Además de como un servicio sanitario, la oficina de farmacia se ha configurado en nuestra sociedad como un indudable negocio y, como consecuencia, el farmacéutico también ha tenido que adaptarse a esta evolución, adquiriendo conocimientos empresariales...

Esta realidad, que hoy nos parece tan evidente, tardó sin embargo varias décadas en ser aceptada, y aún más tiempo en encuadrarse en unas formas de actuación consecuentes.

En efecto, actualmente ya no basta con tener un almacenaje suficiente de medicamentos para garantizar la viabilidad comercial de una farmacia, sino que además es necesario adaptarse a las nuevas prioridades del consumidor, así como al aumento de competencia en este sector.

A la luz de esta evolución, disciplinas como el marketing farmacéutico, la administración empresarial o la gestión de recursos humanos, han ayudado a encontrar nuevas fórmulas de actuación que posibiliten la viabilidad de una oficina de farmacia.

La biblioteca de farmacia pone a disposición de sus usuarios esta guía que pretende recoger todas estas aportaciones, ayudando al farmacéutico en su día a día y ofreciéndole herramientas prácticas para llevar mejor su farmacia, entendida ésta como un ente empresarial, proporcionando las claves para comunicarse con el nuevo cliente, modelos de construcción de la marca, formas de disposición de los productos o métodos de gestión por categorías, todo ello por medio de un lenguaje sencillo y consejos muy prácticos y fáciles de llevar a cabo.