La Semana de la Ciencia es un evento europeo de divulgación del conocimiento científico que este año alcanza su XV edición. Se está celebrando del 2 al 15 de noviembre bajo el lema Conoce, experimenta, descubre y la Complutense se ha sumado con la organización de más de 180 actividades.
El vicerrector de Transferencia del Conocimiento y Emprendimiento, José Manuel Pingarrón, ha querido mostrar su respaldo a esta iniciativa, acudiendo a algunas de las actividades celebradas el día 3 de noviembre en diferentes facultades.
Comenzó su visita por la Facultad de Matemáticas, donde acudió al Festival Mágico Matemático, organizado por esa Facultad y por la asociación Divermates. Los componentes de esta última explicaron, entre otras muchas cosas, que no son pocas las canciones que están compuestas con sólo tres notas, en concreto Do, Fa y Sol. Entre ellas La bamba, Twist & Shout, Volando voy, volando vengo, Borriquito como tú o la Macarena.
Pingarrón aprovechó el buen ambiente que se creó en la sala Miguel de Guzmán de Matemáticas, con la interpretación de fragmentos de esos temas, para recomendar a los jóvenes asistentes que estudien ciencia, "porque no se van a aburrir".
El vicerrector confía en que estas actividades sirvan para crear vocaciones científicas entre los futuros universitarios. Recordó además a todos los asistentes que el dinero que se dedica a ciencia no es un gasto, sino una inversión, porque por "cada euro invertido se obtienen seis de valor añadido".
Para el vicerrector, la ciencia además cuenta con otro importante factor: el social. Esto es así porque "nos permite mejorar nuestra calidad de vida y la de nuestro entorno, y además lo hace desde todos los puntos de vista".
Tras algunos trucos de magia más a cargo de Divermates, la visita continuó en la actividad Aislando proteínas. El software de la vida, organizada por la Facultad de Químicas y el Departamento de Bioquímica y Biología Molecular I. Allí los estudiantes experimentaron con diferentes disoluciones empleadas en la purificación de proteínas.
Aprovechando que una de las estudiantes del IES Gerardo Diego que participaba en la actividad era de Estados Unidos y apenas hablaba español, profesores como Álvaro Martínez del Pozo, recordaron que "si se quiere hacer una carrera científica, es fundamental saber inglés".
Por su parte, el vicerrector insistió en la necesidad de crear vocaciones y, en caso de que no se creen, que los estudiantes al menos "tengan el gusanillo de la cultura científica". Insistió Pingarrón en que "la ciencia también es cultura y un mínimo de esa cultura es fundamental para entender este mundo en el que nos encontramos".
Las siguientes actividades elegidas por el vicerrector se celebraron en la Facultad de Veterinaria. En la primera de ellas, los estudiantes del Liceo San Pablo tuvieron la oportunidad de conocer los usos de los embriones del pollo como modelo de experimentación, en una actividad organizada por el Departamento de Anatomía y Anatomía Patológica Comparadas.
El vicerrector acabó su visita en la planta piloto del Departamento de Nutrición, Bromatología y Tecnología de los Alimentos. Allí estudiantes del Colegio Vallmont de Villanueva del Pardillo extrajeron hebras de DNA de su propia saliva con una sencilla técnica que no requiere más que agua con sal para hacer un enjuague bucal, un poco de detergente líquido para romper las membranas lipídicas de las células obtenidas tras ese enjuague y un poco de alcohol para crear una interfase de donde extraer el DNA con una pipeta.
Las actividades divulgativas continúan hasta el día 15 de noviembre por toda la Ciudad Universitaria y también en otros lugares como la Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla.