Titulo: Lecturas de teoría
sociológica clásica
Profesor: Mario Domínguez Sánchez
Departamento de Sociología V/Teoría Sociológica
Curso 2001-2002
TEMA
11. El
problema de la comunidad: Fréderic Le Play y Ferdinand
Tönnies
TEMA 12. La
institucionalización de la sociología: Émile Durkheim
TEMA 13. La
sociología formal: Georg Simmel
TEMA 14. La
sociología comprensiva: Max Weber
TEMA 15. Socialización
e internalización: Sigmund Freud
TEMA 16. La
teoría clásica de las élites: Robert Michels
TEMA 17. La
escuela de Chicago I
Charles Horton
Cooley: Organización social
William Isaac
Thomas: El campesino polaco en Europa y América
TEMA 18. La
escuela de Chicago II:
George Herbert Mead
TEMA 19.
El funcionalismo
antropológico
Bronislaw
Malinowski: Crimen y costumbre en la sociedad
salvaje
A. R. Radcliffe
Brown: Estructura y función en la sociedad
primitiva
Tema 19.
Estructura y función en la sociedad primitiva
A.R.
Radcliffe Brown:
Estructura
y función en la sociedad primitiva
Introducción
Los
trabajos aquí reimpresos son trabajos ocasionales en el más
amplio sentido de la palabra; cada uno de ellos fue escrito
para una ocasión particular. Sin embargo, por haber sido
escritos desde un punto de vista teórico particular, poseen
cierta medida de unidad.
Lo
que se da a entender, por teoría es un esquema de
interpretación que se aplica, o se concibe para aplicarlo, a
la comprensión de una cierta clase de fenómenos. Una teoría
consiste en una serie de conceptos analíticos que pueden
definirse claramente en su referencia a la realidad concreta y
que deben relacionarse lógicamente. Me propongo, por tanto, a
modo de introducción a este grupo de trabajos, exponer las
definiciones de algunos conceptos que he utilizado para
analizar los fenómenos sociales. Ha de tenerse en cuenta que
no existe un acuerdo general entre los antropólogos respecto
a los conceptos y términos que utilizan, de modo que esta
introducción y los artículos siguientes han de considerarse
como la expresión de una teoría particular y no como una
teoría aceptada comúnmente.
Historia
y teoría
La
diferencia entre el estudio histórico y el estudio teórico
de las instituciones sociales puede verse fácilmente
comparando la historia económica y la economía teórica, o
comparando la historia del Derecho con la jurisprudencia teórica.
En antropología, sin embargo, ha existido, y existe aún,
gran confusión, mantenida por los debates en los que términos
tales como «historia» y «ciencia» o «teoría», se
utilizan con significados muy distintos. Tal confusionismo
puede evitarse, en gran medida, utilizando términos
reconocidos de lógica y metodología- y haciendo una
diferenciación entre los análisis ideográficos y los nomotéticos.
En
un análisis ideográfico el objetivo es establecer como
aceptables ciertas proposiciones o exposiciones particulares o
positivas. Definimos la naturaleza de un análisis según el
tipo de conclusiones que se persiguen.
La
Historia, tal como se entiende habitualmente, es el estudio de
escritos y documentos que nos proporcionan conocimientos sobre
las condiciones y acontecimientos del pasado, incluyendo
aquellas investigaciones que se refieren al pasado más
reciente. Es evidente que la Historia consiste primariamente
en análisis ideográficos. En el siglo pasado hubo una famosa
polémica (Methodenstreit) sobre si los historiadores debían
admitir consideraciones teóricas en su trabajo o utilizar las
generalizaciones. Muchos historiadores han adoptado el
criterio de que los análisis nomotéticos no deben ser
incluidos en los estudios históricos, que han de limitarse a
decirnos lo que sucedió y cómo sucedió. Los análisis teóricos
o nomotéticos han de dejarse a la sociología. Pero hay
muchos escritores que creen que el historiador puede, e
incluso debe, incluir las interpretaciones teóricas en su
informe sobre el pasado. La controversia sobre esto, y sobre
la relación entre Historia y sociología, continúa después
de sesenta años. Ciertamente existen escritos de
historiadores que han de valorarse no sólo como informes
ideográficos de los hechos del pasado, sino que incluyen
también interpretaciones teóricas (nomotéticas) de tales
hechos. La tradición de los estudios históricos franceses de
Fuste¡ de Coulanges y sus seguidores (como Gustave Glotz)
ilustran este tipo de combinación. Algunos autores modernos
se refieren a ello como historia sociológica o sociología
histórica.
