Los últimos datos de la misión LRO de la NASA revelan la presencia de minerales ricos en sílice en nuevas regiones de la superficie lunar. Los minerales son diferentes a los encontrados previamente y también difieren de los de otras áreas cercanas. Sin embargo, su composición es similar a la de algunos materiales encontrados en la Tierra.
Dos informes independientes de Science esta semana ofrecen pruebas convincentes de que la Luna es un cuerpo celeste complejo, que ha ido experimentando sucesivos procesos ígneos en el tiempo.
Los investigadores Benjamin Greenhagen y sus colegas analizaron los datos extraídos del instrumental Diviner Lunar Radiometer Experiment sobre la sonda Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO) y han localizado marcas térmicas de compuestos de sílice muy evolucionados en amplias demarcaciones de la superficie lunar.
Al centrarse en cuatro demarcaciones concretas que los científicos denominaron 'puntos rojos' ('Red spots', en inglés), dijeron que el espectro de radiación infrarroja media que presentaban se podía comprender por la presencia de cuarzo, un mineral rico en sílice, o feldespatos.
Estas composiciones minerales no se han encontrado en ninguna otra parte de la Luna por el momento, pero podría compararse al granito o la riolita en la Tierra, dice el científico de la NASA, Timothy Glotch.
Además, según los investigadores, la presencia de diversas formas en la superficie, asociadas a estos minerales, sería un indicio de que alguna vez hubo magma fluyendo por encima y por debajo de la superficie lunar.
Fuente: El mundo