Ayer, se presentó en el Salón de Grados de la Facultad el libro "No es economía, es ideología: que no nos roben las palabras", coordinado por Jorge Fabra Ultray y editado por Deusto. El evento es la segundo de la nueva actividad  "Presentacion de libros" que anunciabamos en un post anterior.

Los autores forman un grupo "Economistas frente a la crisis". J. Ignacio Bartolomé, Mónica Melle y Josep Borrell, acompañados por la decana, Begoña García Greciano y el Vicedecano, Valentín Edo, que presentaron el acto, fueron tomando la palabra, explicado diferentes aspectos tratados en el libro, cuyo objetivo principal es crear el debate y la crítica. Concretamente se centraron en tres aspectos, el primero, del que habló Bartolomé, trataba de la necesidad de hacer ascender la demanda para incrementar el PIB, ya que no estamos ante una crisis de oferta sino de demanda. Las medidas adoptadas para hacer disminuir la deuda pública, cuyo record iguala al que se alcanzó con la guerra de Cuba, así como las cotas del paro, que han alcanzado un 26%, no han dado resultado. Es necesario entrar en la senda del crecimiento.

En segundo lugar, tomó la palabra Melle, centrando su discurso en la necesidad de mejorar las condiciones de un buen gobierno corporativo, y la crisis es una oportunidad para llevarlo a cabo. Debe crearse una demanda interna para lo que es necesaria una nueva visión empresarial que tenga una gobernanza corporativa y que tenga en cuenta valores a largo plazo como pueda ser el capital humano. En definitiva un modelo diferente de empresa.

Por último, Borrell habló de la reforma del sistema financiero, cuya estabilización pasa por la unión bancaria. La crisis europea, si se exceptúa Grecia, no viene provocada por un problema de fiscalidad. Según él, la reducción del gasto público se está realizando muy rápido con unas consecuencias que empeoran la situación. Era necesaria una racionalización, pero debe existir una política de crecimiento. El Euro, que nació cojo y sin tener en cuenta las crisis cíclicas, no tiene una política de cambio.

Tras la intervención de los tres ponentes, se suscitó un debate de mucho interés entre los miembros de la mesa y el numeroso público que acudió al acto.