¿Qué? Lo que quieras ser, que nadie te lo imponga; tú decides, pero que te apasione. ¿Cómo? Con confianza en ti misma, con convencimiento y, sobre todo, con optimismo. ¿Con quién? Con gente buena a tu alrededor, que te aporte, de la que puedas aprender. Estos son los principales "consejos, aunque no me gusta darlos" que la presidenta de IBM España, Portugal, Grecia e Israel, Marta Martínez, ha dado a las 19 estudiantes de la Universidad Complutense con las que se ha reunido la mañana del 23 de febrero en el Instituto Complutense de Estudios Internacionales. Era la tercera cita de "Desayuno de mujeres líderes con potenciales líderes complutenses", una iniciativa, patrocinada por el Consejo Social de la UCM, que inauguró Rebeca Grynspan, secretaria general Ibeoramericana, en junio del pasado año, y que tuvo su continuidad en octubre con la presencia de la directora del CNIO, María Blasco.
Marta Martínez quiso, como indicó en el preámbulo de su intervención, dar una serie de mensajes claros a las estudiantes que la escuchaban, "unas pequeñas recetas que he sintetizado y que quizá os sirvan para algo en vuestras carreras profesionales". La situación no es fácil para las mujeres y eso que "indudablemente se ha avanzado mucho", pero aún "hay retos pendientes, como la presencia de mujeres en puestos de liderazgo, en lo que queda mucho para avanzar. El gap de género en términos cuantitativos sigue siendo importante: en los consejos de administración de las empresas del Ibex 35 las mujeres son el 20 por ciento. Es mucho más que hace cinco años, pero aún es una gran diferencia", explicó la presidenta de IBM España, quien estuvo acompañada durante su charla por el rector Carlos Andradas, la presidenta del Consejo Social de la UCM, Pilar González de Frutos, y la directora del ICEI, Isabel Álvarez.
Como buena matemática -es licenciada por la Universidad Complutense- Martínez estructuró su intervención en dar respuesta a tres ecuaciones que, a su entender, debe resolver cualquier persona a lo largo de su vida profesional: a qué se dedica, cómo hacerlo y con quién. Ser mujer es una variable que debe ser contemplada en las tres ecuaciones. Sobre el "qué" la solución es clara: "lucha por dedicarte a algo que te apasione, pero antes prepárate para que te apasionen cosas con sentido". De acuerdo con Marta Martínez, hacer lo que a una o uno le guste es un factor claro de éxito. Ella lo sabe por experiencia propia: la tradición familiar la llevaba al ámbito de la ingeniería pero ella amaba las matemáticas. "Estudiarlas fue una de las mejores decisiones de mi vida". Años más tarde, la presidenta de IBM a nivel mundial, Ginni Rometty, confió a Marta Martínez uno de sus secretos: "Que nunca te defina nadie lo que quieras". Y es que a la hora de tomar decisiones "es importante ser valiente; con sentido común, pero valiente". Un consejo más: "Cada paso que tengas que dar tómatelo como si fuera el más importante de tu vida. No hay un gran paso, sino muchos pequeños pasos que te hacen avanzar; no hay atajos, lo que tengas que hacer hazlo bien y eso te dará la posibilidad de hacer después otras cosas".
En el "cómo" la actitud es la que marca la diferencia. Hay que ser competente, tener los conocimiento técnicos, la mejor formación posible, pero también, "y aún más si eres mujer, una fortaleza emocional muy fuerte". Eso y," aquí os dejo otro consejo, siendo siempre optimistas. Hay que ser optimistas, es una necesidad vital. Hay que ver siempre la botella medio llena, es lo que te da energía y te hace conseguir muchas cosas más".
Pero las mujeres, lo dice Marta Martínez, tienen un problema: "somos muy críticas con nosotras mismas y muy autoexigentes". A ella le ha pasado siempre que ha ido promocionando profesionalmente, primero en Hewlett Packard y desde hace 15 años en IBM, donde ha ido ascendiendo en su organigrama hasta llegar en 2013 a la presidencia de la división para España, Portugal, Grecia e Israel. "Siempre llegaba a casa dudando si estaba preparada para mis nuevas responsabilidades. Un día mi marido me dijo que si fuera hombre no estaría haciéndome preguntas y dudando de mí, sino celebrando el ascenso con la familia", relató antes de dejar otro consejo: "El miedo es algo normal, pero paraliza. Tomar riesgos también da miedo pero nos hace crecer. Si estás en tu zona de confort permanentemente, nunca crecerás".
Y para concluir hay que resolver el "con quién". Martínez explica que esta ecuación es imprescindible tenerla en cuenta en el mundo actual, en el que el trabajo en equipo es una necesidad. Primero están los que te acompañan a lo largo de tu vida; "yo sin mi vida personal no hubiera llegado hasta aquí", y luego los que te rodean en el trabajo. Ahí hay que acercarse a los que te aportan, "los son buenos, los que te quieren ayudar y de los que puedes aprender". A los que consideres nocivos para ti hay que darles otra oportunidad, ser claros con ellos y decirles lo que piensas. "Mi experiencia es que la mayoría cambian su actitud; los que no... es como todo en la vida". Marta Martínez cuenta que en su marcha de HP a IBM el factor determinante fue el no sentirse cómoda entre quienes tenía que trabajar. En su nueva empresa el inicio tampoco fue fácil, pero pronto "empecé a saber detectar quién quería que fracasase y quién me quería ayudar. Aprender a ver eso es algo fundamental".
Una última cosa. "¿Y la suerte qué papel juega para tener éxito?", la pregunta una de las estudiantes en el turno de intervenciones que cerró la sesión. "El factor suerte es importante, pero no puedes depender de ella porque no es permanente. Hay que centrarse en lo que depende de una misma, de estar bien formadas técnicamente, de querer siempre aprender, a mí me encanta aprender cosas nuevas, pero ante todo hay que tener serenidad, valentía, optimismo y confianza en una misma".