En
antropología, entendiendo por tal el estudio de los llamados
pueblos primitivos o atrasados, el término etnografía se
aplica a lo que es específicamente una forma de análisis
ideográfico, cuyo objeto es proporcionar informes aceptables
de tales pueblos y de su vida social. La etnografía difiere
de la Historia, en que el etnógrafo deriva su conocimiento, o
la parte más importante de éste, de la observación directa
o el contacto con el pueblo sobre el que escribe, y no de
informes escritos como el historiador. La arqueología prehistórica,
que es otra rama de la antropología, es claramente un estudio
ideográfico cuyo objetivo es proporcionarnos un conocimiento
real sobre el pasado prehistórico.
El
estudio teórico de las instituciones sociales en general se
considera normalmente como sociología, pero como tal
denominación puede ser libremente utilizada en muchos tipos
diferentes de estudios sobre la sociedad, podemos hablar más
específicamente de sociología teórica o comparativa. Cuando
Frazer dio su lección inaugural como el primer profesor de
antropología social en 1908, definió la antropología social
como la rama de la sociología que trata de las sociedades
primitivas.
Algunas
confusiones entre los antropólogos se deben a no distinguir
entre la explicación histórica de las instituciones y la
comprensión teórica. Si preguntamos porqué existe cierta
institución en una sociedad particular, la respuesta adecuada
es una exposición histórica de su origen. Para explicar por
qué los Estados Unidos tienen una constitución política con
un presidente, dos congresos, un gabinete y un tribunal
supremo, nos remitimos a la historia de Norteamérica. Tal es
una explicación histórica en el sentido propio del término.
La existencia de una institución se explica por referencia a
una serie compleja de hechos que constituyen una cadena causal
de la que esa institución es resultado.
La
admisibilidad de una explicación histórica depende de la
amplitud y precisión del informe histórico. En las
sociedades primitivas que estudia la antropología social no
existen los informes históricos. No conocemos el desarrollo
de las instituciones sociales entre los aborígenes
australianos, por ejemplo. Los antropólogos, considerando su
estudio como estudio histórico, recurren a la conjetura y a
la imaginación e inventan explicaciones «pseudohistóricas»
o «pseudocausales». Contamos, por ejemplo, con innumerables
informes pseudohistóricos, a veces contradictorios, sobre el
origen y desarrollo de las instituciones totémicas de los
aborígenes australianos. En los trabajos de este volumen se
mencionan ciertas especulaciones pseudohistóricas. El
criterio aquí adoptado es que tales especulaciones no son
meramente inútiles sino algo mucho peor. Esto no implica en
modo alguno la exclusión de la explicación histórica, sino
todo lo contrario.
La
sociología comparativa, de la que la antropología social es
una rama, se concibe aquí como un estudio teórico o nomotético
cuyo objetivo es proporcionar generalizaciones aceptables. La
comprensión teórica de una institución particular es su
interpretación a la luz de tales generalizaciones.
El
proceso social
La
primera cuestión que ha de plantearse si vamos a formular una
teoría sistemática de sociología comparativa es: ¿Cuál es
la realidad fenoménica, concreta, observable, a la que se
refiere la teoría? Algunos antropólogos dirían que la
realidad consiste en «sociedades» concebidas en una u otra
forma como entidades reales concretas. Otros, sin embargo, al
describir la realidad que ha de ser estudiada la consideran
compuesta por «culturas», cada una de las cuales se concibe
de nuevo como cierto tipo de entidad diferenciada. Todavía
hay otros que consideran objeto del estudio ambos tipos de
entidades, :sociedades» y «culturas», de modo que la relación
de éstas plantea entonces un problema.
