En la página Web de la SEBBM, dentro del apartado de "La ciencia al alcance de tu mano" , se publica el artículo titulado "La alergia: una epidemia del siglo XXI".
La autora, Mayte Villalba, es profesora del Dpto. Bioquímica y Biología Molecular de la UCM. Su campo de investigación está centrado en la identificación de proteínas alergénicas de diversos pólenes y alimentos así como la puesta a punto de herramientas diagnósticas y terapéuticas para esta enfermedad.
En este artículo de divulgación, la autora nos habla de la alergía como "una alteración del sistema inmunológico producida por una enorme variedad de sustancias, tanto biológicas como sintéticas". Siendo las fuentes de sensibilización más frecuentes: los pólenes, alimentos, ácaros, epitelios de animales, veneno de insectos, látex y fármacos diversos.
Por inhalación, ingestión, inyección o contacto, estas sustancias alcanzan los centros neurálgicos del sistema inmunológico. Los alérgenos que provocan estas alergias son proteínas, inocuas para algunos, pero que en las personas alérgicas procuden reacciones de hipersensibilidad.
Mayte Villalba señala que el 50% de los habitantes de los países industrializados van a verse afectados en la década de los 40. La población de los países desarrollados, donde los niveles de higiene son elevados, serán las victimas propicias. Por tanto, tendremos que aprender a convivir con estas alergias.
Los pólenes - del olívo, las arizónicas, la Salsola - ocupan la primera posición como fuente biológica de alergías en la población; en segungo lugar, los alimentos y, en último lugar, los fármacos.
Para aplicar un buen tratamiento es necesario que realizar un diagnóstico seguro y eficaz. Actualmente, los métodos convencionales que se emplean en las consultas se basan en diagnósticos erróneos. Para poder realizar un diagnóstico molecular que permita la aplicación de vacunas más sencillas y seguras que las actuales es necesario obtener "una colección de alérgenos purificados de cada fuente biológica".