Algunas veces los Jedis te bendicen con su láser y dan luz a esos 10 minutos que hacen que un día valga la pena. Hace unos días así fue, y lo que era una entrevista con uno de los pocos escritores españoles de ciencia ficción se convirtió en una conversación con un gran conocedor de la historia del cine y un lector ávido de novelas de misterio y ciencia ficción. Conversador rápido, es capaz de hilar datos dispersos de novelas y cine con la facilidad de una habitante de Camariñas haciendo encajes de bolillos.
Esta entrevista se convirtió en un café y en una visita a nuestra facultad, incluida la biblioteca, donde dedicó a nuestras compañeras uno de sus ejemplares
Esta es parte de nuestra charla con Juan Carlos Benítez Paredes quien acaba de publicar el libro "Ciencia Ficción, Terror, y otras Fantasías sobre películas y libros fantásticos", cuya lectura es más que recomendable para todos los amantes de estos géneros. En sus páginas podrán encontrar muy interesantes (y amenas) críticas literarias y cinematográficas que cubren un amplísimo espectro. En particular, podemos deleitarnos con un recorrido por un repertorio de grandes ejemplos de distintos temas habituales de la ciencia ficción, como los viajes en el tiempo, sociedades distópicas, máquinas conscientes, etc.
Pregunta: La ciencia ficción se ha considerado con demasiada frecuencia un género literario menor. ¿A qué crees que es debido y qué podría hacerse para cambiar esa percepción?
Juan C. Benítez: Se le consideró menor porque sus comienzos eran en formato menor, aquellas famosas revistas pulp de papel barato que amarilleaba enseguida. Los próceres de la literatura la despreciaron por eso, y por ser un género, claro está. Para los protectores de la Literatura, los géneros no tienen nivel narrativo, repiten constantes y están dirigidos a sus diletantes, no a ellos, que leen gran narrativa, por supuesto. No tengo ni idea de qué se puede hacer para cambiar percepciones anquilosadas, sistematizadas, prejuiciadas desde siempre. Además, a los aficionados a la Ciencia Ficción nos da francamente igual.
P: Si preguntamos por escritores de ciencia ficción seguramente el primero que saldrá será Asimov, o Philip K Dick, gracias a Blade Runner. ¿Los hispanohablantes no escribimos ciencia ficción?
JCB: Domingo Santos es un autor a la altura de muchos de ellos.
P: ¿Cómo ves el panorama de la ciencia ficción en España?
JCB: Se escriben obras interesantes. Algunos autores son muy buenos pero también hay mucha basurilla. Como en todas partes. Hace años me cansé y no la leo.
P: Ser escritor en España ya tiene mérito. ¿Tiene que ver con tu infancia? ¿Cómo fue?
JCB: Mi infancia transcurrió entre libros y la Ciencia Ficción ocupó un puesto muy importante. Mis amigos también la leían y nos intercambiamos libros y cómics.
P: ¿Y tienes tiempo para escribir y además trabajas? ¿Eres escritor a tiempo completo?
JCB: No. Trabajo en otro ámbito para pagar facturas. Soy un escritor a rachas y a ratos libres.
P: En este mundo globalizado y con información tan accesible has debido tener muchas influencias... Háblanos de tus influencias ¿Cine o eras más de videojuegos?
JCB: Mis influencias son cinematográficas. De hecho soy crítico de cine, y literario también.
P: ¿Qué crees que los androides soñarían con ovejas eléctricas o ves más fácil tener complicaciones por la convivencia con ellos?
JCB: El ser humano no podría convivir con androides eléctricos si son al menos igual de inteligentes que los ingenieros genéticos que los creen, como demostró Dick. El ser humano apenas puede convivir con otros seres humanos.
P: ¿Has escrito algún guion para cine o has pensado en alguna película basada en tus novelas?
JCB: La verdad es que no.
P: La música siempre es importante en cualquier película de ciencia ficción ¿escribes con música? ¿Qué música escuchas?
JCB: Stephen King escribe sus novelas escuchando Heavy Metal con un volumen brutal. A lo mejor debería tomar ejemplo. Me gusta el rock pero cuando escribo necesito silencio absoluto.
P: Y de leer ¿lees ciencia ficción? ¿Qué novelas de ciencia ficción recomendarías?
JCB: Cada vez menos. Leí muchísima, incansablemente en mi juventud. Ahora leo para documentarme para mis libros.
P: Y, más en general, ¿cuáles son tus autores favoritos?
JCB: Richard Matheson, Robert Silverberg. Frederick Pohl, Frank Herbert, Philip K. Dick y Asimov. Mi hijo se llama de hecho Isaac por él.
P: A lo mejor te hubiera gustado más en comic ¿Eres de leer comic?
