En el Día Internacional de la Mujer, nos acercamos a la obra de Charlotte Guillard, dos veces viuda de impresores, primero de Berthold Rembolt y, más tarde, de Claude Chevallon, el célebre editor patrístico. Su carrera despegó a raíz del fallecimiento de su último marido, y se convirtió en la patrona y heredera del taller, con la enseña distintiva del sol de oro. Sus impresiones son famosas por el cuidado con el que se hicieron y, frente a la competencia, emprendió toda una revolución tipográfica a la conquista de un mercado emergente. Esta figura excepcional del Renacimiento francés permitió a su empresa acaparar el mercado de la edición jurídica y de los Padres de la Iglesia. Asociando en un mismo proyecto intelectual a teólogos conservadores y eruditos seducidos por las novedades, su producción testimonia la vitalidad de los debates que agitan los medios intelectuales y humanistas en el siglo de las Reformas.
[Seguir leyendo] Mujeres en la Biblioteca Histórica: Charlotte Guillard (1485?-1557), impresora en el París del siglo XVI