Sidney Lumet se crió en el teatro y se formó en la floreciente industria televisiva de los años cincuenta para después conquistar un puesto de honor en la historia del cine.
De ascendencia judía, neoyorquino de adopción -nació en Philadelphia pero vivió y trabajó en Nueva York-, Lumet cumplió el servicio militar durante la II Guerra Mundial. Hijo de actores, interpretó y dirigió numerosas obras teatrales antes de ser contratado por la cadena CBS en 1950. Durante siete años en televisión, realizó aproximadamente doscientos programas en directo. Prolífico donde los haya, su filmografía reúne cerca de cuarenta títulos cinematográficos desde que debutara en 1957 con la aclamada 'Doce hombres sin piedad' (Twelve Angry Men).
Sidney Lumet trabajaba mucho, rápido y bien. Entre 1957 y 2007 alternó ínfimos y grandes presupuestos, realizó dramas, melodramas, comedias, películas de suspense, policíacas y hasta un musical, demostrando una versatilidad asombrosa; proyectos de estudio, obras personales y producciones puramente alimenticias se entremezclan constantemente en su filmografía. Una carrera tan amplia es, a la fuerza, irregular, lo que no resta un ápice de interés al puñado -¡buen puñado!- de obras maestras que Lumet dirigió, algunas hoy injustamente olvidadas.
Pensar en Lumet es pensar en grandes actores y actrices: Paul Newman, Henry Fonda, Sean Connery, Marlon Brando, Anna Magnani, Al Pacino, Katherine Hepburn, Rod Steiger, Sophia Loren, Jane Fonda, James Mason, Dustin Hoffman, Faye Dunaway, William Holden, Robert Duvall, Nick Nolte... y tantísimos otros. Lumet es un enorme director de actores, prueba de ello es que hasta diecisiete consiguieron una nominación al Oscar trabajando con él (y cuatro de ellos se llevaron la codiciada estatuilla). En todas sus películas los personajes se cuidan al detalle, y en no pocas son las interpretaciones el pilar fundamental que las sustenta, su motivo principal y su razón de ser: ¿qué sería de 'Serpico' (1973) sin Al Pacino? ¿Y de 'El prestamista' (The Pawnbroker, 1964) sin Rod Steiger? Por un lado, el drama sobre el rebelde e insobornable policía de Nueva York que se granjea la enemistad de sus corruptos compañeros y, por otro lado, la asfixiante narración del día a día en Harlem de un judío superviviente del Holocausto, asolado y destruido por sus recuerdos, son dos vehículos perfectos para el lucimiento de sus estrellas. Lumet se aparta y permite a Pacino y Steiger adueñarse por completo de la función.
Sin embargo, Lumet no sólo es brillante dirigiendo actores. Quien haya visto 'La colina' (The Hill, 1964) habrá disfrutado profundamente el despliegue de recursos técnicos y estilísticos de los que Lumet hace gala, en lo que es toda una exhibición tras la cámara. Esta primera colaboración entre el director y Sean Connery -juntos trabajarían en cinco buenas películas, de las que la más conocida es indudablemente la ligera y entretenida 'Asesinato en el Orient Express (Murder on the Orient Express, 1974)- da lugar a un potente y magnífico alegato antimilitarista, cuyo único escenario es una prisión inglesa, en mitad del desierto, a la que van a parar los desertores, indisciplinados y delincuentes del ejército inglés durante la II Guerra Mundial. Antes, en su ópera prima, Lumet ya había encerrado en una sala a doce actores -liderados por Henry Fonda- y les había confrontado. El cineasta novel jugaba con la duración, el tamaño y la angulación de los planos como si fuera un veterano para entregar una obra claustrofóbica e intensa en un escenario mínimo. Su preocupación por el aspecto visual en sus películas resulta evidente al repasar la lista de (magníficos) directores de fotografía con los que ha desarrollado estrechas colaboraciones: Boris Kaufman, Freddie Young, Oswald Morris, Carlo Di Palma y Andrzej Bartkowiak, entre otros.
Probablemente, 'El príncipe de la ciudad' (Prince of the City, 1981) es su película más estilizada, con una planificación milimétrica y sumamente interesante. Casi tres horas de duración para una historia de corrupción en la que Treat Williams da vida a un policía con expeditivos métodos que cree controlarlo todo y que poco a poco va siendo superado por las circunstancias. Entre otros detalles insólitos, sólo hay un plano -brevísimo- del cielo en esas tres horas. Sólo una vez Lumet nos muestra el cielo, sólo una vez el protagonista parece estar cerca de liberarse.