JCB: Fui lector de cómic también en su tiempo. Ya no.
P: Me estoy acordando de Boris Vallejo ¿Tienes dibujantes de ciencia ficción favoritos? A lo mejor te gusta dibujar...
JCB: Soy un negado dibujando.
P: Los límites de la fantasía y la ciencia ficción son a veces bastante difusos ¿Te gusta la fantasía?
JCB: Me gusta todo lo que huele a Fantástico, sí.
P: ¿En qué proyectos estás trabajando actualmente?
JCB: Una historia del cine a través del Siglo XX.
P: ¿Tienes alguna visión de lo que el futuro tiene reservado a la Humanidad?
JCB: El problema es el futuro que la humanidad tiene reservado a este mundo. Bastante negro. Ni la peor de las distopías será capaz de plasmarlo.
P: Y en vez del futuro, ¿Si pudieras escoger un lugar y tiempo para vivir en, cuándo y dónde escogería? ¿Y por qué?
JCB: No me gusta mirar atrás. Me gustaría el futuro. Escogería cualquier planeta que la humanidad colonice, porque en la Tierra no podremos estar, y me iría encantado.
P: Muchos de nuestros lectores son informáticos... ¿Puedes recomendarles tres obras clave que no pueden perderse, a pesar de no ser muy conocidas?
JCB: Neuromante, de William Gibson.
La Luna es una cruel amante, de Robert A. Heinlein.
La máquina diferencial, de William Gibson y Bruce Sterling.
Por ejemplo esas tres pero me saldrían muchas más.
P: Hay una creciente aproximación de escritoras a la ciencia ficción (a la que la biblioteca de la FDI va a dedicar una estantería en breve). Autoras como Lidia Yuknavitch, Carmen María Machado, Samanta Schweblin, Lola López Mondéjar, Ana Llurba Ferreira, Nnedi Okorafor... ¿por qué de repente la narrativa distópica[1] interesa tanto a las mujeres?
JCB: De esas autoras, conozco a Lidia Yuknavitch y Nnedi Okorafor, a las que he leído en inglés. Desconozco si han editado en español. Me gustan, son profundas y emocionales a la vez.
Siempre fueron referentes para mí Ursula K. Leguin y Margaret Atwood. No os olvidéis de ellas en vuestra biblioteca, por favor.
Las mujeres han vivido y, en muchos lugares, todavía viven en una Distopía machista. Es normal que vuelquen su imaginación en crear mundos y sociedades donde lo que ocurre se asemeje o metaforice su situación en el mundo y la sociedad actual para denunciar situaciones que todavía existen. Ellas encuentran en esas historias una manera de denuncia, como los autores de distopías hombres denunciaban gobiernos totalitarios o compañías monopolizadoras a todo coste.
P: ¿Cómo ves el panorama de las revistas de ciencia ficción online, de la que nuestra querida "Sci-Fdi" forma parte?
JCB: El papel desaparece. Yo lo prefiero, pero entiendo que las revistas de Ciencia Ficción online sean el futuro.
P: Y para acabar ¿nos puedes dar tres consejos para escritores noveles, que estén empezando en el mundillo de la ciencia ficción, y que si a ti te hubieran dado hace 10 años te habrían ayudado mucho?
JCB: Lee a los grandes y escribe todo lo que puedas, aunque creas que es malo. Lo malo te ayudará a saber que vas mejorando. Si no ves que mejoras con el tiempo, no pasa nada; dedícate a otra cosa. Si no adquieres herramientas, no podrás escribir. Y no conozco otra manera de conseguirlas si no es leyendo y escribiendo. No pienses que existe el talento y has sido agraciado con él. El talento no existe. Existe el determinismo y/o la constancia en el trabajo. La gente confunde el talento con trabajar duro. No lo hagas tú.
[1] Una distopía o antiutopía es una sociedad ficticia indeseable en sí misma.
Se atribuye la primera utilización del término "distopía" que existe documentada a John Stuart Mill, en un discurso de una intervención parlamentaria en 1868.
Si bien el término distopía estuvo relegado del Diccionario de la Real Academia Española fue añadido por uno de sus académicos quien describe la distopía como:
«(...) representación imaginaria de una sociedad futura con características negativas que son las causantes de alienación moral».7
José María Merino.
Consensualmente, se tiene a las obras: Un mundo feliz de Aldous Huxley, 1984 de George Orwell y Fahrenheit 451 de Ray Bradbury como la trilogía fundacional del género distópico. Si bien existieron obras catalogadas como distópicas con anterioridad destacando Nosotros de Zamiatin (1924) y la película Metrópolis basada en una novela del mismo nombre de Thea von Harbou de 1926
Fuente Wikipedia