De cara a las próximas elecciones generales del 20 de diciembre se celebró la pasada semana un debate público en el que cinco representantes de los principales partidos que concurren a las elecciones expusieron y defendieron sus programas económicos. El debate estaba organizado por la asociación universitaria de la UCM Economía Alternativa, quienes también grabaron el acto (enlace a los vídeos al final del texto).
El debate tuvo lugar en el Aula Magna de la Facultad de Económicas y al mismo asistieron numerosos estudiantes y profesores, entre estos la Decana de la Facultad, Begoña García Greciano. Como contendientes, estuvieron en el estrado, por orden de intervención, Teófilo de Luis por el Partido Popular, Sol Sánchez por Unidad Popular, Manuel de la Rocha por el PSOE, Ignacio Álvarez por Podemos y Francisco de la Torre por Ciudadanos.
El debate tuvo tres partes o bloques temáticos: el mercado laboral, la política fiscal y el modelo productivo. Los representantes de los partidos dispusieron en cada bloque de tres minutos por intervención para exponer sus propuestas, seguidos de un período de debate de quince minutos y de un turno de preguntas para el público.
El bloque de mercado laboral dió comienzo con la intervención de Teófilo de Luis, del PP, quien expuso los objetivos de su partido para gobernar, resumió brevemente la trayectoria de su gobierno en la actual legislatura, defendió la disminucion del desempleo y la creación de puestos de trabajo en su legislatura, destacando los empleos para discapacitados y para jóvenes. Puso énfasis en la importancia de aportar talento al mercado y en las mejoras educación para mejorar nuestra productividad y ganar en competitividad.
Sol Sánchez, de Unidad Popular, aseguró que no hay buenas democracias con malos trabajos, ni a la inversa, insistiendo en que sin un trabajo digno el resto de derechos son mera retórica. Se sirvió del dato de que hoy un 14% de la población activa está por debajo del umbral de la pobreza, para desconfiar de los datos macroeconómicos que dicen que hay recuperación; afirmó que dicha recuperación no es para todos. Para terminar, enumeró algunas propuestas de su partido, que no pudo concluir al finalizar el tiempo asignado.
Manuel de la Rocha, del PSOE, afirmó que España necesita crear empleo de calidad para salir de la crisis. En su opinión la reforma laboral de esta legislatura ha sido demoledora, se ha creado empleo pero muy precario, el desempleo juvenil es del 50%, hay treinta millones de horas salariales menos que hace cuatro años. Propuso cambiar la forma de crecimiento vigente asegurando que no podemos competir a base de bajos salarios, propuso derogar la reforma laboral, un nuevo estatuto de los trabajadores, aumentar el salario minimo interprofesional, recuperar la garantia juvenil, potenciar la cultura del emprendimiento,...
Nacho Álvarez, de Podemos, comenzó afirmando que el empleo es el principal desafío de nuestra economía. Habló de los salarios por debajo del umbral de la pobreza y de la precariedad laboral. Defendió la necesidad de generar empleo, pero que sea de calidad. Para ello propuso terminar con la austeridad, revirteindo los recortes del gasto público e implantando una política fiscal expansiva, poniendo, en fin, el crecimiento económico al servicio del empleo. Entre otras propuestas, formuló su propósito de recuperar la negociación colectiva, aumentar el salario mínimo, combatir el fraude y corregir la brecha salarial de género.
Francisco de la Torre, de Ciudadanos, describió muy negativamente nuestro mercado de trabajo, dijo que estructuralmente no funciona, uno de cada tres no puede trabajar, la temporalidad y precariedad son crecientes... Propuso terminar con las cuarenta y cinco formas de contrato laboral existentes sustituyéndolas por un contrato con una indemnización creciente. También propuso completar las rentas más bajas con un complemento salarial, cambiar las políticas activas de empleo, el cheque de formación para reciclaje a cada desempleado, y reformar los servicios públicos de empleo, por ineficaces.