Para muchos, es 'Tarde de Perros' (Dog Day Afternoon, 1975) su mejor obra. Utilizando técnicas documentales y evitando la iluminación artificial, el cineasta insufla de realismo y naturalismo la historia, basada en hechos reales, del atraco a un banco cuyo desafortunado desarrollo convertirá a los infelices delincuentes en estrellas mediáticas por un día. Al Pacino es el protagonista, interpretando a un atracador cuyo objetivo es conseguir el dinero necesario que permita a su amante costearse una operación de cambio de sexo.
Los medios de comunicación son analizados de forma más profunda por Lumet en su siguiente y bastante recordada película 'Network: un mundo implacable' (Network, 1976). Faye Dunaway se erigiría con el Oscar a la mejor actriz, Beatrice Straight con el de mejor actriz secundaria y Peter Finch se convertiría en el primer actor galardonado con el Oscar al mejor actor a título póstumo (murió de un ataque al corazón un mes antes de la ceremonia). Si por algo destaca 'Network' además de por sus interpretaciones es por el cinismo que desprende la historia de un presentador de informativos que anuncia en directo que va a suicidarse y por la oscura reflexión que se establece sobre el poder de la televisión y la voracidad de los despiadados productores y ejecutivos de las principales cadenas. El guión de Paddy Chayefsky también fue premiado con un Oscar.
Chayefsky, novelista y única persona galardonada con tres Oscar al mejor guión, es sólo uno de los reconocidos escritores con los que Lumet ha colaborado. En 'Piel de Serpiente' (The Fugitive Kind, 1959) adaptó la obra 'La caída de Orfeo' de Tennesse Williams, con la participación de éste, en un drama pasional cuyo mayor interés (que desde luego no es poco) es ver a Marlon Brando y Anna Magnani compartiendo escenas. Eugene O´Neill en 'Larga jornada hacia la noche' (Long day´s journey into night, 1962), Peter Shaffer en 'Equus' (1977) y E.L. Doctorow en Daniel (1983), fueron igualmente trasladados a la gran pantalla por el director. No tuvieron gran éxito comercial, y la crítica sólo respaldó mayoritariamente 'Larga jornada hacia la noche', pero Shaffer y Doctorow trabajaron junto a Lumet y se mostraron satisfechos con los resultados. Los prestigiosos guionistas de cine Walter Bernstein y Jay Presson Allen han colaborado en más de una ocasión con el director estadounidense, pero quizás merezca una especial atención el texto del reputado guionista David Mamet para 'Veredicto Final' (The Verdict, 1982): drama judicial imprescindible, en el que Paul Newman se mete en la piel de un abogado alcohólico, caído en desgracia, que se aferra desesperadamente a un caso que podría significar su rehabilitación, su redención. No consiguió ningún Oscar, pero estuvo nominada en cinco categorías, entre ellas las más importantes (película, dirección, guión, actor principal y actor secundario).
En 1988, una película de Lumet volvería a estar nominada al Oscar al mejor guión, y al mejor actor secundario. El cineasta dirigió al malogrado River Phoenix en el interesante drama con tintes políticos 'Un lugar en ninguna parte' (Running on Empty), escrito por Naomi Foner.
Entre sus rarezas podemos citar las singulares comedias 'En estado crítico' (Critical Care, 1997), sobre el sistema sanitario estadounidense, y 'Negocios de familia' (Family Business, 1988), sobre un robo preparado por un abuelo, su hijo y su nieto. Otra rareza es el musical 'El mago' (The Wiz, 1978); fallida adaptación de la historia de 'El mago de Oz' al Nueva York de los años setenta, escrita por el futuro director Joel Schumacher, de la cual Lumet se hizo cargo una vez comenzada la producción y que supone el debut cinematográfico de Michael Jackson.
Otras de sus obras consideradas menores merecen una revisión. Por ejemplo, los thrillers 'A la mañana siguiente' (The Morning After, 1986) y 'Una extraña entre nosotros' (A stranger among us, 1992), en la línea de Hitchcock la primera, y con una historia que recuerda a 'Único Testigo' la segunda, son buenas muestras de cine de entretenimiento realizadas con maestría. Las intrigas sobre corrupción policial 'Distrito 34: corrupción total' (Q & A, 1990) y 'La noche cae sobre Manhattan' (Night falls on Manhattan, 1996), son notables películas que vuelven a tratar uno de los temas recurrentes del cineasta, quien esta vez realiza en exclusividad los guiones.
En 2006, tras siete años sin dirigir (y un año después de recibir el Oscar honorífico por su carrera), Lumet estrenó la comedia judicial 'Declaradme culpable' (Find Me Guilty), protagonizada por Vin Diesel. Entretenida, exagerada y divertida, la película obtuvo buenas críticas. En 2007 dirige con 83 años y con tecnología digital (la tecnología tradicional para rodar en cine es la analógica, el celuloide), demostrando una energía y una capacidad de adaptación envidiables, 'Antes que el diablo sepa que has muerto' (Before the devil knows you´re dead), un melodrama disfrazado de thriller que tiene bastante éxito entre el público y, de nuevo, la crítica. Philip Seymour Hoffman, Ethan Hawke, Albert Finney y Marisa Tomei conforman el excelente reparto de su última obra, titulada según un proverbio irlandés: "ojalá estés en el cielo media hora... antes que el diablo sepa que has muerto".
Sidney Lumet publicó en 1995 un libro llamado 'Así se hacen las películas' (Making Movies). Para todo aquel interesado en la lectura sobre cine, y en el propio Lumet, su libro es una referencia obligada en la que el director explica el proceso de la creación cinematográfica y su forma de trabajar, repasando su trayectoria de una manera didáctica y amena. Su descripción de lo que significa hacer una película me encanta: "Es a la vez una técnica compleja y un proceso emocional. Es arte. Es negocio. Te rompe el corazón y es divertido. Es una forma genial de ganarte la vida."
El pasado 9 de abril Sidney Lumet fallecía a la edad de 86 años, en Nueva York. El cineasta estadounidense nos ha legado una vasta obra, compleja e inigualable, que abarca prácticamente todos los géneros y que nos obliga a señalarle como uno de los directores más arriesgados, innovadores y hábiles de la industria norteamericana.
Adiós a un maestro irrepetible.
Filmografía
'Antes que el diablo sepa que has muerto' (Before the devil knows you´re dead, 2007)
'Declaradme culpable' (Find Me Guilty, 2006)
'Gloria' (1999)
'En estado crítico' (Critical Care, 1997)
'La noche cae sobre Manhattan' (Night falls on Manhattan, 1996)
'El abogado del diablo' (Guilty as Sin, 1993)
'Una extraña entre nosotros' (A stranger among us, 1992)
'Distrito 34: corrupción total' (Q & A, 1990)
'Negocios de familia' (Family Business, 1988)
'Un lugar en ninguna parte' (Running on Empty, 1988)
'A la mañana siguiente' (The Morning After, 1986)
'Poder' (Power, 1986)
'Buscando a Greta' (Garbo Talks, 1984)
'Daniel' (1983)
'Veredicto Final' (The Verdict, 1982)
'La trampa de la muerte' (Deathtrap, 1982)
'El príncipe de la ciudad' (Prince of the City, 1981)
'Dime lo que quieres' (Just Tell me what You Want, 1980)
'El mago' (The Wiz, 1978)
'Equus' (1977)
'Network: un mundo implacable' (Network, 1976)
'Tarde de Perros' (Dog Day Afternoon, 1975)
'Asesinato en el Orient Express (Murder on the Orient Express, 1974)
Lovin' Molly (1974)
'Serpico' (1973)
'La Ofensa' (The Offence, 1972)
'Perversión en las aulas' (Child's Play, 1972)
'Supergolpe en Manhattan' (The Anderson tapes, 1971)
'Una cita' (The Appointment, 1969)
'La Gaviota' (The Sea Gull, 1968)
Bye Bye Braverman (1968)
'Llamada para un muerto' (The Deadly Affair, 1966)
'El grupo' (The Group, 1966)
'La colina' (The Hill, 1964)
'Punto límite' (Fail-Safe, 1964)
'El prestamista' (The Pawnbroker, 1964)
'Larga jornada hacia la noche' (Long day´s journey into night, 1962)
Vu du pont (1962)
'Esa clase de mujer' (That Kind of Woman, 1959)
'Piel de Serpiente' (The Fugitive Kind, 1959)
'Sed de triunfo' (Stage Struck, 1958)
'Doce hombres sin piedad' (Twelve Angry Men, 1957)