Mi
propia opinión es que la realidad concreta a la que el antropólogo
social está dedicado mediante la observación, descripción,
comparación y clasificación, no es ningún tipo de entidad
sino un proceso, el proceso de la vida social. La unidad de
investigación es la vida social de alguna región particular
de la Tierra durante un cierto periodo de tiempo. El proceso
consiste en una inmensa multitud de acciones e interacciones
de seres humanos, actuando individualmente o en combinaciones
o grupos. Entre la diversidad de hechos particulares, existen
manifiestas regularidades, de modo que es posible proporcionar
informes o descripciones de ciertos rasgos generales de la
vida social de una región determinada. El informe de tales
rasgos generales significativos del proceso de la vida social
constituye una descripción de lo que puede denominarse una
forma de vida social. Concibo la antropología social como el
estudio teórico comparativo de formas de vida social entre
los pueblos primitivos.
Una
forma de vida social entre una cierta agrupación de seres
humanos puede permanecer más o menos igual durante un cierto
periodo. Pero a lo largo de un espacio de tiempo suficiente,
la propia forma de vida social sufre cierta modificación o
cambio. Por lo tanto, mientras podemos considerar los hechos
de la vida social como constitutivos de un proceso, existe
además este proceso de cambio en la forma de la vida social.
En una descripción sincrónica damos un informe de una forma
de vida social tal como existe en un momento determinado, todo
lo más separada posible de los cambios que puedan producirse
en sus rasgos. Un informe diacrónico, por otro lado, es el
informe de tales cambios durante un período de tiempo. En la
sociología comparativa tenemos que tratar teóricamente de la
continuidad de las formas de la vida social y de los cambios
producidos en tales formas.
Cultura
Los
antropólogos utilizan la palabra «cultura» en muchos
sentidos diferentes. Creo que algunos la utilizan como
equivalente a lo que yo llamo forma de vida social. En su común
acepción en inglés, «cultura», que encierra en gran parte
la misma idea que cultivación, se refiere a un proceso
mediante el cual una persona adquiere por contacto con otras
personas o por contacto con cosas tales como libros u obras de
arte, conocimiento, habilidad, ideas, creencias, gustos,
sentimientos. En una sociedad particular podemos descubrir
ciertos procesos de tradición cultural, utilizando la palabra
tradición en su significado literal de transmisión de unas
generaciones a otras. En este sentido, la comprensión y
utilización del lenguaje se transmite por un proceso de
tradición cultural. Mediante ese proceso, un inglés aprende
a comprender y utilizar el idioma inglés, pero en algunos
sectores de la sociedad puede aprender también latín,
griego, francés o galés. En las complejas sociedades
modernas existe un gran número de tradiciones culturales
separadas. Por un lado, una persona puede aprender a ser
doctor o cirujano, y por otra, puede aprender a ser ingeniero
o arquitecto. En las formas más simples de vida social el número
de tradiciones culturales separadas puede reducirse a dos, una
para los hombres y otra para las mujeres.
Si
consideramos la realidad que estamos investigando, no como una
entidad sino como un proceso, entonces cultura y tradición
cultural definen ciertos aspectos reconocibles de tal proceso,
pero no todo el proceso. Los términos son formas convenientes
de referirse a ciertos aspectos de la vida social humana.
Debido a la existencia de cultura y de tradiciones culturales,
la vida social humana difiere notablemente de la vida social
de otras especies animales. La transmisión de formas
aprendidas de pensar, sentir y actuar constituye el proceso
cultural, que es un rasgo específico de la vida social
humana. Es, por supuesto, parte del proceso de interacción
entre personas, y se define aquí cómo el proceso social
considerado como la realidad social. La continuidad y el
cambio en las formas de la vida social objeto de investigación
de la sociología comparativa, la continuidad de tradiciones
culturales y los cambios en tales tradiciones, figuran entre
las cuestiones a tener en cuenta.
Estática
y dinámica
A
mediados del siglo XVIII Montesquieu estableció los
fundamentos de la sociología comparativa, formuló y utilizó
un concepto al que se ha aludido y se alude utilizando el término
sistema social. Su teoría, que constituía lo que Comte llamó
más tarde «la primera ley de estática social», era que en
una forma particular de vida social existen relaciones de
interconexión e interdependencia, o lo que Comte llamaba
relaciones de solidaridad entre los diversos rasgos. La idea
de un sistema natural o fenoménico es la de una serie de
relaciones entre los hechos, exactamente como un sistema lógico
-tal como la geometría de Euclides -es una serie de
relaciones entre proposiciones, o un sistema ético, un
sistema de relaciones entre juicios éticos. Cuando se habla
del «sistema bancario» de Gran Bretaña, se alude al hecho
de que existe un gran número de acciones, interacciones v
transacciones tales como los pagos mediante cheques firmados
emitidos por un banco, por ejemplo-relacionados de modo que
constituyen en su totalidad un proceso del que podemos hacer
una descripción analítica que mostrará cómo están
interrelacionados y forman así un sistema. Se trata, desde
luego, de un proceso, una compleja parte del proceso social
total de la vida social en Gran Bretaña.
En
estos ensayos me he referido a «sistemas de parentesco». La
idea es que en una sociedad dada podemos aislar
conceptualmente, si no en la realidad, una serie determinada
de acciones e interacciones entre personas que están
determinadas por las relaciones de parentesco y matrimonio, y
que en una sociedad particular están interrelacionadas de tal
modo que podemos dar una descripción analítica general de
ellas como partes componentes de un sistema. La significación
teórica de esta idea de los sistemas supone que nuestro
primer paso en un intento por comprender un rasgo regular de
una forma de vida social, tal como el uso de cheques o la
costumbre que prohíbe a un hombre tener contacto social con
la madre de su mujer, es descubrir su lugar en el sistema
social del que forma parte.
La
teoría de Montesquieu, sin embargo, es lo que podemos llamar
una teoría de un sistema social total, según la cual todos
los rasgos de la vida social se hallan unidos formando un
conjunto coherente. Como estudiante de jurisprudencia,
Montesquieu estaba primordialmente interesado en las leyes e
intentaba demostrar que las leyes de una sociedad están
relacionadas con la constitución política, la vida económica,
la religión, el clima, la densidad de población, los hábitos
y costumbres, y lo que él llamaba el espíritu general
(esprit général), lo que se ha llamado más tarde el ethos
de la sociedad. Una ley teórica tal como esta «ley
fundamental de la estática social», no es lo mismo que una
ley empírica, sino una guía para la investigación. Nos da
motivo para pensar que podemos mejorar nuestra comprensión de
las sociedades humanas si investigamos sistemáticamente las
interconexiones entre los rasgos de la vida social.
Estática
y dinámica
Comte
señaló que en sociología, como en otros tipos de ciencia,
existen dos clases de problemas, que él denominaba problemas
de estática y problemas de dinámica. En estática intentamos
descubrir y definir las condiciones de existencia o de
coexistencia; en dinámica tratamos de descubrir las
condiciones de cambio. Las condiciones de existencia de moléculas
u organismos están dentro del campo de la estática, y
similarmente las condiciones de existencia de las sociedades,
sistemas sociales, o formas de vida social. Mientras que los
problemas de la dinámica social se refieren a las condiciones
de cambio de las formas de vida social.
La
base de la ciencia es una clasificación sistemática. La
primera tarea de la estática social es intentar comparar las
formas de vida social para derivar clasificaciones. Pero las
formas de vida social no pueden ser clasificadas en especies y
géneros al igual que se clasifican las formas de vida orgánica;
la clasificación no ha de ser específica sino tipológica, y
éste es un tipo de investigación más complicado. Puede únicamente
lograrse mediante el establecimiento de tipologías para los
rasgos de la vida social o los complejos de rasgos que se dan
en sistemas sociales parciales. No sólo es una labor
complicada, sino que ha sido abandonada en vista de que el método
antropológico debería ser un método histórico.
Pero
aunque los estudios tipológicos son una parte importante de
la estática social, existe otra tarea, la de formular
generalizaciones sobre las condiciones de existencia de los
sistemas sociales o de las formas de vida social. La llamada
primera ley de estática social es una generalización que
afirma que para que cualquier forma de vida social persista o
continúe, los diversos rasgos han de exhibir cierto tipo y
medida de coherencia o consistencia, pero esto define únicamente
el problema de la estática social, que consiste en investigar
la naturaleza de esta coherencia.
El
estudio de la dinámica social se ocupa de establecer
generalizaciones sobre cómo cambian los sistemas sociales. Un
corolario de la hipótesis de la conexión sistemática de
rasgos de la vida social es que los cambios en algunos rasgos
son susceptibles de producir cambios en otros rasgos.
Evolución
social
La
teoría de la evolución social fue formulada por Herbert
Spencer como parte de la formulación de su teoría general de
la evolución. Según tal teoría, el desarrollo de la vida en
la tierra constituye un proceso único al que Spencer aplica
el término «evolución». La teoría de la evolución
(social) orgánica y superorgánica puede reducirse a dos
proposiciones esenciales: 1. Tanto en el desarrollo de formas
de vida orgánica como en el desarrollo de formas de vida
social humana ha habido un proceso de diversificación
mediante el cual muchas formas diferentes de vida orgánica o
de vida social se han desarrollado más allá de un número
mucho mayor de las formas originales. 2. Ha existido una
tendencia general al desarrollo mediante la cual las formas más
complejas de estructura y organización (orgánica o social)
se han originado a partir de las formas más simples. La
aceptación de la teoría de la evolución requiere únicamente
la aceptación de estas proposiciones, que nos proporcionan un
esquema de interpretación para aplicarlo al estudio de la
vida orgánica y social. Pero ha de recordarse que algunos
antropólogos rechazan la hipótesis de la evolución. Podemos
aceptar provisionalmente la teoría fundamental de Spencer,
aunque rechazando las diversas especulaciones pseudohistóricas
que añadió. Esta aceptación nos proporciona ciertos
conceptos que pueden ser útiles como instrumentos analíticos.
Adaptación
Es
éste un concepto clave en la teoría de la evolución. Se
aplica, o puede aplicarse, tanto al estudio de las formas de
vida orgánica como a las formas de vida social entre los
seres humanos. Un organismo vivo existe y continúa existiendo
únicamente si está interna y externamente adaptado. La
adaptación interna depende del ajuste de los diversos órganos
y sus actividades, de tal modo que los diversos procesos
fisiológicos constituyan un sistema de funcionamiento
continuo, mediante el cual se mantiene la vida del individuo,
La adaptación externa es la del organismo al medio ambiente
en el cual vive. La distinción de adaptación interna y
externa es únicamente una forma de diferenciar dos aspectos
del sistema de adaptación, que es el mismo para los
organismos de una misma especie.
En
la vida social de los animales aparece otro rasgo de adaptación.
La existencia de una colonia de abejas depende de una
combinación de las actividades de las abejas obreras en la
recolección de miel y polen, la fabricación de cera, la
construcción de las celdas, el cuidado de los huevos y larvas
y la alimentación de estas últimas, la protección de la
miel de los ladrones, la ventilación de la colmena abanicando
con sus alas, el mantenimiento de la temperatura en el
invierno permaneciendo juntas. Spencer utiliza el término «cooperación
al referirse a este rasgo de la vida social. Vida social y
adaptación social, por tanto, implican el ajuste del
comportamiento de organismos individuales a las exigencias del
proceso gracias al cual la vida social continúa.
Cuando
observamos una forma de vida social entre los seres humanos
como un sistema de adaptación, es útil distinguir tres
aspectos del sistema total. Existe la forma en la cual la vida
social se ajusta al medio ambiente físico, y podemos, si
queremos, hablar de ella como de adaptación ecológica.
Existen, en segundo lugar, las disposiciones institucionales
gracias a las cuales se mantiene la vida social ordenada, de
modo que se produzca lo que Spencer llama cooperación y el
conflicto se reprima o regule. Podemos llamar a esto, si así
lo deseamos, el aspecto institucional de la adaptación
social. En tercer lugar existe el proceso social mediante el
cual el individuo adquiere hábitos y características
mentales que le adaptan a un lugar en la vida social y le
capacitan para participar en sus actividades. Lo cual, si
queremos, puede denominarse adaptación cultural de acuerdo
con la primera definición de tradición cultural como
proceso. Ha de resaltarse que estas formas de adaptación no
son sólo aspectos diferentes de lo que se considera, por
conveniencia de análisis y comparación el sistema total de
adaptación.
La
teoría de la evolución social, por tanto, forma parte de
nuestro esquema de interpretación de los sistemas sociales al
examinar cualquier sistema dado como un sistema de adaptación.
La estabilidad del sistema, y su continuación durante un
cierto período depende, por tanto, de la efectividad de la
adaptación.
Estructura
social
La
teoría de la evolución es una tendencia al desarrollo
mediante la cual los tipos más complejos de estructura se
forman por derivación de los menos complejos. En este volumen
se incluye una conferencia sobre estructura social, pero fue
pronunciada durante la guerra y se imprimió en forma
abreviada, de modo que no está tan claro como podría estar.
Cuando usamos el término estructura nos referirnos a algún
tipo de disposición ordenada de partes o componentes. Una
composición musical tiene una estructura, y lo mismo una
frase. Un edificio tiene una estructura, e igualmente una molécula
o un animal. Los componentes o unidades de la estructura
social son personas y una persona es un ser humano considerado
no como organismo, sino como individuo que ocupa una posición
en la estructura social.
Uno
de los problemas teóricos fundamentales de la sociología es
el de la naturaleza de la continuidad social. La continuidad
de formas de vida social depende de la continuidad
estructural, es decir, cierto tipo de continuidad en las dos
posiciones de las personas entre sí. Actualmente, las
personas están dispuestas en naciones, y el hecho de que
durante setenta años yo haya pertenecido a la nación inglesa
a pesar de haber vivido la mayor parte de mi vida en otros países
es un hecho de estructura social. Una nación, una tribu, un
clan, un organismo, tal como la Academia Francesa, o como la
Iglesia romana, puede seguir existiendo como una disposición
de personas, aunque el personal, las unidades de las que están
compuestos, cambien de vez en cuando. Existe una continuidad
de estructura, de igual modo que un cuerpo humano, cayos
componentes son moléculas, mantiene una continuidad de
estructura aunque las moléculas reales de que consta el
cuerpo estén cambiando continuamente. En la estructura política
de los Estados Unidos ha de haber siempre un presidente; en un
momento es Herbert Hoover, en otro Franklin Roosevelt, pero la
estructura, como disposición, permanece continua.
Las
relaciones sociales, cuyo continuo entramado constituye la
estructura social, no son uniones de individuos al azar, sino
que están determinadas por el proceso social y toda relación
es tal que la conducta de las personas en sus interacciones
con cada una de las otras está controlada por normas, reglas
o patrones. De tal modo que en cualquier relación dentro de
una estructura social, toda persona sabe que se espera que se
comporte de acuerdo a esas normas, y se justifica esperando
que otras personas hagan lo mismo Reciben el nombre de
instituciones las normas de conducta establecidas de una forma
particular de vida social. Una institución es una norma
establecida de la conducta reconocida como tal por un grupo o
clase social distinguible, del cual, por tanto, es institución.
Las instituciones se refieren a un tipo o clase distinguible
de relaciones e interacciones. Así, en una sociedad definida
localmente, nos encontramos con que existen normas aceptadas
sobre la forma en que se espera que un hombre se comporte con
su mujer e hijos La relación de las instituciones con la
estructura social es por tanto, doble. Por un lado existe la
estructura social, tal como la familia en este caso, para
cuyas relaciones constitutivas las instituciones proporcionan
las normas; por el otro existe el grupo ‑la sociedad
local en este caso‑ en el cual la norma es establecida
por el reconocimiento general al definir el comportamiento
adecuado. Las instituciones, si tal término se usa para
referirse a la ordenación que la sociedad hace de las
personas en las relaciones sociales, tienen esta doble conexión
con la estructura, con un grupo o clase del que puede decirse
que es una institución y con aquellas relaciones dentro del
sistema estructural a las que se aplican las normas.
En
un sistema social puede haber instituciones que establezcan
normas de comportamiento para un rey, para los jueces en el
desempeño de los deberes de su oficio, para policías, para
padres de familia, etc., y también normas de comportamiento
para personas que entran en contacto con la vida social de
manera ocasional.
Ha
de mencionarse brevemente el término organización.
