Aquel invierno que soñaba con la primavera.
Cuando pasen los días y los meses y lo años. Tal vez nos acordemos de aquel invierno - este - que soñaba con la primavera, la próxima.
En nuestra revista han florecido ya muchas ilusiones, proyectos, ideas y expresiones artísticas que se han hecho realidad. También nos está naciendo - después de una larga y laboriosa gestación - nuestro propio canal de proyectos educativos, ciencia, arte y cultura, incluso de cortometrajes: e-innova media, al que pronto dedicaremos una calurosa bienvenida. Y detrás, o - mejor - delante, están las personas que hacen que todas estas cosas se hagan realidad, en ningún momento nos olvidaremos de ellas, ni tampoco de quienes nos siguen y se reconocen en lo que hacemos y por lo que lo hacemos.
Deseamos ser un referente en el novedoso campo de las revistas culturales electrónicas, aspiramos - en cada número- a una mayor calidad técnica y artística, a recoger en nuestra travesía a un mayor número de ideas nuevas, a ser bandera de innovación y de progreso, de solidaridad, creatividad, imaginación, libertad y tolerancia.
Queremos que sólo sean las buenas personas las que se acerquen y compartan nuestro calor, en este invierno frío. Queremos caminar a su lado y celebrar, juntos, la primavera que soñamos.
La primavera del triunfo de lo mejor que hay en la humanidad más humana, de la que siente el dolor de los abandonados, de los marginados, de quienes no pueden superar la enfermedad porque carecen de los medios necesarios que otros tienen, de los que aún en la más grande de la pobreza no sólo siguen creyendo en su propia dignidad, sino también en la nuestra, porque saben que mientras haya gente como nosotros aún les queda la esperanza.
Una primavera que se alzará para no consentir jamás que haya un solo niño - en nuestro país o en el mundo - que pase hambre, penurias y calamidades.
Para que no haya una sola persona que sea expulsada con violencia del derecho de su hogar, mientras que quienes protestan por ello son castigados con la más injusta de las leyes.
Porque creemos, firmemente en representantes que estén - de verdad - al servicio de los ciudadanos - especialmente los más desprotegidos
Y porque como siempre, seguiremos soñando con la esperanza de que ya no habrá primaveras negras que se ciernan sobre la Educación y la Sanidad Pública. Porque nos esforzaremos en poner límite a quienes quieran acabar con todo lo que de verdad es necesario para el derecho de la igualdad de oportunidades, para salir adelante a nivel individual y colectivo.
Porque queremos una gran nación con dignidad y para que, desde todas las partes del mundo, vengan a preguntarnos cómo lo hicimos.
Porque deseamos conectar con todas y todos aquellos, de cualquier lugar del planeta que sienta lo que nosotros sentimos.
Sí, se marcharán los fríos invernales y llegará la primavera, ¿se podrán hacer nuestros sueños realidad?
¿No has pensado que poder conseguirlo sólo depende de ti?