La primera intervención del tratamiento determinado para la obra es el desmontaje de la cubierta de la encuadernación. El desmontaje debe ser documentado ya que a menudo se extrae información del ejemplar que pasa desapercibida al estar oculta por la cubierta y las guardas. Esta operación fue realizada por nuestra compañera Pilar Puerto y consistió en: 1- el despegado de las guardas y solapas de refuerzo, 2- soltar los enlaces de los cordeles sobre las tapas, 3- despegar la piel de la cubierta del lomo, separándose con esto las tapas y cubierta del cuerpo del libro. En este estado se aprecia ya una información oculta que es el número que el encuadernador asignó al libro en la serie de libros que encuadernaba al mismo tiempo. En este caso el "10", que aparce pintado en el lomo del libro y en la piel de la cubierta. [Seguir leyendo]
Descubierto el lomo, se aprecia que la costura está realizada sobre 2 nervios, siendo los otros dos, fragmentos de cuerda adheridos como falsos nervios. Asimismo se aprecia que el encuadernador insertó un cordel en los nervios que soportan la costura para poder encartonar las nuevas tapas. Esto significa que el artesano aprovechó la costura de la anterior encuadernación para cubrir el libro con nuevas tapas y cubierta.
Se aprecia que el enlomado está formado por bandas de papel blanco adheridas sobre el lomo en los entrenervios, dejando solapas de refuerzo de la unión con las tapas que fueron pegadas sobre la contratapa. En este sentido, otra deducción a partir del estado y orden de los elementos es que el encuadernados pegó estas solapas de refuerzo sobre la cara interna de las tapas antes de cubrir la estructura con la piel, ya que la solapas quedan bajo la piel en las vueltas de pie y cabeza.
Las siguientes operaciones consistieron en desmontar las cabezadas, seccionando los enlaces y extrayéndolas de su ubicación. Fueron etiquetadas y guardadas para volver a colocarlas tras el tratamiento, si fuera posible. A continuación se despegaron los falsos nervios y las tiras de papel del enlomado, retirando en el mismo acto buena parte de la cola que impregnaba el lomo -cola fuerte de huesos-. Para todas estas operaciones utilizamos un gel acuoso que se aplica para reblandecer el adhesivo y despegar todos estos elementos.
En este estado, con el lomo limpio de adhesivo, aparece un hilo de color azul que recorre la costura de uno de los cuadernos -el resto de la costura está realizada con hilo blanco-. Esta circunstancia podría obedecer, en principio, a dos situaciones: el encuadernador que realizó la costura original anterior a esta reencuadernación, olvidó coser el cuaderno y luego lo incorporó con este hilo, o bien en la reencuadernación ese cuaderno estaba suelto y el artesano consolidó la costura con el hilo azul. Esta última hipótesis es más probable ya que en el mismo cuaderno aparecen vestigios del cosido con hilo blanco.
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