Hollywood nos tiene muy acostumbrados al Apocalipsis. Son innumerables las veces que hemos visto el fin de la civilización en su cine. En los años noventa, Hollywood explotó hasta la saciedad innumerables amenazas globales, motivadas por monstruos gigantes, extraterrestres, o cualquier otro ente de carácter, claro está, siempre hostil. En años recientes, la aniquilación proviene de algún desastre natural.
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