Por segundo año consecutivo, el 16 de octubre se celebra el día de las Escritoras, promovido por la Biblioteca Nacional de España, la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias y la Asociación Clásicas y Modernas, con el fin de recordar el legado cultural de las autoras españolas e hispanoamericanas. Este año el tema propuesto es Mujeres, saber y poder inspirado en el concepto del empoderamiento femenino. Y, como no podía ser menos, la Biblioteca Histórica se suma a este homenaje redescubriendo a Margarita de Navarra con su obra cumbre Heptamerón. Ella misma en su autobiografía se define como: "Margarita de Angulema, por la gracia de Dios reina de Navarra, princesa de la primera rama de Orléans de la casa de Francia, duquesa de Alençon,... teóloga, poeta, escritora, diplomática, mecenas y protectora de las artes y las ciencias, gran intelectual renacentista y, por mis dolores, reformista religiosa..." [Seguir leyendo].
Margarita es un personaje del renacimiento, de tendencia neoplatónica, que destaca por su extraordinaria preparación humanista, sensibilidad y su afán de impulsar a los movimientos científicos, poéticos y religiosos de vanguardia de la época. No es de extrañar que para muchos historiadores Margarita de Navarra sea considerada como "la Médicis del Renacimiento en Francia".
Repasamos aquellos capítulos de su vida claves para entender la dualidad a la que se enfrentaba. Por un lado, su pasión por las letras y el pensamiento; y por otro, su interés por redefinir las verdades de la fe cristina.
Con su primer matrimonio con el duque de Alençon, siente tal vacío espiritual que se sumerge en el conocimiento de la mística. Y será la reflexión religiosa la que ocupe gran parte de su tiempo, como era de rigor en un siglo desgarrado por los sectarismos y las guerras religiosas. Su amistad con los mejores espíritus de Francia -Guillermo Briconnet, Lefevre d'Etaples, Gerald Rousel...- la lleva a apoyar a este grupo de humanistas evángelicos que crean "el Cenáculo de Meaux" en las Academias reales de Pau y Nérac. Tras su matrimonio con Enrique II de Albret, en 1527, sus inquietudes personales entorno a la filosofía evángélica, se dejan entrever en algunos de sus textos, como el poema Le Dialogue en forme de visión nocturne, Chansons Spirituelles, La Navire, Les Prisons, etc.
La autora vive un episodio amargo en su vida con la publicación de Le Miroir de l'âme pécheresse en 1531, pues la Facultad de Teología de la Universidad de la Sorbona quiso censurar la obra por ser de tendencias contrarias a la fe católica. Esta mujer erudita de la Reforma, se confiesa como una creyente heterodoxa.
Pero a pesar de los avatares que vivió, en medio de las profundas convulsiones sociales de su época, fue la primera mujer de la nobleza francesa que recopila cuidadosamente sus obras completas, y cual editora literaria, selecciona aquellos poemas, dramas, meditaciones religiosas, canciones y obras seculares meritorios de la prensa.
En su obra célebre Heptameron de nuevo, retrata con sutileza erótica el amor bajo todas sus formas, de las más prosaicas a las más espirituales, convirtiéndose en una historia de gran belleza. Consta de un prólogo y 72 relatos divididos en siete jornadas completas, donde diez viajeros, cinco hombres y cinco mujeres se resguardan en una abadía a causa de un temporal que les deja totalmente incomunicados. Con la fin de entretenerse, cada uno de ellos cuenta una historia, dando lugar a un ameno dialogo provocado por los comentarios de los participantes. En esa obra, según señala el historiador Jon Oria, "Margarita hace feminismo intelectual, en el análisis que hace de los personajes, contraponiendo los femeninos a los masculinos, pudiéndose afirmar que es la primera mujer moderna".
La obra que conservamos en la Biblioteca Histórica con el título Les Nouvelles de Marguerite, reine de Navarre carece de texto; parece que los grabados se comercializaron aparte ya que se conocen otros ejemplares que contienen sólo las ilustraciones. Los grabados que ilustran cada una de las 72 novelas fueron diseñados por Sigmund Freudenberg y grabados por Josep de Longueil, Carl Guttemberg, Louis Michel Halbou, Robert Delaunay, Jacques Le Rpy, Benoit Louis Henriquez, Elisabeth Thibault y Mme. Duflos; Balthasar Anton Dunker fue el autor del frontispicio grabado y de las 72 viñetas que ilustran los textos.
Nos hemos acercado a una figura entrañable de la literatura y de la historia religiosa de la que se ha escrito mucho, sin duda con el interés de encumbrar y destacar sus éxitos. Simone de Beauvoir comenta de ella "La escritora que mejor sirvió a la causa de su sexo fue Margarita de Navarra, que propuso contra la licencia de las costumbres un ideal de misticismo sentimental y de castidad sin mojigatería, tratando de conciliar amor y matrimonio para honor y dicha de las mujeres".
Bibliografía:
Jourda, Pierre. Marguerite d'Angoulême, Duchesse d'Alençon, reine de Navarre (1492-1549): étude biographique et littéraire. Paris: Librairie ancienne Honoré Champion, 1930
Múgica, M.. (2011) Vida de Margarita de Angulema, reina de Navarra. Recuperado de https://www.educacion.navarra.es/documents/713364/714655/Vida+de+Margarita+de+Angulema/b1f5c6c1-d828-4072-97ef-cb7b3bb27e30