¿Cómo os quedáis si os decimos que no fue hasta 1976 cuando una mujer británica participó por primera vez en una expedición geológica a la Antártida? Este Día de la Mujer Trabajadora 2021 queremos dar a conocer la historia de la geóloga Janet Thomson (Staffordshire, Inglaterra, 1942).

Educada en el Bedford College de la University of London, ha dedicado su carrera al estudio de la geología en la Antártida al servicio del British Antarctic Survey (BAS) desde 1964 hasta su jubilación en 2003 como Directora del Mapping and Geographical Information Center (MAGIC).

Ella misma refiere las innumerables solicitudes que hizo para poder participar en las expediciones geológicas, ya que para investigar necesitaba "ensuciarse las manos para recoger las muestras y observar el entorno en el que se hallaban" en lugar de estudiar las muestras que sus colegas masculinos le traían. Pero siempre se encontraba el mismo muro: la política de la institución limitaba la participación en las expediciones a los miembros masculinos. "A las mujeres no les gustará la Antártida porque no hay tiendas ni peluquerías", afirma que fue la respuesta escrita que recibió una colega suya que también quería ir. Parece que el origen militar naval de estas bases británicas (Halley, Rothera, Signy, etc.) explica la herencia de una política y de unos códigos de conducta discriminatorios.

El caso es que, cansada de la situación, Thomson se unió a una expedición estadounidense en 1976 donde se convirtió en la primera mujer británica en dirigir una investigación en la Antártida. Solo 18 años después, en 1983, el BAS le autorizó a embarcarse rumbo al círculo polar Antártico. En 1986 se permitió trabajar en Signy a las primeras cientíticas durante el verano, pero hubo que esperar a 1993 a que una mujer pasara allí el invierno y a 1997 para que lo hiciera en Rothera 1997.

Dice Thomson que en 1999 le comentó algo a una joven científica sobre lo estupendo que eran las oportunidades que se habían abierto para ellas mientras hacían cola para cenar en la base de Rothera, y que la joven le miró perpleja y con cara de no entender lo que le estaba diciendo. 

Esta anécdota sirve para recordar desde este pequeño rincón de la UCM el riesgo de dar por sentada la suerte que tenemos hoy las mujeres de poder dedicarnos a lo que nos guste sin obstáculos de género y para que nos sirva de inspiración a fin de lograr la tan ansiada igualdad de oportunidades allí donde todavía no se ha logrado.

Referencias:

Janet Thomson: A woman's place is in the Antarctica. https://dangerouswomenproject.org/2016/12/16/janet-thomson/ 

Janet Thomson: an 'improper segregation of scientists' at the British Antarctic Survey https://n9.cl/ff8wj 

Janet Thomson https://en.wikipedia.org/wiki/Janet_Thomson 

'Women won't like working in Antarctica as there are no shops and hairdressers' https://n9.cl/690u2 

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Ana Cabeza Llorca