Tras estas intervenciones empezó el turno de debate, si bien se trató más bien de una sucesión de monólogos, con muchas alusiones a las propuestas de Ciudadanos. El moderador pidió intervenciones más breves para estimular el debate. Siguió una animada ronda de preguntas: ¿quién crea la riqueza, los trabajadores o los empresarios?, ¿propone Ciudadanos la mochila austríaca?, ¿la renta garantizada desincentiva el trabajo?, ¿cómo crear empleo, cómo incentivar a las empresas?
En el segundo bloque, sobre política fiscal, Teófilo de Luis, del PP, defendió la actuación de su partido en su etapa de gobierno, enfocada en no tocar los servicios públicos ni las pensiones y, sobre todo, en evitar una intervención de autoridades exteriores. En política fiscal propuso estimular a las empresas, el desarrolo de la i+D+i, y una reducción del IRPF.
Sol Sánchez, de Unidad Popular, planteó como objetivo el desarrollo de una reforma fiscal justa, suficiente, equitativa y progresiva, en cuyo centro se hallara la redistribución de la riqueza. Para ello propuso primar la progresividad, la igualdad y la suficiencia. A su plan de rescate ciudadano añaden un capítulo fiscal que contiene la reforma del impuesto de sociedades, la equiparacion de rentas del capital y el trabajo, un nuevo impuesto a las transacciones financieras, un nuevo impuesto a la riqueza, y la lucha cobtra la evasión fiscal.
Manuel de la Rocha, del PSOE, empezó analizando la legislatura; calificó la herencia del PP como más deuda pública -8000€ cada español, aseguró- y un enorme déficit publico. Para reducir el déficit no propuso sólo reducir el gasto, como atribuyó al PP, sino aumentar los ingresos: que paguen más las grandes fortunas y los que contaminan, luchar contra el fraude fiscal, acabar con las amnistías. Y cumplir también nuestras obligaciones europeas.
Ignacio Álvarez, de Podemos, mantuvo que el problema no es el gasto, sino los ingresos. Propuso un ritmo de ejecución del déficit más paulatino, priorizando las medidas contra el desempleo antes que la reducción del déficit, pero sin incumplir nuestros compromisos con Europa, sólo difiriéndolos. Habló de la necesidad de que pague quien no paga, señalando que ahora pagan casi sólo las rentas del trabajo y la necesidad de incrementar la recaudación a través del impuesto de sociedades, de un impuesto de solidaridad, y también reclamó que las entidades financieras devuelvan el rescate.
Francisco de la Torre, de Ciudadanos, afirmó que nuestro sistema fiscal no funciona, prueba de ello es que parece que siempre pagamos los mismos, los trabajadores. Propuso una reforma del sistema fiscal, empezando por las sociedades, que a fecha de hoy pagan sólo un 6% de sus resultados. Su prioridad es garantizar que el dinero público no se malgasta, así como incrementar los medios de la agencia tributaria.
Tras esta intervención dio comienzo un nuevo turno de debate entre los representantes de los partidos y, seguidamente, el público formuló sus preguntas, las cuales trataron de asuntos diversos: las diputaciones, cómo financiar una bajada de impuestos, la reducción del IRPF, o las amnistías fiscales.
El tercer y último bloque, sobre el modelo productivo, fue abierto de nuevo por Teófilo de Luis, del PP. En sus palabras, el modelo productivo es el que permite que haya más riqueza y bienestar en un país, pero para que exista crecimiento económico son necesarios tres requisitos: seguridad jurídica, seguridad económica y seguridad política; afirmó que su partido puede garantizar mejor que los demás el cumplimiento de estos tres parámetros. Habló de la necesidad de potenciar el crecimiento interior, evitar que España sea sólo un país de servicios, potenciando su sector industrial, ofreciendo una mano de obra cualificada, fortaleciendo el tejido productivo para hacerlo competitivo y avanzando en investigación y desarrollo.
