Los sentimientos y las emociones son estados que se encuentran a flor de piel en nuestros alumnos adolescentes. La aparición de dichos estados, cognitivo y fisiológico respectivamente, constituyen la causa de muchas de las conductas y comportamientos que adoptan: el alumno adolescente cree generalmente que su sentimiento es impar, que su situación es única, tanto si es positiva como negativa, y actúa en consecuencia de ello. No obstante, aunque parezca asombroso, estos sentimientos que padece están influenciados por un contexto histórico, social, cultural y espiritual, que lleva a que las señales manifestadas en pos de un sentimiento sean muy similares en todos los casos en los que este aparece.

Prueba de la similitud de estas señales es la risāla El collar de la paloma, de Ibn Hazm de Córdoba, en la cual el escritor nos expone un tratado sobre el amor, los tipos, las causas y los factores implicados.

Para comenzar, la risāla es una composición literaria arábigo-andaluza escrita en una prosa llena de retórica, que puede incluir además versos y poesías completas como ejemplo de las reflexiones y hechos que plantea. Este es el caso de nuestra obra, la cual data del siglo XI, en la que el autor, tras petición de un amigo suyo a través de una carta, parte de sus conocimientos, de sus propias experiencias y las de sus conocidos para, finalmente, reflexionar sobre el amor y escribir un tratado en el que incluirá distintas formas de manifestación de este sentimiento y muchos de los cánones propios de la cultura hispano-árabe del momento. Dichos fenómenos y vivencias son ilustrados con poesías de su propia cosecha, que a veces compuso explícitamente para el protagonista de la historia en cuestión.

En cuanto a los temas, como ya hemos mencionado anteriormente, esta risāla aborda en cada capítulo una etapa o una forma de manifestación del sentimiento desde la perspectiva árabe. No obstante, el autor también hace ilusión a figuras y filosofías griegas, como es el caso de las alusiones a Platón o a Hipócrates, por ejemplo:

"Las almas son como ejércitos puestos en filas, donde los que se reconocen se hacen amigos y los que se desconocen se separan". [...] Y por esta misma razón no se entristeció Hipócrates cuando le dijeron que un hombre vulgar lo amaba. "no me amaría -dijo-, si no me asemejara en él en alguna de sus cualidades".

Destacamos de entre los capítulos que forman esta obra algunos como el del amor a primera vista, el amor tras el largo trato, las señales, la guarda del secreto, la separación, el olvido y el amor mediante correspondencia. Todos estos capítulos, desde el punto de vista de la educación sentimental, ofrecen historias muy similares a las que pueden darse hoy en día, lo que contribuirá a que el adolescente, que se ve reflejado en la escena argumentativa del relato, compare su situación y sus actitudes frente a la historia en cuestión y compruebe que, efectivamente y a pesar de los matices, su sentimiento no es tan único como creía. Recalcamos en este punto una cita sobre las señales del amor, en la que se explican las razones que llevan al enfado entre dos personas unidas por un vínculo sentimental:

Los extremos se tocan muchas veces. Así, la nieve, si se la aprieta mucho tiempo con la mano, quema como su contrario el fuego; la alegría excesiva mata, lo mismo que la pena desmesurada, y la risa muy continuada y violenta hace saltar las lágrimas. Todo esto acaece muy a menudo. Pues del mismo modo hallamos que, cuando dos amantes se corresponden y se quieren con verdadero amor, se enfadan con frecuencia sin venir a qué; se llevan la contraria, aposta, en cuanto dicen; se atacan mutuamente por la cosa más pequeña, y cada cual está al acecho de lo que va a decir el otro para darle un sentido que no tiene; todo lo cual es prueba que evidencia lo pendientes que están el uno del otro. La distinción entre estos enfados y la verdadera ruptura o enemistad, nacida del odio y de la animosidad enconada de la querella, es la prontitud con que se reconcilian.

Con ello no sólo nos referimos al amor pasional que el adolescente pueda sentir hacia otra persona, sino también a las relaciones que existan en su entorno y que puedan influir en su conducta y actitudes, como pueden ser las relaciones entre sus padres, las relaciones fraternales o incluso sus relaciones de amistad.

Otro punto de esta risāla interesante de tratar es el de las formas de olvido. El adolescente, al sufrir un problema en el que intervienen los sentimientos, al vivir una situación determinada de tensión o de dolor, puede adoptar varias posturas: manifestar las consecuencias a través de sus conductas, interiorizar el suceso o, por el contrario, olvidar. Sin embargo, esta última alternativa, a menudo la más difícil para cualquier individuo, no siempre sigue un mismo proceso, tal y cómo muestra Ibn Hazm en su capítulo:

Los accidentes del mundo caducos son y pasajeros, cesan y se disipan. Y todo amor ha de terminar por una de estas dos cosas: o porque la muerte lo interrumpa o porque venga el olvido. [...] Cabe distinguir en el olvido dos aspectos fundamentales:

Es el primero el del olvido natural, que es el que con mayor propiedad puede llamarse olvido.

El segundo es el olvido buscado aposta, a despecho del alma, y es el que puede llamarse resignación. Veras, con efecto, que algunos hombres fingen impasibilidad, aun cuando sientan en su corazón una mordedura más honda que el bocado de una lezna. [...] por cuanto esta resignación no viene más que por un motivo de peso y no sucede más que por una grave calamidad. Para conocer al que así obra te basta ver que no sólo olvida, sino que recuerda, siente nostalgia, mantiene su pacto y traga amarguras de acíbar.

Por otro lado, es también interesante en nuestro objetivo educacional hacer alusión al amor y la mensajería y el mensajero, pudiendo comparar así las relaciones epistolares de la época con las relaciones a través de las redes sociales de nuestro tiempo. Aunque, en nuestro siglo, la figura del mensajero ha evolucionado de la persona a la red, los motivos por los que se acude a este tipo de comunicación entre personas con un vínculo sentimental continúan siendo en cierta medida similares: distancia, sentimiento de timidez... En definitiva, presencia de un aspecto físico o psicológico que impide la relación vis a vis. Como toda relación, esta también muestra un esquema sentimental y de actuación, el cual es analizado por el autor.

En definitiva, El collar de la paloma, además de ser una joya de la literatura arábigo-hispana, es un material preciado que nos puede servir no solo para motivar a los alumnos en la tarea de la lectura extensiva mediante historias con las que puedan sentirse identificados, sino también para analizar muchos de los sentimientos y actitudes que implica el nacimiento de un sentimiento en la persona en cuestión, desde el "flechazo" a al olvido, tanto vividos en primera persona como en el entorno que nos influye.