En noviembre de 1990 el presidente de la Universidad de Harvard, Derek Bok, y el entonces rector de la Universidad Complutense Gustavo Villapalos, firmaron el convenio de creación del Real Colegio Complutense (RCC) en Harvard. Se trataba no sólo de dar luz verde a la utilización de un lugar físico, la casa ubicada en el 26 de Trowbridge Street -que se abrió dos años y medio después, en abril de 1993- como lugar de residencia para profesores y estudiantes, sino sobre todo para establecer una relación permanente entre ambas universidades que ha supuesto, además de un amplio intercambio cultural y académico, una vía de acceso de los investigadores complutenses a una de las mejores universidades del mundo. Aquel acuerdo, fue, y sigue siendo, el único que ha abierto la Universidad de Harvard a los miembros de otro "college".
El 14 de diciembre se ha celebrado en el Paraninfo de San Bernardo un acto para conmemorar el veinticinco aniversario de la creación del RCC. "En realidad -explicó el rector Carlos Andradas- es la segunda parte de esta conmemoración, ya que en octubre investimos en Harvard al presidente Derek Bo, un gran visionario de la educación universitaria, doctor honoris causa por la Universidad Complutense". En esta ocasión, se entregaron Medallas de Honor de la UCM a algunos de los profesores de ambas instituciones que participaron en la creación y consolidación del RCC. En concreto, recibieron las medallas, por parte de Harvard, Margot N. Gill, David W. Kennedy y Bradley Epps, y de la UCM, José Antonio Gómez Ibáñez, Miguel Ángel Alario, Carlos Seoane, Enrique Alonso y, a título póstumo, Ángel Sáenz-Badillos.
Cinco directores
Sáenz Badillos fue el cuarto de los cinco profesores complutenses que han dirigido el RCC en sus veinticinco años de historia. El primero fue Enrique Alonso, quien participó en el acto para recordar cómo se desarrollaron las conversaciones que llevaron a la firma del acuerdo con Harvard. "Tuvimos que establecer con ellos actividades serias, rigurosas y, sobre todo, seductoras", subrayó Alonso, quien precedió en el cargo de director del RCC a los profesores Manuel Pastor, Enrique Bernárdez, al mencionado Ángel Sáenz-Badillos, y a José Manuel Martínez Sierra, su actual responsable.
En el acto celebrado en el Paraninfo de San Bernardo también intervinieron la profesora Margot N. Gill, por parte de Harvard, y el presidente y la vicepresidenta de la Asociación de Alumni del RCC, Arturo Anadón y Carolina Rodríguez López. La profesora Gill destacó en sus palabras el "gran acierto" que ha sido para Harvard elegir a la Complutense como socio preferente. Subrayó, así mismo, la fantástica experiencia personal y profesional de cuantos profesores y estudiantes han estudiado e investigado en Harvard a través del RCC y se mostró segura de que los próximos veinticinco años seguirán siendo tan productivos como estos primeros veinticinco.
Alumni del RCC
En 2004 se creó la Asociación de Alumni del RCC en Harvard, con la intención, en palabras de su vicepresidenta, de ayudar a conseguir los fines por los que se creó el centro e impulsar su desarrollo. La profesora Rodríguez López explicó que en la actualidad la asociación está trabajando en la publicación de la historia del RCC, "ya que tras veinticinco años ya podemos hablar no de una prometedora historia , sino de algo sólido y consagrado". En esa historia, como subrayó el presidente de la Asociación no faltarán dos personas que, sin duda, han contribuido a consolidar el RCC, los profesores Mercedes López Salvá e Ignacio Rodríguez Alfageme, quienes aprovechando la celebración de este acto fueron nombrados presidentes honorarios de la Asociación.
Nueva era
El rector Carlos Andradas cerró el acto conmemorativo recordando que iniciativas como el RCC son las que realmente ayudan a que la universidad progrese en su búsqueda del avance del conocimiento, la investigación y la excelencia. Así mismo, confió en que la nueva era en la historia del RCC que ha abierto la incorporación de otras cinco universidades como "partners" -Alcalá, Rey Juan Carlos, Politécnica de Madrid, Sevilla y Valencia- será al menos igual de exitosa que la de estos veinticinco años.