Evidentemente, el concepto está íntimamente ligado al de
estructura social, pero es deseable no tratar ambos términos
como sinónimos. Un uso adecuado, que no difiere del uso común
en inglés, es definir la estructura social como una ordenación
de personas en relaciones institucionalmente controladas o
definidas, tales como las relaciones de rey y súbdito, o la
de marido y mujer, y utilizar la palabra organización para
aludir a una ordenación de actividades. La organización de
una fabrica es la disposición de las diversas actividades del
director, encargados, obreros, dentro de la actividad total de
la fábrica. La estructura de una familia, compuesta por
padres, hijos y sirvientes, está controlada
institucionalmente. Las actividades de los diversos miembros,
de las personas de la casa, estarán sujetas probablemente a
alguna ordenación regular, y la organización de la vida de
la familia en este sentido puede ser diferente en las
distintas familias de la misma sociedad. La estructura de un
ejército moderno consiste, en primer lugar, en una ordenación
en grupos -regimientos, divisiones, cuerpos, etc.-, y en
segundo lugar en una ordenación en rangos ‑generales,
coroneles, mayores, cabos, etc.. La organización del ejército
consiste en la ordenación de las actividades de su personal,
sea en tiempo de paz, o en tiempo de guerra. Puede decirse que
dentro de una organización cada persona tiene un papel.
Podemos así decir que cuando tratamos con un sistema
estructural, nos referimos a un sistema de posiciones
sociales, mientras que en una organización tratamos con un
sistema de papeles.
Función
social
El
término función tiene un gran número de significados
diferentes según el contexto. En matemáticas la palabra, tal
como la introdujo Euler en el siglo XVIII, se refiere a una
expresión o símbolo que puede escribirse en un papel, tal
como «log x«, y no tiene relación alguna con la misma
palabra cuando se usa en una ciencia como la fisiología. En
fisiología el concepto de función es de suma importancia ya
que nos capacita para tratar con la relación continua de
estructura y proceso en la vida orgánica. Un organismo
complejo como el cuerpo humano, posee una estructura
consistente en una ordenación de órganos, tejidos y líquidos.
Incluso un organismo que consista en una única célula, posee
una estructura, consistente en una ordenación de moléculas.
Un organismo tiene también vida, y por esto nos referimos a
un proceso. El concepto de función orgánica es el usado para
referirse a la conexión entre la estructura de un organismo y
el proceso de la vida de ese organismo. Los procesos que
ocurren en el interior del cuerpo humano mientras está vivo
dependen de la estructura orgánica. La función del corazón
es bombear la sangre a todo el cuerpo. La estructura orgánica,
como estructura viva depende para su existencia continuada de
los procesos que componen los procesos totales de la vida. Si
el corazón deja de realizar su función, el proceso de la
vida llega a su fin y la estructura, como una estructura viva,
llega también a su fin. Así el proceso depende de la
estructura, y la continuidad de la estructura depende del
proceso.
Respecto
a los sistemas sociales y su comprensión teórica una forma
de usar el concepto de función es la misma que la usada científicamente
en fisiología. Puede usarse para hacer referencia a la
interconexión entre la estructura social y el proceso de la
vida social. Este uso de la palabra función según mi opinión,
hace que tal palabra sea útil en la sociología comparativa.
Los tres conceptos de proceso, estructura y función son,
pues, componentes de una teoría única, en cuanto esquema de
interpretación de los sistemas sociales humanos. Lógicamente,
los tres conceptos están interconectados, ya que "función"
se usa para aludir a la relación del proceso y la estructura,
La teoría puede aplicarse al estudio de la continuidad de las
formas de vida social, e igualmente a los procesos de cambio
en esas formas.
Si
consideramos un rasgo de la vida social, como el castigo de un
crimen, o en otras palabras, la aplicación por algún
procedimiento organizado, de sanciones penales a ciertos tipos
de comportamiento, y preguntamos cuál es su función social,
habremos planteado un problema fundamental de Sociología
comparativa, la primera aportación al cual fue realizada por
Durkheim en su Division du travail social. Se plantea
un problema general muy amplio cuando preguntamos cuál es la
función social de la religión. Como se subraya en uno de los
trabajos de este volumen, el estudio de este problema requiere
la consideración de gran número de problemas más limitados,
tales como el de la función social del culto a los
antepasados en aquellas sociedades en que existe Pero en estas
investigaciones más limitadas, si se acepta la teoría
esbozada aquí, el procedimiento ha de ser el examen de la
conexión entre los rasgos estructurales de la vida social y
el proceso social correspondiente, considerando ambos inmersos
en un sistema continuo.
