La futura Ley del Espacio Madrileño de Educación Superior (LEMES), cuyo borrador de proyecto, según anunció la propia presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes, se presentará a la Asamblea de Madrid antes de que concluya este año, ha sido la gran protagonista del Acto Académico de Apertura del Curso 2016-2017 de las Universidades de Madrid, que este año se ha celebrado en el Paraninfo de la Universidad Complutense. Y es que, aunque la futura EMES aún está en estado "embrionario", como lo calificó la propia Cifuentes -quien presidió el acto junto al rector de la UCM, Carlos Andradas- en ella deben ponerse negro sobre blanco algunas de las reivindicaciones que desde hace ya muchos años llevan haciendo las universidades. En especial, como señaló el rector Andradas, la futura ley debe garantizar "una financiación estable, sostenida, transparente en sus mecanismos y ejecución, que incluya, necesariamente, un capítulo de inversiones porque el primer paso para la calidad está también en la dignidad de los espacios físicos".
La presidenta de la Comunidad de Madrid considera la ley "muy importante" para el futuro de la región, y por ello, según señaló, busca el consenso con las universidades. De acuerdo con sus palabras, el borrador de Ley se está elaborando tras hablar con todos los miembros de las comunidades universitarias, desde sus estudiantes, trabajadores, consejos sociales y responsables de las mismas. Para la presidenta madrileña, la EMES garantizará la prestación de la educación superior como servicio público y a la vez permitirá situar a las universidades madrileñas "a la vanguardia de la docencia, la investigación y la transferencia tecnológica". Aseguró que en esta ley las universidades encontrarán una financiación "estable, plurianual y que garantizará una financiación suficiente para abordar y planificar sus cometidos"
El debate de la futura ley ha venido acompañado de la "buena noticia" del compromiso de la Comunidad de pagar antes de que finalice el año las cantidades que adeuda con sentencia judicial de por medio a la universidades. En total, 259.6 millones de euros. Esta "buena noticia" debe ir acompañada, como recordó el rector Andradas, "de los medios para que esta situación no vuelva a repetirse. Porque hay cosas que no son reversibles. Infraestructuras que debieron acometerse hace seis años, son ahora más costosas o irrecuperables. Proyectos que no pudieron desarrollarse. Personas, jóvenes, que no pudieron integrarse o mantenerse en el sistema y que hemos perdido... Estamos hablando -continuó Andradas- de casi una década perdida, a pesar de lo cual el sistema universitario madrileño ha resistido sólidamente la crisis y lo ha hecho gracias a los esfuerzos de quienes integran la comunidad universitaria".
Bajada de tasas y no al 3+2
Andradas tampoco quiso olvidar en su intervención otras dos reclamaciones de las universidades. La primera, la bajada de las tasas de grado hasta su equiparación con las de las comunidades en las que son más asequibles -en Madrid cuesta el doble que en otras comunidades estudiar un grado- , y la equiparación también a estas de los precios de posgrado, que hoy siguen siendo desorbitados. Y la segunda, la oposición de las universidades madrileñas al 3+2, a la opción de poner en marcha títulos de grado de tres años seguidos de másteres de dos. De acuerdo con el rector complutense, "si entendemos graduarse como algo que dé competencias y salida al mundo laboral, es más que difícil, yo diría imposible, lograrlo en tres años en muchísimas disciplinas, por lo que estaríamos obligarlo de facto a los estudiantes a cursar los dos años de máster. ¿Pero a qué precio? Y desde luego la existencia de títulos equiparables pero con distinta carga de créditos me parece que introduce una confusión y una desregulación en el sistema nada positiva. Por eso -concluyó Andradas esta parte de su intervención- hay que ser extremadamente cautos en este tema y de ahí que sigamos repitiendo nuestro lema de 3+2 Así y ahora, no".
Tres proyectos para la UCM
En clave más interna y de manera breve, el rector cerró su intervención dedicando unas palabras al debate sobre la reordenación de estructuras y servicios de la UCM. "Tenemos la ocasión, yo diría la obligación, de reflexionar cómo organizarnos para mejorar el servicio que prestamos, pensando en la mejor atención a los estudiantes, en una gestión más eficaz y ágil de la investigación, en la creación de entornos ricos y estimulantes para la docencia y la investigación. No queremos cercenar nada, sino potenciarlo. Vivámoslo como una oportunidad y no como una amenaza", concluyó Andradas, quien también señaló como "grandes proyectos del curso" la celebración en 2017 de los 90 años de la constitución de la Junta para la Construcción de la Ciudad Universitaria, lo que se "aprovechará" para abrir más el campus a la sociedad, dar a conocer sus tesoros, renovar y regenerar las partes más degradadas y abordar los problemas que más la deterioran". El tercer proyecto será la creación del Observatorio del Estudiante, "donde naturalmente con su participación se analizará sus necesidades, problemas y dificultades, proponiendo soluciones y alternativas".
Los estudiantes, con voz
Precisamente, por primera vez en un acto de apertura del curso académico, este año ha intervenido en el mismo un representante de los estudiantes. Santiago Rincón, representante del sector de Estudiantes en Consejo de Gobierno, en un discurso con referencias al Mayo del 68 y la Residencia de Estudiantes, reclamó para sus representados el papel de "cambiar lo imposible con las únicas armas de la ilusión y la imaginación". Así, reclamó la inmediata bajada de las tasas; el fin de las discriminaciones en la universidad, ya sean por sexo, raza o religión; rechazó el 3+2 por su visión utilitarista de la educación; pidió la abolición de la LOMCE, o abogó por nuevos Consejos Sociales en las universidades, en los estén reflejados los movimientos civiles. "Pero sobre todo queremos hacer saber a la comunidad universitaria que la juventud no ha muerto. Que con ilusión e imaginación cambiaremos el mundo. Seamos realistas y pidamos lo imposible", concluyó Santiago Rincón.
Lección inaugural
La lección inaugural del nuevo curso fue dictada por la profesora de la Facultad de Trabajo Social María José Barahona. En ella repasó la evolución histórica de la disciplina, desde su nacimiento en Inglaterra allá por el siglo XVII -fijó como primer hito la promulgación de la Ley de Pobres en 1601)- su crecimiento, expansión y nuevo enfoque que vivió en Estados Unidos ya en el XIX y XX, cuando se consolida como actividad científica, y su reciente consolidación en España, fijando como punto clave precisamente la creación en la UCM de los estudios universitarios de Trabajo Social. Para concluir, la profesora Barahona hizo algunas reflexiones sobre el estado actual y futuro de esta disciplina, que ya "no trabaja con problemas sino con personas", y que como otras tantas otras pese a estar protagonizada por las mujeres, éstas siguen encontrando un techo de cristal que les impide ocupar también los puestos de gestión.
Avance de la memoria del curso anterior
Como es habitual, el acto comenzó con la lectura por parte de la secretaria general de la Universidad, Matilde Carlón, de un avance de la memoria del anterior curso académico, que como la propia secretaria señaló ha concluido de manera formal con la celebración de este acto de inauguración del nuevo curso. Carlón ofreció los principales datos que resumen la actividad desarrollada es las aulas y campus complutenses durante los anteriores meses. Fueron 87.338 los estudiantes matriculados, 79.930 de ellos en estudios oficiales, 3.298 en títulos propios y 4.110 en cursos de formación continua. El mayor aumento de estudiantes se produjo en los estudios de posgrado, que aumentaron en unos 2.000 matriculados, alcanzando los 7.129 estudiantes en los 153 másteres ofertados, por los 62.957 que lo hicieron en los 82 grados (11 de ellos dobles) que se impartieron el pasado curso y los 7.712 alumnos que cursaron alguno de los 55 programas de doctorado ya verificados que se llevaron a cabo. 754 estudiantes se beneficiaron de los 800.000 € que la UCM les repartió a través de su primera convocatoria de becas complutenses para grado y máster.
De impartir todos estos estudios se encargaron 5.803 profesores con la colaboración y ayuda tanto para ellos como para sus estudiantes de las 3.282 personas que integran la plantilla del personal de administración y servicios. El resultado de la interacción entre profesores, PAS y estudiantes fue la expedición de 25.984 títulos oficiales y, como subrayó la secretaria general, gracias al impulso también de la Defensora del Universitario, la UCM se convirtió en la primera universidad española en entregar Suplementos Europeos al Título, en concreto 1.056. Este dato fue aprovechado por Carlón para subrayar el proceso de internacionalización que ha puesto en marcha la UCM, que le ha llevado este año a aprobar un plan de actuación concreto o a reforzar su actividad internacional, de la que puso como ejemplo el Real Colegio Complutense en Harvard o el congreso celebrado en julio fruto de la colaboración con la Harvard Law School. La constitución de la Alianza Iberoamericana de Universidades, junto a las de Buenos Aires, Autónoma de México, Sao Paulo y Barcelona, apunta en esta misma dirección.
Además de destacar actividades como los Cursos de Verano o la exposición "Arte y Carne", la secretaria general incluyó en su avance de la memoria del curso algunos datos que reflejan el avance de la actividad investigadora en la UCM. En concreto, se han conseguido fondos del Plan Estatal 2015 de I+D por un total de 13 millones de €, se han firmado 420 contratos 83 con empresas o instituciones por valor de cerca de 8 millones, se han formalizado 44 nuevas patentes y se han constituido 4 nuevas empresas de base tecnológica.
Discurso íntegro del rector Carlos Andradas
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