La Orquesta Sinfónica de la UCM ofreció este 9 de marzo su habitual concierto de "mitad de curso" en el anfiteatro Ramón y Cajal de la Facultad de Medicina. Como explica su director artístico y musical, José Sanchís, la actividad de la orquesta sigue el calendario académico: inicia en octubre los ensayos y se "examina" ante el público en diciembre, marzo y junio. A juicio de su director, José Sanchís, el concierto tuvo un nivel muy alto, como pudieron comprobar los asistentes que llenaron el auditorio. El concierto tuvo carácter benéfico, con una "fila cero" en apoyo de la campaña de Médicos sin Fronteras "Seguir con vida" de apoyo a los refugiados.
Como explica su director artístico y musical, José Sanchís, la actividad de la orquesta sigue el calendario académico: inicia en octubre los ensayos y se "examina" ante el público en diciembre, marzo y junio. La dificultad cada año es doble, ya que a la intención de dar a la Orquesta -que fue creada en 2011- "una mayor consistencia, elevar el nivel y continuar con una dinámica ascendente", como señala su director, hay que sumarle la dificultad que supone la renovación cada año de un buen número de sus músicos. "Es normal que en una orquesta de músicos jóvenes ocurra esto, pero en nuestro caso al ser universitaria, la renovación es aún mayor. Pero -continúa Sanchís- no nos podemos quejar y creo que estamos siguiendo una línea de trabajo muy buena y la orquesta, como se ha podido comprobar en el concierto- está alcanzado un nivel muy alto".
Para los dos conciertos de esta "minigira" de mitad de curso -dos días antes la orquesta ofreció otro concierto en el Centro Cultural Antonio Machado, de Madrid- el programa elegido ha sido la Obertura Coroliano, de Beethoven; la Petite Symphonie para vientos, de Charles Gounod, y la Sinfonía nº 38 Praga, de Mozart. Como explica José Sanchis, el programa se modifica para cada una de las tres franjas de conciertos del año. La próxima será en junio. Es segura de nuevo la presencia de la Orquesta en el Anfiteatro Ramón y Cajal, a la que posiblemente habrá que sumar otras actuaciones incluso lejos de la capital, como ya sucediera el pasado año, cuando ofrecieron un concierto en el Auditorio de Zaragoza. "Aún no es seguro, pero es muy posible que volvamos allí", afirma Sanchís.
El concierto ofrecido por la Orquesta Sinfónica de la UCM este 9 de marzo tuvo además un componente benéfico, ya que esta ha sido una de las actividades con las que la Universidad Complutense colabora con la campaña "Seguir con vida", de Médicos sin Fronteras. En concreto, se creó una "fila cero" para donativos a beneficio de MSF, que aún sigue abierta en el número de cuenta ES57 2100 3063 99 2200110010. Con esta campaña, MSF quiere contar a los madrileños "cómo sobreviven los civiles a una guerra, cómo son las vidas de las personas que no quedan atrapadas bajo las bombas, sino que logran escapar para malvivir como refugiados".
