El diseñador donostiarra Santos Regaña, el maestro chocolatero Enric Rovirá y el matemático Enrique Zuazua han conseguido aunar el placer físico que produce comer chocolate (ya se sabe que aumenta los niveles de serotonina, actuando como euforizante) con el placer intelectual de resolver un problema matemático. Pitágoras- así se llama la singular chocolatina- pesa 180 gramos y se comercializa a 13 euros la unidad, aunque según parece es un producto de tiendas gourmet que es más sencillo encontrar en Tokio que en Bilbao.
El maestro chocolatero Enric Rovirá se encargó de dar sabor, con un aromático chocolate de 70% de pureza. Enrique Zazua, director científico de Basque Center of Applied Mathematics, creó la fórmula matemática que a su vez estaba inspirada en una idea del diseñador gráfico Santos Regaña.
La idea se gestó después de que el diseñador Emili Prados hubiera trabajado en un proyecto que versaba en partir el chocolate en porciones diferentes. "Entonces, en lugar de hacer una partición regular, pensamos en hacer algo que aparentase porciones muy diferentes y, sin embargo, fueran todas iguales", afirma Regaña. En este punto nace el dibujo enigmático, misterioso. Triángulos rectángulos cada vez más obtusos los cuales a primera vista parecen diferentes. Para llevar a la realidad este boceto Enrique Zuazua creó una ecuación de segundo grado que se trasladó a la tableta. De esta forma se ha creado la mandala por excelencia: cinco cuadrados concéntricos, que en su rotación va dibujando triángulos rectángulos cada vez más obtusos. Esta estructura encierra una teoría creada por Zuazua de manera que, cada triángulo, aunque pareciera distinto y obtuso al anterior el peso es exactamente el mismo. En total son 20 triángulos y cualquier porción que se escoja, tendrá la misma cantidad de este oro negro.
Ver video con los autores de la creación
Fuentes: