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Biblioteca de la Universidad Complutense de Madrid

Viernes, 26 de abril de 2024

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¿ES POSIBLE HOY UN MODELO EDUCATIVO SIN LA PRESENCIA DE LAS ARTES?

¿Por qué una obra de arte es una obra de arte? ¿Cómo se piensa creativamente? La diferencia entre el ME GUSTA y el ¿POR QUÉ ME GUSTA? Profundizar en la reflexión, en el por qué. En el campo artístico, la reflexión se convierte en crítica. Los giros culturales conciernen a muchas de las grandes reflexiones. Evidentemente, ninguna obra de arte es un milagro. Una obra de arte siempresucede porque se comprende la posibilidad de que suceda. No somos libres si no somos capaces de elegir. Nuestras elecciones nos definen, nuestras acciones vienen dadas por nuestras elecciones. En una misma línea, paralelamente, entran enjuego tres conceptos: PERSUADIR / ELEGIR / SER LIBRE. Elegir te hace libre. Ser persuadido no. Por lo tanto, no podemos pensar creativamente si no manejamos la ambigüedad.Un educador está situado en un contexto, en un espacio / tiempo al que se tiene que ceñir. El proceso de aprendizaje no puede separarse del contexto, ya que éste condiciona nuestro aprendizaje."Hoy en nuestras ciudades la mayor parte de la enseñanza tiene lugar fuera de la escuela. La cantidad de información comunicada por la prensa, las revistas, las películas, la televisión y la radio exceden en gran medida a la cantidad de información comunicada por la instrucción y los textos en la escuela. Este desafío hadestruido el monopolio del libro como ayuda a la enseñanza y ha derribado los propios muros de las aulas de modo tan repentino que estamos confundidos, desconcertados" (McLuhan, 1986)John Dewey sostiene que la educación fuera del aula es más vital, profunda y real; y que la educación formal o escolar es más abstracta y superficial, menos influyente, pero también más amplia, completa y segura.Fuera del aula nos espera un entorno puramente visual. Por lo tanto debe de ser fundamental el fomentar un pensamiento crítico, gracias al cual seamos capaces de no ser persuadidos, de poder establecer nuestros propios criterios, bebiendo de diversas fuentes y no sólo de las que los medios nos imponen. Por ello, se necesitan asignaturas que nos enseñen a leer visualmente, con las que podamos encender la televisión o leer un artículo en las redes sociales sin ser convencidos de que todo lo que ahí se dice es real.Para llevar a cabo esta postura en la educación, la de querer fomentar un pensamiento crítico en el alumnado, es necesario que lo vivido fuera del aula se proyecte en el interior de ésta. Lo que dará lugar a un método educativo más cercano y menos superficial. Los sujetos deben de ver la utilidad de las cosas demanera práctica, lo que aprenden debe de ser útil para ellos fuera de ese laboratorio al que llamamos aula. Como bien decía John Dewey "la escuela no es un lugar de preparación para la vida, sino un espacio de vida donde el alumnado puede desarrollar sus experiencias escolares adquiridas que va reconstruyendocontinuamente y desarrolla así otras nuevas".Ese laboratorio ha de saber utilizarse, tendrá que estar en continuo cambio, al igual que lo está nuestro alrededor. Adaptar el aula al tiempo en el que vivimos es fundamental.Cuando el señor Wert dice que la educación artística distrae de otras asignaturas no está mintiendo. Aprender a leer, a criticar, aprender a aprender... ¿distrae? Que un alumno se valga por sí mismo, siendo éste capaz de elegir, ¿es malo para él?¿Acaso Wert no está distraído? Siendo éste totalmente capaz de darse cuenta de que quizás, no sea conveniente, formar a alumnos lúcidos... Mucho más sencillo es para los superiores tener pupilos, dóciles y sumisos, cuya única preocupación seaaprobar un examen; estudiar el Teorema de Tales, el tipo de clima en las distintas zonas de España y para rematar la faena, colorear el círculo cromático sin salirse de la raya. De esta forma el alumno tendrá la formación necesaria para su correcta y sumisa funcionalidad dentro del engranaje social. Sin embargo, no cabe duda de que el ex-ministro goza de una gran formación estética, esa misma que niega a las nuevas generaciones, mientras él disfruta a nuestra costa de óperas, de la contemplación de obras de arte y de otras facetas artísticas.No es casualidad que con los tiempos que corren, puramente visuales, como ya he dicho, donde el ser humano ha dejado de ser un ciudadano para ser consumidor, se reduzca, casi haciéndola desaparecer, la educación artística. Optativa en primaria,con una presencia simbólica en la secundaria y con recursos escasos en los centros de arte, podemos hablar de una de las mayores crisis de la educación artística en la historia de la educación en España.Ken Robinson señala que "los cambios sociales y tecnológicos han modificado el mundo y ahora uno, tras pasar por la universidad, obtiene un título pero no un trabajo, y en el mundo laboral se pide una inteligencia diversa mientras que el sistema educativo merma algunas capacidades: no enseña a bailar igual que enseña matemáticas, no apuesta por la música porque no lo ve como algo de utilidad para un trabajo, y no educa a la totalidad del ser. Es evidente que el ser humano necesita la creatividad para llegar a la solución de los problemas. Se necesitan mentes despiertas, críticas, que emprendan. Se habla del emprendimiento como algoimprescindible en nuestro futuro, pero sin embrago el sistema educativo actual lo anula. Dice Petra María Pérez "cuando un niño contesta algo distinto a lo esperado los maestros le corrigen, y así van cercenando su capacidad de ser creativos e innovadores". El éxito escolar recae en las buenas notas, y quienes las sacan son los que se adaptan al sistema educativo, son los que repiten lo que el profesor ha dicho siguiendo patrones establecidos. No arriesgan, no se equivocan, no caen y se levantan; existe el miedo al error, a hacer el ridículo.Fuera de la educación formal, es decir, fuera del aula, el cine comercial, la publicidad, la fotografía de moda, etc, nos persuaden, nos prometen el paraíso. La vida del consumidor que ha dejado de ser únicamente ciudadano, parece cobrar sentido, tiene una clara meta: conseguir esa realidad idealizada, ese falso paraíso, donde se premian la belleza, la perfección y la posesión de productosestereotipados. La publicidad y los medios nos ofrecen falsas promesas, mundos que no existen, en los que nosotros nos empeñamos en habitar. Pero ¿qué es el arte más que un arma más de persuasión? Dejando a un lado lo tradicional de éste, los lienzos y el artista romántico; el arte se ha convertido en un arma poderosa. La publicidad ha bebido y bebe de él. Fotografía y posados de moda que recuerdan a Tiziano, buscan persuadir con un claro fin: el consumo de los productos que ahí figuran. Ese bombardeo de imágenes e información tienen como objetivo quetodos seamos iguales y queramos lo mismo. Por ese motivo, la educación artística debe dejar a un lado lo manual y artesanal. El arte es un arma, mucho más poderosa de lo que se sabe. Todo lo que ocurre fuera de nuestra clase es educación. Todo, sin perder detalle. Y todo ello debe de exponerse en clase, exhibiendo lo que realmente es el arte y sobre lo que es capaz de hacer.Finalmente, la educación artística es fundamental. No queremos alumnos ciegos haciendo manualidades. Lo que queremos son alumnos que conozcan las posibilidades que éste ofrece. El mundo que hoy tenemos tiene asegurada su subsistencia a costa del consumidor. Por eso mismo, como dijo Wert: el arte distrae. La educación artística despierta. Y el propósito de eliminarla demuestra la poca importancia que se le da a la formación completa de la sociedad.

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