Todos sabemos que a un niño que tiene entre tres y siete años de edad lo que más le gusta es verse pasando un rato en un aeropuerto, en una estación de ferrocarril, en un puerto... pues esto lo que nos traen los libros de Dupasquier. Estos libros, a base de grandes fotografías y pequeños textos, llevan a los niños, de mano de distintos personajes, a la vida cotidiana que podemos encontrar en cualquiera de estos ambientes.
DUPASQUIER, P. (1985), El aeropuerto. Madrid: Ediciones Generales Anaya.
Títulos de la misma tipología y autor son: "El garaje", "El puerto", "La estación de ferrocarril", "La obra" y "La fábrica".
¿Son estos libros para ti?
Depende... ¿tienes entre tres y siete años?, ¿eres curioso?, ¿te gustaría saber más sobre los coches o aviones, o sobre los osos o dinosaurios?.. o, simplemente eres un niño y como tal aprendes viéndote inmerso en distintas situaciones?... Entonces, puede que sí.
Este libro va dirigido a un público entre los 3 y los 7 años de edad. Ya contiene pequeños textos, aunque de una gran sencillez y brevedad; suficientemente escuetos como para que los niños se vean cómodos con ellos y les atraiga el libro, en vez de agobiarles y suficientemente extensos como para que se vayan familiarizando con las letras, hecho también imprescindible.
Desde el punto de vista pedagógico...
Pedagógicamente hablando, los libros que componen esta colección son una maravilla. Siendo tan pequeños, un libro que puedan manipular, en el que mediante una trasparencia puedan ver la parte de dentro y de fuera de un coche, en el que pequeños textos les vayan iniciando en la lectura... todo esto es muy beneficioso.
Por otro lado, esta colección acerca a los niños a temas que les pueden interesar; desde coches, aviones o pirámides de Egipto, hasta qué es el clima, el agua o cómo eran los dinosaurios.
Por último, hemos de destacar que es una buena forma de acercar a los niños a la lectura, ya que, como hemos podido observar en las reacciones de diversos niños con respecto a la obra citada, suelen ser muy favorables. Es decir, en un experimento realizado en iguales condiciones a dos niños, este libro le gustó de igual manera (significativamente hablando) a un niño que aborrecía la lectura y a otro al que le gustaba.
Valoración: Muy recomendable
(para que descubran el mundo que les rodea...)