excepciones, hacia finales del siglo XIX, debido al interés por la manifestación artística, histórica y bibliográfica que suponía esta marca de propiedad. Se difunde la venta de colecciones de ex libris y la publicación de manuales y catálogos sobre el tema. Su desarrollo se inició en Europa, desde donde se extendió a Asia, principalmente Japón y China, y a Latinoamérica. Muchos artistas famosos han creado ex libris y otros muchos personajes a lo largo de la historia los emplearon para marcar sus libros, siendo ejemplos de ello Dickens, Bismark, Conan Doyle, Gloria Swanson, Mussolini, Charlie Chaplin, etc. Algunos museos y bibliotecas conservan colecciones de ex libris, como las de los señores Porter y Concepción Montsalvatje de Barcelona, Sáenz Fernández Casariego de Madrid y la de Concepció Careaga, adquiridas todas por la Biblioteca Nacional de España en los años 60 y 70 del siglo pasado.

Actualmente hay al menos medio centenar de asociaciones de ex libris que publican revistas y libros sobre esta materia y organizan concurso para artistas, como Bookplate Society en Inglaterra, Deutsche Ex-libris Gesellschaft en Alemania, American Society of Bookplate Collectors and Designers en los Estados Unidos, Istanbul Exlibris Society de Turquía, Association of Collectors and Friends of exlibris en la Republica Checa o The new Australian Bookplate Society. Se estima que actualmente haya unos 10.000 coleccionistas en todo el mundo.

Es imposible conocer el número de ex libris existentes, por lo que se ha ido elaborando catálogos relativos a ex libris de un ámbito concreto (de un propietario, sobre un tema, de un diseñador, los realizados en un país, etc.). En 1989 se publicó en España el Catálogo de los Ex libris de Bibliotecas Españolas en la Biblioteca Nacional.

Los ex libris en la Biblioteca Complutense

Desde hace años se viene realizando un listado de Procedencias del Fondo Antiguo de la Biblioteca Complutense que recoge ex libris, sellos y marcas de propiedad manuscritas de instituciones y particulares, lo que nos permite conocer las manos por las pasaron muchos de nuestros ejemplares más antiguos. Para su estudio la Biblioteca Complutense dispone de obras de referencia y consulta (catálogos, manuales, publicaciones periódicas, etc.).

La colección de ex libris de Dª Gloria Rokiski Lázaro

Se compone, como ya mencionamos, de más de 600 ex libris. Proceden en su mayoría de los países del este de Europa: más de 300 son de Polonia, unos 100 de países de la antigua URSS, principalmente Rusia, y en torno a 50 de otros estados. El resto lo componen ex libris de España, Italia, Inglaterra, Austria, Alemania, Portugal, Francia y Japón.

La mayoría están fechados en el siglo XX, predominando los realizados entre los años 60 y 80. Su diseño recorre todos los estilos del siglo XX, desde ejemplares catalanes, austriacos y checos de Art Nouveau, centroeuropeos de tendencia expresionista, simbolistas, cubistas, hasta la abstracción geométrica. Se incluyen también ex libris grabados a color, técnica minoritaria pero de gran belleza. Aparecen poseedores con varios ex libris y diseñadores con obras realizadas para distintos propietarios.

Entre todos ellos destacamos por su particular interés o curiosidad:

• La colección de ex libris diseñados por el búlgaro Pencho Koulekov en torno a 1980, reinterpretando las técnicas del grabado xilográfico tradicional centroeuropeo y la composición de los iconos medievales.
• Ex libris de 1948 del coleccionista italiano y fundador de la FISAE, Gianni Mantero (1897-1985).
• Los ejemplares británicos de temática heráldica y paisajísticas.
• La riquísima variedad iconográfica de los ex libris polacos, con motivos heráldicos, femeninos, macabros, panorámicas de ciudades o edificios, representaciones de libros y bibliotecas, etc.
• Los cuatro ex libris de Nicolae Ceausescu, presidente de Rumanía entre 1965 y 1989, con escenas alegóricas sobre la paz, el progreso y el bienestar.
• Los ex libris infantiles soviéticos dedicados a Anna Ivenskaya y Anna Frolow por sus padres.
• El ex libris heráldico a color de 1943 del polaco Tadeusz Przypkowski (1905-1977), bibliófilo, fotógrafo y coleccionista de relojes de sol y el ex libris conmemorativo del Przypkowski State Museum de Jedrzejow donde se conserva la colección de relojes creada por su familia.
• Los ex libris de diseño constructivista de la década de 1970 del artista lituano Vincas Kisarauskas (1934-1988).

Entre los ex libris españoles sobresalen:

• Ex libris tipográfico del Duque de Alba, Marqués de Villa Franca, dibujado por Isidro Carnicero y grabado por Juan Antonio Salvador Carmona a finales del siglo XVIII o primeros años del XIX.
• Ex libris del Conde de Peralada, de finales del siglo XIX.
• Ex libris modernista de Rudolf Neumann, fotograbado a cinco tintas obra de Alejandro de Riquer en 1903, que representan una joven bajo un árbol entre los bustos de Dante y Beatriz, con la leyenda "Belletza".
• Dos de tema quijotesco pertenecientes al librero anticuario Luis Bardón y al cervantista Juan Sedó Peris-Mencheta (1908-1966).
• Ex libris de la escritora Concha Espina (1869-1955), con la leyenda "Velar se debe a la vida, de tal suerte que viva quede en la muerte" tomada de su obra de 1915 La rosa de los vientos.
• Ex libris del editor Saturnino Calleja (1853-1915) realizado por el dibujante Joaquín Renart.
• Ex libris de Antón Pach de 1922, aguafuerte a color del pintor Ramón Borrell Pla (1876-1963), representando a un hombre a punto de arrojar a una mujer por un acantilado.
• El Cristo en majestad del ex libris de Mercé Galí, realizado por Juan Mas y Mascaró ca. 1930-1940.
• El ex libris heráldico conyugal de 1947 de Cesar y Enriqueta, Marqueses de Casasola.
• Ex libris de Agustín Arrojo Muñoz (1910-1984), uno de los grandes exlibristas de finales de los sesenta.

No podemos finalizar esta introducción sin invitar a investigadores y amantes del exlibrismo a conocer esta interesante y excepcional donación, esperando que en un futuro los fondos de nuestra biblioteca se vean incrementados por legados tan estimables y apreciados como el realizado por Dª Gloria Rokiski.

Bibliografía

• De la Torre Villar, Ernesto. Ex libris y marca de fuego. Universidad Nacional Autónoma de México, 2000.
• Delgado Casado, Juan. Los ex libris españoles. Vicente García editores, 1996.
• Ferrand, Pablo. Signo personal en los libros: exlibris. Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Huelva y Sevilla, 1990.
• Huarte Morton, Fernando. Exlibris. Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros, 1987.
• Orenes, Francesc. Ex libris de la propietat dels llibres. Arola editores, 2000.
• Web sobre ex libris heráldicos: The Cyber Journal of Heraldic Bookplates