Unos padres que tienen un hijo con una discapacidad
Por fin ya estaba aquí, había sido un embarazo muy largo y lleno de complicaciones, primero el azucar, luego la tensión, la subida de peso, el dolor de espalda, y cuando parecía que todo mejoraba dos falsas alarmas de parto, ¿se puede pedir más?.
Todas estas cosas en ese momento se habían olvidado, parecía un recuerdo lejano, como cuando ves una película. El pequeño Juanito ya estaba entre nosotros pero no habia llegado solo, una negligencia médica había hecho que el recién llegado Juanito llegara sin visión en un ojo, un drama para sus padres que deberían dar el doble amor a su hijo del que pensaban, porque el amor ni se ve ni se huele, se siente.