Un equipo internacional de científicos ha descubierto, gracias al análisis de dientes fosilizados de entre 2,4 y 1,7 millones de años de antigüedad hallados en cuevas de Sudáfrica, que las hembras de Australopithecus africanus y Paranthropus robustus se desplazaban del lugar de nacimiento y cambiaban de grupo a lo largo de su vida mientras que los machos se quedaban cerca 'de casa'.
"Cuando alcanzaban la edad adulta, los machos permanecían en su comunidad de origen mientras que las mujeres se marchaban para unirse a otros grupos".
El estudio, publicado ahora en Nature, ha permitido analizar, a través del uso de isótopos del estroncio, el esmalte dental de 19 homínidos (ocho Australopithecus africanus y once Paranthropus robustus) cuyos restos se hallaron en las cuevas Sterkfontein y Swartkrans (Sudáfrica).
Los resultados demuestran que solo el 10% de los dientes de homínidos macho no pertenecían a la zona local, mientras que más de la mitad de los dientes de hembras procedía de fuera. "Cerca del 90% de los homínidos macho crecieron en la misma zona donde murieron, es decir, cerca de las cuevas".
Según los investigadores, los Australopithecus se caracterizaron por un patrón de dispersión femenino, ya que las hembras no crecieron en las inmediaciones de las cuevas donde se encontraron los fósiles.
Una de las razones por las que las hembras abandonaban el lugar de nacimiento era evitar la endogamia, si bien no era impuesta sino resultado de la cooperación entre machos.
El uso de análisis de isótopos del estroncio del esmalte dental ha permitido arrojar luz sobre el lugar donde vivían los homínidos. El estroncio, un elemento que aparece de forma natural en piedras y en la tierra, es absorbido por las plantas y animales y se puede encontrar en trazas de dientes de mamíferos, por lo que los isótopos del estroncio reflejan las condiciones geológicas específicas y revelan la ubicación de un individuo en concreto.
Fuente: SINC (01/06/2011) de la noticia aparecida en Nature News (01/06/2011)