En un artículo publicado en la revista ACS Nano, científicos de la universidad de Rice explican cómo se puede producir grafeno a partir de  un material tan común como las "Girl Scout Cookies" - las galletas de las niñas exploradoras-.

El experimento tuvo su origen en una apuesta entre dos grupos científicos, después de que uno de los grupos anunciará que habían creado grafeno a partir de azúcar, un miembro del otro equipo sugirió que "sería posible hacerlo a partir de cualquier fuente de carbono. Por ejemplo, las galletas que venden las chicas de los grupos Scouts."

Aunque en este caso la investigación comenzará como una broma, es cierto que en muchos laboratorios se experimenta con este material, debido a sus aplicaciones en áreas como la electrónica o la mecánica. Hace algunos años se necesitaba un equipo bastante complejo para producir grafeno, pero los científicos han mejorado tanto los procesos necesarios para obtener esta molécula que es posible crear grafeno a partir de las galletas.

El grafeno es una molécula, de un átomo de espesor, formada por carbono.  Los investigadores de la universidad de Rice diseñaron un proceso de obtención de este material a partir del contenido en carbono que poseen las famosas galletas. Gedeng Ruan y Zhengzong Sun, junto a Tour, lograron convertir parte de una galleta en grafeno suficiente para cubrir una superficie equivalente a tres canchas de fútbol. Lo relevante de esta investigación es que "el carbono, muy abundante en una de sus formas, puede convertirse en algo muy valioso cuando se le somete a un proceso que redistribuye los átomos que lo componen."

Referencia bibliográfica:

Ruan, Gedeng. Growth of Graphene from Food, Insects, and Waste, ACS nano, 2011, DOI: 10.1021/nn202625c

Fuente: ABC.es