Debido a la complicada situación económica, los impagos están a la orden del día. Tarde o temprano un arrendador tal vez tenga que lidiar con ello, con todos los quebraderos de cabeza que acarrea. Para evitarlo, cada vez son más numerosos los caseros que deciden contratar un seguro que proteja su alquiler en la medida de lo posible.
Si también es tu caso conviene que dediques el tiempo necesario a elegir un seguro de alquiler, puesto que es una decisión muy importante que te evitará problemas en un futuro si se da la situación anteriormente descrita. Acertar no es difícil, siempre y cuando tengas en cuenta los aspectos que detallaremos a continuación.
Servicio de protección jurídica de cobro de rentas
Es comprensible que, ante los elevados precios de un convencional seguro de impago de alquiler, algunos propietarios decidan prescindir de protección. Se trata de un error, ya que si se termina produciendo el problema con el arrendatario, el casero estará desamparado y tendrá muchas dificultades para cobrar lo que se le debe.
Lo más recomendable es decantarse por un servicio mejor adaptado a los tiempos actuales y que lleva años en pleno auge. Hablamos de la protección jurídica de cobro de rentas.
Es habitual que el inquilino haga caso omiso de los mensajes recibidos. Sin embargo, todo cambia en caso de que sea un grupo de profesionales especializados quienes hagan de intermediarios, encargándose de tramitar la gestión de cualquier tipo de atraso e incluso impago.
Pagar el menor precio posible
Si te decantas por el servicio recientemente descrito has de tener en cuenta que no es un seguro propiamente dicho. Gracias a ello el precio a abonar es muy inferior en comparación con el que exigen compañías que se dedican específicamente a los seguros de alquiler.
En este caso hablamos de un coste aproximado de cincuenta euros anuales, cifra que aporta una impagable tranquilidad a los propietarios. Y es que todos ellos saben que las rentas y los cobros serán controlados por profesionales, quienes ante problemas para cobrar las mensualidades emprenderán las medidas legales oportunas, recurriendo si es necesario a los métodos judiciales.
Protección plena
Aunque los seguros al uso son bastante completos -lo cual repercute en un precio superior-, si se desea una protección plena hay que contratar un producto adicional: el seguro de hogar.
Este motivo se suma a todos los otros ya detallados en anteriores párrafos para dar pie a que, a la hora de elegir un seguro de alquiler, poco a poco más usuarios vayan optando por el servicio de protección jurídica de cobro de rentas.