Algo nuevo surge, algo existente se va.
Así es como podríamos definir al proceso que llamamos desarrollo.
Es perfecto cuando algo sale a la luz y desbanca a otra cosa que ejercía la misma función pero en peores condiciones.
El problema surge cuando ese "algo nuevo" elimina aquellas cosas que sí que deberían estar independientemente del desarrollo; hablo de los juegos populares.
La Play, el coche teledirigido, o miles de juguetes que ahora los niños se piden para reyes no les van a enseñar los valores que con los juegos populares aprenderían.
Estos objetos, cachivaches o como se les quiera llamar a las cosas por las que los niños suspiran, los van a hacer más individuales, de forma que si antes necesitaban a cinco personas para jugar al escondite ahora les basta con ellos mismos para pasar el tiempo con otros juguetes.
Conclusión, en vez de pasar una buena tarde en el parque conociendo nuevos amigos o simplemente jugando con los que ya se tiene, se quedan encerrados en casa, con la mirada fija en el televisor y con mamá gritando por la espalda ¡no te acerques tanto a la tele!.
Ya no necesitan a nadie para divertirse, sólo tienen que esperar a que el hermano mayor no haya llegado a casa todavía para coger ellos "esa cosa" que solo emite ruido y que pone dolor de cabeza con solo encenderla. Esperar que los papás no hayan llegado a casa para ponerse a jugar y después decirles cuando vuelvan: ¡sí papá, he hecho los deberes!, mientras cruzan los dedos detrás de la espalda.
Todo esto por no hablar de los contenidos de los juegos: velocidad, violencia, sexo...
Eso sí, de internet mejor no hablamos, luego nos quejamos de que los niños cada vez tienen más vergüenza y les cuesta más relacionarse, normal, es muy fácil "hacer amigos" tecleando en un ordenador, el problema lo tenemos cuando esos niños luego se quedan solos porque no son capaces de integrarse en un grupo.
Creo que la batalla entre juegos populares y juegos actuales a dejado un claro ganador en cuanto a qué es más educativo para los niños, pero claro, regálale a tu niño un libro de juegos tradicionales en vez de la Play tres que te han pedido, haber a ellos qué les parece mejor.