Cuentos para reflexionar. Educación en valores: la sinceridad.
En este número comenzamos una pequeña "saga" a la que llamaremos "Cuentos para reflexionar". Estos cuentos irán enfocados, aunque de manera didáctica, hacia el disfrute y hacia hacer reflexionar a aquellos que los leen o a aquellos a los que se los leen.
De esta manera, los cuentos para reflexionar tratarán, en gran medida, de educar en valores, un aspecto que, según mi punto de vista, es imprescindible en la educación de un niño/a, tanto en un contexto formal, como uno no formal o informal; igual que sigue siendo imprescindible en los adultos. Y, ¿qué mejor forma que a través de un cuento, que pueda ser leído en el momento de irse a la cama de los padres con su hijo/a, o tratado, de una manera algo más pedagógica, por un profesor/a con su grupo-clase?
En este cuento en concreto, "Julia y su hermanita Julia", tratamos el tema de la sinceridad. Las consecuencias de ésta y cómo es posible resolverla, cuando ya hemos mentido. Este último punto puede ser muy importante ya que, si nos fijamos, el problema de muchos niños no es que no sepan que no pueden mentir, sino que no saben, una vez lo han hecho, cómo salir. También, tratamos el difícil tema de tener un hermanito, que les preocupa mucho a los niños/as, y del que necesitan hablar.
Toda nuestra historia está ambientado en Roma, pero no podemos utilizar vocabulario demasiado complejo, porque si no pierde el sentido de educación en valores, y vuelve a ser el de el aprendizaje de vocabulario y el estudio de Roma. Por último destacar, que si los niños/as ven cierto paralelismo entre Roma y su vida, siempre les será más fácil acercarse a Roma cuando llegue el momento. Además de que en la historia, se ven otras facetas de Roma, que no suelen ser tratadas en el colegio, como el curioso tema de los nombres, que es lo que puede hacer que un niño/a diga un día cualquiera, por ejemplo, en la feria del libro: "Papá, cómprame este libro (o cómic, o cuento...) que va de Roma y a mí me gusta".
Y, sin más dilación, les dejo para que disfruten de la historia. Las preguntas propuestas son, sobre todo, para dirigir la reflexión o el debate, por ejemplo, en el grupo-clase.
Julia y su hermanita Julia
Julia se levantaba pronto de su lecho todos los días. Lo cierto es que no le gustaba levantarse tan temprano, pero ella no era quién como para opinar sobre eso. Después, ella y su esclava Tertia, iban a pasear al zoco, aunque siempre sin que les viera Padre. A veces, incluso, se atrevían a acercarse al Foro, pero como allí era la Asamblea, esto ocurría muy pocas veces, por si acaso estaban Madre o Padre, que no les dejaban.
... ¿En qué época crees que vivía Julia? ...
Todo esto transcurría siempre igual... aunque todo cambió cuando llegó Julia Secunda. En Roma, por si no lo habías adivinado ya, donde vivía Julia Prima, nuestra protagonista, a los niños se les ponía su nombre el octavo día después de haber nacido, si eran niñas y el noveno, si eran niños. A los niños, les ponían el nombre de su padre, o algún abuelo, y a las niñas, les llamaban a todas con el nombre de su familia, e iban poniendo primera, segunda.... (Prima, Secunda...). Por eso Julia, nuestra Julia, era también Prima; pero su hermanita pequeña, era Julia Secunda.
... ¿Te gustaría llamarte igual que tus hermanos/as si tuvieras? , ¿Llamas Padre o Madre a tus padres?...
Cuando nació Julia Secunda, nuestra protagonista estaba muy emocionada porque pensaba que sería muy divertido tener una hermanita con quien jugar. Pensó que podría hablar hasta tarde con ella, que podrían irse con Tertia todas a ver el zoco, o el circo desde fuera, que podrían juntas charlar con Madre... pero eso no fue lo que pasó, lo que pasó en realidad, no le gustaba tanto a Julia como ella había pensado...
... ¿Qué crees que le pasó a Julia? ...
Cuando nació Julia Secunda, no paraba nunca de llorar. Pero es que además, no paraba de saltar, ni de gritar, ni de hacer ruidos. Cuando estábamos todos dormidos, porque yo creo que esperaba a que nos durmiéramos todos, empezaba a hacer ruidos con la boca, como pedorretas, hasta que alguien iba, y si nadie iba, si no iban ni Madre ni Padre, entonces empezaba a llorar... y cuando conseguía que alguien fuera, no paraba de reírse a carcajadas durante mucho, muchísimo rato.
Y después, cuando quería jugar, Madre me decía "venga, juega con ella", y yo, claro, tenía que hacer caso a Madre y jugaba, y le montaba como un carrito con caballos para que ella jugara, y ella iba poniendo poquito a poquito el culete en pompa y.... "pataplaf" se sentaba encima, rompiéndolo en mil pedazos y rompiendo a carcajadas... como siempre.
... ¿A ti también te pasaba eso o algo parecido con tu hermanito/a?, ¿Es tan distinta la vida en Roma como tu vida? ...
Un día, que yo ya estaba cansada, le dije a Madre que Julia Secunda había tirado toda la comida por el suelo, cuando había sido yo, para que la regañara. Y Mamá, que siempre me creía, habló con Julia muy seriamente y Julia lloraba y lloraba, pero esta vez, de verdad.
Como lloraba tanto, Madre me preguntó si de verdad había sido ella, si yo la había visto... pero yo la contestaba que sí, que claro que sí, pero con la voz cada vez más y más bajita...
... ¿Te parece bien lo que está haciendo Julia?, ¿tú harías eso?, ¿por qué?...
Cuando Padre se enteró, fue a hablar con Julia Secunda y la regañó también, y nuestra amiga protagonista, como podréis imaginaros, ya no sabía qué hacer... hasta que una de las veces, sintiéndose ya culpable, les dijo la verdad a Padre y a Madre, y ellos la escucharon pacientemente hasta que acabó. Cuando acabó....
... ¿Qué crees que le van a decir Padre y Madre a Julia?...
Cuando acabó, ellos la sonrieron y se miraron. "Estamos orgullosos de ti, porque has sabido reconocer la verdad. Pero está muy mal lo que has hecho, porque mira lo que le ha pasado a tu hermana."
Entonces, Julia se dio la vuelta y miró a su hermanita, y ella, aunque todavía no sabía hablar del todo, le extendió los brazos para que la cogiera y se abrazaron muy fuerte.
...¿Tú crees que se van a llevar bien o mal?...
...¿Has visto en qué líos te puede meter mentir?, ¿te parece bien cómo lo soluciona Julia?...
FIN