Sol Sánchez, de Unidad Popular, denunció el lamentable estado de nuestro modelo productivo, que achacó, entre otros factores, a una dinámica europea centro vs periferia que indice en la desindustrialización, y a la existencia de oligarquías ligadas a la propiedad del suelo rural a la especulación urbanística. En su opinión, es necesario revisar la constitución como paso previo para revisar el modelo productivo. Rechazó el TIPP y el TISA. Detalló algunas herramientas necesarias para poder cambiar el modelo productivo, entre ellas la conversión de la banca nacionalizada en banca al servicio público. También propuso revertir la privatización de grandes empresas, como por ejemplo las del sector energético.
Manuel de la Rocha, representando al PSOE, afirmó que hay que empezar a competir mejorando la productividad. Para ello apuestan por la economía 4.0: valor añadido, recuperar la industrialización, intervención inteligente por parte del gobierno, apoyando la digitalización, la innovación, apoyando a las Pymes. Propuso convertir el ICO en un verdadero banco público de inversión. Criticó los precios de energíaen España, apuesta por energías renovables, por la eficiencia energética. Necesitamos una economía más inclusiva y con verdadera competencia.
Ignacio Álvarez, de Podemos, habló de la necesidad de hacer reformas estructurales, pero no reformas como la laboral del PP, que no ha incidido en ninguna mejora en nuestro sector externo. Nuestro sector exportador tiene los mismos problemas históricos (deterioro de la balanza comercial, debilidad exportadora...). Abogó por la necesidad de equipararnos con Europa en inversión en i+D+i, poner las energías renovables en el centro del consumo energético, y garantizar el crecimiento de las Pymes mediante una financiación adecuada, que vendría mediada por una banca pública de calidad.
Francisco de la Torre, de Ciudadanos, argumentó que nuestro modelo productivo se ha basado en competir a base de bajos sueldos; por el contrario, defendió un modelo en el que se compita con calidad. Planteó la necesidad de poner la educación en el centro del debate para que nuestras nuevas generaciones estén mejor preparadas. Otras ideas que apuntó giraron en torno a terminar con la burocracia; sustituir el sistema actual de cuotas de autónomos por una cuota variable; incrementar la inversion en i+D, suprimir las barreras al crecimiento de las empresas, mejorar la competitividad.
El debate de nuevo dio a todos la oportunidad de replicar a las alusiones y propuestas de los restantes representantes de los partidos en un turno de debate. Y el último turno de preguntas permitió al público plantear diversos interrogantes como: ¿qué diferencia a Podemos de Unidad Popular?, ¿cómo evitar el fraude en las cuotas de autónomos?, ¿qué propuestas sobre infraestructuras, sistema energético y sistema financiero realiza Podemos?
Por último, el moderador de Economía Alternativa concedió a cada uno de los asistentes una intervención de un minuto para solicitar el voto para su partido.
El representante del PP insistió en la confianza y rigor que ofrece su partido y en su compromiso con la bajada de impuestos y con la calidad.
La representante de Unidad Popular declaró que su propuesta es radical: democratizar la economía y ponerla al servicio de los ciudadanos y no a la inversa.
El representante del PSOE propuso un proyecto de país a largo plazo enmarcándolo en nuestro contexto geográfico, con el crecimiento sostenible y la lucha contra la desigualdad como ideas centrales.
El representante de Podemos no quiso pedir el voto, sino que invitó a reflexionar sobre el tipo de sociedad en la que nos queremos convertir, señalando tres prioridades: revertir los recortes, acercarnos a Europa y profundizar la democracia.
El representante de Ciudadanos describió su propuesta como un proyecto nuevo, cuyo objetivo es reconstruir la clase media trabajadora, con actuaciones sobre el mercado de trabajo y la fiscalidad como ideas clave.
El debate fue grabado por los organizadores, la asociación Economía Alternativa, y se puede ver en Youtube en los siguientes enlaces: