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Biblioteca de la Universidad Complutense de Madrid

Domingo, 13 de octubre de 2024

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Haz de tu entrevista laboral un camino hacia el éxito

Bienvenido a nuestra empresa, el puesto es suyo, comienza el lunes por la mañana... frases que cada día son mas difíciles de oír y experimentar en nuestras propias carnes, hoy en día quizás más que nunca estas frases se convierten en la mas deseadas, ansiadas y esperadas.

 

Nos preparamos durante toda la vida para conseguir lograr en un futuro el empleo soñado, o para cambiar de empleo a otro que nos ofrezca mas posibilidades de crecer y de realizarnos. Nosotros los estudiantes deseamos cambiar el mundo desde el futuro empleo que anhelamos, conseguir un puesto de trabajo que consiga que lleguemos a casa con la satisfacción de un trabajo bien hecho, construimos castillos de naipes alrededor del sueño laboral que buscamos, grandes empresas, educación de calidad, proporcionar un servicio que sea reconocido y todos tenemos en mente que es aquello que deseamos de nuestro futuro trabajo sea cual sea. Vemos por todas partes a gente que desea cambiar de trabajo, mejorar las condiciones de su empleo presente, prosperar... No podemos negar que hoy en día encontrar un trabajo y sobre todo uno que se ajuste a las expectativas que tenemos sobre nuestro futuro laboral es más complicado que nunca, el trabajador se siente desprotegido y el aspirante al puesto de trabajo desanimado por la cantidad de demanda de empleo que existe en el mercado, a la hora de enfrentarnos a una entrevista laboral sentimos miedo y nervios sobre todo si es el empleo soñado. Alguien me dijo una vez que el destino no te hace valiente pero te da las oportunidades para serlo, del mismo modo el destino no te colocara en el puesto de trabajo que deseas pero nosotros tenemos las herramientas para conseguirlo.

Después de la requerida formación y los estudios que sean necesarios, después de la búsqueda cada vez más complicada de empleo, recibimos esa llamada que nos llena de optimismo a la vez que de nervios, una entrevista de trabajo, la clara oportunidad de conseguir el empleo, nuestra llave de entrada al mundo laboral y a una empresa u organización concreta, y esta oportunidad por supuesto hay que aprovecharla, exprimirla al máximo, llevamos esperando este momento durante, seguramente mucho tiempo y ahora es nuestro momento de lucirnos de mostrar todo lo que valemos de demostrar que aunque hay muchos ese puesto de trabajo es nuestro, hemos nacido para él. Por supuesto la entrevista laboral al igual que el currículum es nuestra tarjeta de presentación, es el paso decisivo la frontera que existe entre nuestras expectativas y el trabajo real que tanto esperábamos y por supuesto algo tan importante hay que prepararlo a conciencia.

En primer lugar debemos conocer la empresa, no podemos llegar allí sin saber donde vamos a trabajar, posiblemente durante mucho tiempo en nuestra vida, debemos demostrar que sabemos que este puesto es lo que queremos y que este lugar de trabajo es el sitio ideal para nosotros, debemos conocer que se requiere para el puesto ofertado y cuales son las características del lugar de trabajo. Ten claros tus objetivos debes demostrar en todo momento que cumples el perfil del puesto de trabajo, demostrar que eres un trabajador o trabajadora competente y dar una buena impresión al entrevistador. Antes de la entrevista debes preparar una lista con tus puntos fuertes y débiles, recuerda que el entrevistador es una persona experimentada que esta al servicio de su empresa y que necesita encontrar a un trabajador que vaya a rendir bien en el puesto de trabajo; una vez que te conozcas bien a ti mismo tanto personal como laboralmente, busca la manera en que puedas defender aquellos puntos débiles y convertirlos en potencialidades.

Se tardan exactamente alrededor de unos siete segundos en formar una primera impresión, si la persona que tienes en frente es un profesional de los recursos humanos, estos siete segundos parecen incluso vertiginosos, y nos van a servir de trampolín hacia el puesto o van a ser una losa bastante pesada, por ello cuida tu higiene personal, ve arreglado y con ropa formal a la entrevista y escoge prendas que dentro de esto te hagan sentir cómodo, no sabes cuanto va a alargarse la entrevista, así que es mejor que estemos a gusto; estrecha la mano con firmeza pero sin exagerada fuerza al entrevistador mientras mantienes el contacto visual con el y una actitud relajada a la vez que formal, no te sientes antes de que el entrevistador te lo indique o si se le olvida pide permiso educadamente para tomar asiento, recuerda que no debes tomarte las reglas por tu mano pero tampoco hay que quedarse parado y sin iniciativa.

Una vez hemos pasado estos fatídicos primeros segundos comienza la entrevista en sí, pero tranquilo a partir de este momento lo has preparado todo en casa, nadie te conoce mejor que tu mismo/a, relájate, muéstrate asertivo, responde con sinceridad y defiende como eres. Busca una postura cómoda que te evite estar continuamente en movimiento, aquí es donde entra en juego que la ropa sea de tu talla y no resulte incómoda. Evita movimientos repetitivos y estereotipados como mover exageradamente las manos, aunque puedes usarlas para ilustrar ideas, tocarse el pelo continuamente y por supuesto no mirar el reloj; es importante colocarse a una distancia cómoda del entrevistador sin invadir su espacio y mantener el contacto visual durante le entrevista de un modo natural, recuerda que debemos mostrarnos firmes y asertivos, en este momento la comunicación tanto verbal como no verbal es nuestra arma, te ayudara ensayar frente a un espejo o incluso grabarte con algún conocido. Deja que el entrevistador guíe la entrevista y no tengas prisa por hablar, no respondas con monosílabos, utiliza frases cortas con una idea clara: valgo para este puesto. Y lo más importante trasforma tus puntos débiles en fuertes, un ejemplo acabamos de salir de la universidad y exceptuando las prácticas no tenemos ninguna experiencia laboral, pero en cambio podemos acentuar la manera en que estamos preparados para trabajar en equipo o incluso para seguir formándonos dentro de la empresa, lo acostumbrados que estamos a realizar todo tipo de trabajos, proyectos y exposiciones y las inmensas ganas que tenemos de llevar todo lo que hemos aprendido a la práctica y de seguir investigando fórmulas que lleven al éxito; pongámonos en el caso de una persona que después de diez años en una empresa busca empleo en la competencia, podríamos estar hablando de una persona con muchas ganas de aprender nuevas formas de trabajo y que ya esta formada en ese ámbito y puede suponer un aporte nuevo de ideas para mejorar. No hables nunca mal de antiguas empresas, piensa antes de contestar y responde tranquilamente sin prisas y relacionando cualquier tipo de pregunta, incluso las personales con el puesto de trabajo, así por ejemplo tener pareja o hijos puede significar que somos personas que saben comprometerse con otras personas y emprender proyectos comunes, o una persona soltera es una persona con mucha capacidad de movilidad o de dedicar mas tiempo fuera del trabajo a formarse.

Por último el entrevistador te ofrecerá la oportunidad de preguntar tus dudas, demuestra entusiasmo por el trabajo pero sin suplicarlo y si quieres preguntar por el salario hazlo de modo que no parezca que este es tu único interés en el puesto, es del todo contraproducente que hables de que otras empresas te ofrecen mucho dinero por trabajar con ellos o que has tenido otras tantas entrevistas mas. Al despedirte estrecha de nuevo la mano con firmeza y agradece al entrevistador el tiempo que te han ofrecido y la oportunidad.

Las entrevistas grupales son también una prueba a la que nos podemos exponer y en las que tenemos que tener en cuenta sobre todo ser nosotros mismos, mostrarnos naturales, respetuosos y educados, participativos, con iniciativa y capacidad de escuchar a todos los miembros del grupo pero sin tratar de mantener el liderazgo bajo cualquier precio y finalmente razonar todas tus respuestas y actuaciones.

 

Para concluir

Recordar ante todo y en todo momento que somos personas tan validas como el resto de los candidatos y que pase lo que pase, la entrevista para el empleo soñado, un empleo que consideremos menos relevante son oportunidades para crecer, conocernos y seguir progresando, debemos aprovechar estas oportunidades y para ello debemos prepararnos y conocer nuestras limitaciones y potencialidades, al igual que no correríamos una maratón con unas deportivas nuevas a las que no estamos acostumbrados no podemos darnos a conocer en una entrevista si no la preparamos y nos conocemos a nosotros mismos.

Frente a las situaciones difíciles en la que nos encontramos debemos sacar el mayor partido a todos nuestros recursos y a las oportunidades que se nos ofrecen, pero también tener la capacidad de esperar a que llegue nuestro momento mientras vamos aprendiendo de todos los obstáculos y pruebas que se nos plantean.

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