Historia de un cerrajero que ayudo a una señora
Pablo llevaba más de 30 años trabajando como cerrajero en Lleida, le había enseádo el oficio su padre hace muchos años y desde niño había querido ser cerrajero, abrir puertas, cajas fuertes, eso le gustaba mucho desde pequeño además de las películas de indios y vaqueros.
Palo creció, se hizo mayor y se hizo cerrajero por vacación y siguió viviendo en su tierra natal en la Lleida de su corazón.
Una mañana Pablo recibió una llamada de una señora, le pedía por favor que fuera ahora a su casa ya que se había quedado fuera y tenía la sopa hirviendo en la cocina. Pablo llegó en 5 minutos pues Lleida es una ciudad pequeña y se llega en un periquete.
Abrío la puerta y la señora le invitó a comer, durante la conversación la señora dijo que tuvo un novio cerrajero de joven que además se le parecía mucho, en efecto el novio de la señora había sido su PADRE.