La relación del hábito tabáquico y la alimentación de nuestros hijos, el análisis de los múltiples factores que interactúan en el desarrollo de la obesidad infantil y las propuestas de solución tendentes a evitar que los niños obesos de hoy se conviertan en los adultos enfermos de mañana son el objeto de estudio de esta interesante Tesis  Doctoral...

Es evidente que la nutrición es uno de los principales factores involucrados en el alarmante incremento que durante los últimos años se viene registrando en relación con enfermedades como la obesidad, la diabetes mellitus tipo 2, las enfermedades cardiovasculaes, la hipertensión y algunos tipos de cáncer.

El efecto que este incremento provoca en los índices de morbilidad, mortalidad y discapacidad entre la población española y la de los países de nuestro entorno, así como en la planificación económica del sector sanitario público se traduce inevitablemente en una reducción general de la esperanza y la calidad de vida.

Se impone por tanto la necesidad de adoptar medidas que rectifiquen esta situación, siendo la etapa escolar la más adecuada para iniciar estos cambios, ya que es en ella cuando se conforman los hábitos alimentarios y cuando más efectivo resulta el fomento de otros hábitos saludables como la actividad física.

Sin embargo el hecho de que cualquier intento de actuación en este terreno se encuentre seriamente condicionado por los hábitos, costumbres y estilo de vida de los padres y personas del entorno de los niños, obliga a extender la intervención educativa al ámbito familiar.

Liliana Guadalupe González Rodríguez es la autora de un notable proyecto de investigación que bajo el título Situación nutricional de escolares de la Comunidad de Madrid. Condicionantes familiares, aborda el papel crucial que juega la nutrición en la prevención de enfermedades crónicas no transmisibles, así como la importancia de la educación nutricional en la edad escolar y su extensión al ámbito familiar.

El estudio se centra en la población escolar de la  Comunidad Autónoma de Madrid y mediante la utilización de indicadores antropométricos, dietéticos, hematológicos, bioquímicos y de actividad física del niño en combinación con aspectos sociosanitarios  de la familia, constata que un tercio de los escolares estudiados presenta sobrecarga ponderal y una baja actividad física, al mismo tiempo que en un elevado porcentaje se observaron dietas inadecuadas caracterizadas por bajo consumo de cereales, legumbres, verduras y frutas, siendo el nivel educativo de la madre y el hábito tabáquico de uno o ambos progenitores dos de los factores más determinantes de esta situación.

Este último aspecto es muy revelador, ya que tras la investigación la autora concluye que la ingesta de hidratos de carbono, proteínas, fibra y ácidos grasos trans, así como el perfil calórico y lipídico fue más favorable en los hijos de uno o ambos padres no fumadores que en los hijos de uno o ambos padres fumadores. 

Igualmente, el trabajo confirma que la ausencia de hábito tabáquico en uno o ambos padres se correspondía con escolares con una mejor evaluación en relación con el consumo de alimentos (frutas, verduras, carnes) y con las ingestas de piridoxina, folatos, vitamina C, biotina, beta-caroteno, vitamina E, K y D, cinc, magnesio y potasio, siendo también más favorables las concentraciones séricas de folatos así como las de cinc, probablemente debido a la menor exposición al humo del tabaco.

Paralelamente, las conclusiones del estudio aconsejan la disminución del tiempo dedicado por los escolares a ver la televisión, al ser esta una actividad directamente relacionada con el padecimiento de obesidad. Igualmente la constatación de un elevado procentaje de dietas inadecuadas ente los escolares madrileños hace necesario fomentar el incremento del consumo de cereales, legumbres, verduras y frutas, así como potenciar la práctica deportiva.

En definitiva, los resultados obtenidos ponen de manifiesto que para obtener una mejora de los hábitos de vida y alimentación de los escolares, es necesario focalizar la atención en las características familiares del niño fomentando hábitos de vida saludables en las familias, así como evitar el hábito tabáquico, aumentar la actividad física y mejorar la alimentación.

El texto completo de esta interesante Tesis doctoral, dirigida por los doctores Rosa María Ortega Anta, José Miguel Perea Sánchez y Elena Rodríguez Rodríguez, del Departamento de Nutrición I de la Facultad de Farmacia de la UCM, se encuentra disponible en la sección de Eprints de la Biblioteca accesible desde la página web, o directamente desde este enlace.