Guillaume Rouillé (1518-1589), a veces escrito Rouville o Roville, sobresale por su brillante actividad como librero antes que como impresor. En la Biblioteca Histórica se custodian muchos de sus libros distinguidos por su marca tipográfica, que representa con ligeras variantes de detalle, un águila sobre un globo que reposa en un pedestal rodeado por dos serpientes.

Originario de la región francesa de la Touraine, primero se traslada a Venecia donde se forma en el comercio del libro con Gabriele Giolito de Ferrari, gran impresor y librero veneciano especializado en literatura italiana. Hacia 1542 Rouillé llega a Lyón donde es contratado como hombre de confianza o intermediario por los de Portonariis, libreros italianos. De hecho, pronto se casa con la hija de uno de ellos, Dominique de Portonariis.

A raíz de la marcha de sus cuñados, quienes se establecen en Salamanca en 1545, retoma sus asuntos en Lyón y abre una tienda llamada L'Écu de Venise, en el número 54 de la calle Mercière. Consciente de la crisis que atraviesa en ese momento la imprenta lionesa, se especializa preferentemente en la edición y venta de libros. Dispone de un capital generoso gracias a sus contactos y apoyos que le permite financiar la publicación de un vasto abanico de libros: derecho, medicina, ciencias, religión, literatura italiana, traducciones francesas... Su producción editorial se caracteriza generalmente por obras de pequeño formato en lenguas vernáculas como francés, italiano o español.

Durante toda su carrera de librero, unos 45 años de actividad, Rouillé saca a la venta unos 800 títulos. Sus relaciones familiares y profesionales, así como su visión del negocio, le permiten crear una red para llevar sus libros hacia otras regiones de Francia e incluso a otros países europeos, sobre todo Italia y España. Además, se asocia con otros libreros importantes de Lyón y de otras ciudades europeas como Venecia, Nápoles, Ginebra o Amberes, e incluso abre una sucursal en París por mediación de su sobrino. Comerciante hábil y cultivado, es el primer librero lionés que inicia una carrera política, siendo elegido tres veces concejal y adquiriendo por este medio títulos de nobleza.

A su muerte en 1589, a la edad de 71 años, deja a su hija una considerable fortuna y el fondo de su librería, gestionada a partir de entonces por una asociación bajo la dirección de Jean-Baptiste Buysson, su hombre de confianza. Sin embargo, conflictos y disensiones entre éste y la heredera llevan a la ruptura de dicha asociación. La empresa Rouillé desaparece definitivamente hacia mediados del siglo XVII.