El
primer ensayo de esta colección puede servir de ilustración
a estas ideas. Trata de una institución según la cual el
hijo de una hermana se permite una familiaridad privilegiada
en su comportamiento hacia el hermano de su madre. Tal
costumbre se conoce en tribus de Norteamérica, como la
winnebago y otras, en pueblos de Oceanía, como los habitantes
de las islas Fiji y Tonga, y en algunas tribus de África.
Efectué mis propias observaciones sobre esta institución en
las islas Tonga y Fiji, pero como el ensayo iba dirigido a una
audiencia sudafricana parecía preferible referirlo a un
ejemplo sudafricano, ya que una discusión comparativa más
amplia habría requerido un ensayo mucho más extenso. El modo
habitual de considerar esta institución tanto en Oceanía
como en África, era dar una explicación pseudohistórica:
era una reliquia en una sociedad patrilineal de una antigua
condición de derecho materno.
El
método alternativo de tratar la institución es buscarle un
sentido teórico como parte de un sistema de parentesco de un
tipo determinado, dentro del cual tiene una función que puede
investigarse. No tenemos aún una tipología sistemática
general de sistemas de parentesco, pues su elaboración es una
tarea compleja. He indicado algunos resulta dos parciales y
provisionales de un intento de determinar tipos en una
reciente publicación, una introducción a un libro sobre
sistemas africanos de parentesco y matrimonio. Entre la gran
diversidad de sistemas de parentesco, podemos, según creo,
reconocer un tipo que podemos denominar de derecho paterno, y
otro de derecho materno. En ambos, la estructura de parentesco
se basa en los linajes, teniendo una importancia suma las
relaciones entre linajes. En el derecho materno el linaje es
matrilineal, el hijo pertenece al linaje de la madre. Prácticamente
todas las relaciones de derecho natural de un hombre son las
de su linaje matrilineal y sus miembros, y por lo tanto
depende ampliamente de los hermanos de su madre, que ejercen
autoridad y control sobre él, y a los que acude en busca de
protección y para heredar su propiedad. En un sistema de
derecho paterno por otro lado, un hombre depende en gran
medida de su linaje patrilineal, y por tanto de su padre y de
los hermanos de su padre, quienes ejercen sobre él autoridad
y control, siendo a ellos a quienes acude en busca de protección
y herencia. El derecho paterno se representa por el sistema de
patria potestas de la antigua Roma, y hay sistemas que se
acercan más o menos a este tipo en África y en otros
lugares. Podemos considerar que el de los bathongas es
bastante parecido. El derecho materno se da en los sistemas de
los nayar en Malabar y de los malayos menankubau, y también
hay sistemas en otros lugares que se asemejan a éste.
El
objetivo del ensayo sobre el hermano de la madre puede decirse
que es contrastar con la explicación pseudohistórica la
interpretación de la institución a que se refiere, cuya
función radica en un sistema de parentesco con un determinado
tipo de estructura. Después de treinta años, si volviera a
redactar este ensayo seguramente lo modificaría y lo ampliaría.
Pero se me ha sugerido que el trabajo puede tener un cierto
interés histórico en relación a la evolución del
pensamiento en antropología, y por esto se reimprime casi
como fue escrito, con escasas correcciones.
Este
libro puede tener interés en cuanto exposición de una teoría,
en el sentido en que la palabra teoría se usa aquí, como un
esquema de interpretación, concebido para aplicarse a la
comprensión de una clase de fenómenos. La teoría puede
establecerse mediante los tres conceptos fundamentales y
relacionados de «proceso», «estructura y «función». Se
deriva de escritores como Montesquieu, Comte, Spencer y
Durkheim, y pertenece, por lo tanto, a una tradición cultural
de doscientos años. Esta introducción contiene una formulación
en la cual se usan algunos términos de modo distinto a como
fueron usados en algunos de los ensayos aquí reimpresos. Por
ejemplo, en los primeros ensayos escritos hace veinte años o
más, la palabra «cultura» se usa según el significado
entonces aceptado, como un término general para el modo de
vida, incluyendo el modo de pensar de un grupo social
particular localmente definido.
A.R.
Radcliffe Brown (1924-1952/1986): Estructura y función en
la sociedad primitiva. Barcelona, Planeta, pp. 25-35.
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