La Universidad Complutense es la primera institución educativa que ha decidido abrir un proceso participativo en el que se decidirá las partidas concretas a las que va a dedicar una parte de sus presupuestos. Exactamente, serán las partidas en las que se empleen 200.000 euros las que se decidirán entre todos los miembros de la comunidad complutense, es decir entre sus estudiantes, profesores y personal de administración de servicios. La únicas condiciones son que las iniciativas que se quieran poner en marcha estén relacionadas con la sostenibilidad ambiental de los campus complutenses y, por supuesto, que sean viables tanto técnica como legalmente. Para que esto sea posible, la Complutense ha iniciado este 18 de febrero un proceso que concluirá con la emisión de un informe con propuestas concretas priorizadas no más tarde del 30 de mayo. Estas propuestas serán ejecutadas a cargo de los presupuestos de este mismo ejercicio.
El rector Carlos Andradas ha querido estar presente en la jornada celebrada en el aula CIBI del Jardín Botánico de la UCM, que ha supuesto el punto de partida del proceso de elaboración de estos presupuestos participativos. En su intervención ha animado a toda la comunidad complutense a participar en la iniciativa, y ha explicado que la decisión de que todos los proyectos estén vinculados a la sostenibilidad y el medio ambiente persigue, a su vez, que "todos nos sintamos implicados en el sostenimiento de nuestros campus". Precisamente, la referencia a los campus en plural, como explicó el Delegado del Rector para Campus y Medio Ambiente, Javier Garrido, también recoge la voluntad de tener en cuenta a los dos campus complutenses. "Otra de las pocas condiciones que desde la Institución ponemos a este proceso es que las iniciativas que se lleven a cabo se realicen de manera más o menos proporcional entre los campus de Somosaguas y Moncloa", señaló Garrido.
El primer objetivo del proceso es tratar de que participen cuantas más personas mejor. El vicerrector de Estudiantes, Julio Contreras, quien inauguró la jornada junto a Javier Garrido, mostró su confianza en que sean muchos los alumnos y alumnas que se impliquen, además por supuesto de profesores y personal de administración y servicios, ya que "todo lo que sea dar dimensión social a la universidad nos va a enriquecer".
Práctica en expansión
La elaboración de presupuestos participativos -como explicó el profesor Tomás Rodríguez Villasante en la conferencia que impartió en la jornada y que sirvió para fijar el marco conceptual- es una práctica habitual en cada día más municipios. Las primeras experiencias hay que buscarlas a finales de los 80 en ciudades de América Latina, entre las que destacó, tanto por su alta participación ciudadana como por el volumen del presupuesto "participado", la brasileña Porto Alegre. De hecho, no es casualidad que sea en esta ciudad donde se celebran los más importantes foros sociales. La práctica participativa se ha extendido, según explicó el profesor Villasante, a ciudades y estados de los dos países más poblados del mundo, como China e India, y también a Europa, donde son muchas hoy las ciudades italianas, portuguesas, francesas e incluso alemanas, que reservan una parte de su presupuesto a las iniciativas propuestas por sus ciudadanos. También en España desde hace años ha habido experiencias en ciudades como Córdoba o Sevilla, y ya en Madrid, en localidades como Mejorada del Campo, Valdemorillo o El Boalo, por citar algunas. También en Madrid, como anunció la presidenta del Distrito de Moncloa-Aravaca, Montserrat Galcerán, presente en la clausura de la jornada, el próximo año se establecerá por este sistema el destino de 50 millones de euros del presupuesto de la capital y otros 50 millones de los presupuestos de los diferentes distritos. Esto, de acuerdo con el profesor Villasante, demuestra que la elaboración de presupuestos participativos no es de derechas ni de izquierdas, ya que se han llevado a cabo en consistorios regidos por el Partido Popular, PSOE, Izquierda Unida, ahora Podemos, "e incluso por Bildu, en una localidad de Guipuzcoa".
Según defiende el profesor Rodríguez Villasante, los presupuestos participativos son otra forma de que los ciudadanos estén presentes en la vida democrática. A la tradicional democracia representativa, en la que el ciudadano elige a sus representantes, está la de participar en las decisiones que se adoptan, "a través de la construcción colectiva de las propuestas". El reto es lograr que esa construcción de propuestas sea realmente colectiva, se base en el consenso y busquen el bien común.
Grupo motor
Para lograr que las propuestas e iniciativas que se incorporen a los presupuestos complutenses -que como aclaró Javier Garrido pueden ser de todo tipo: nuevas instalaciones, cursos, campañas...- sean fruto de ese consenso, la UCM ha decidido seguir la metodología de presupuestos participativos más extendida. Esta se basa en la creación de un grupo motor, formado por personas que quieran implicarse en todo el proceso de manera muy activa. Cualquier miembro de la UCM puede, por tanto, formar parte de él. Este grupo será el que fije el autorreglamento de funcionamiento, el que vaya recogiendo primero los diagnósticos que vayan saliendo de las distintas reuniones por sectores, y después las propuestas concretas. Está previsto que la primera reunión del grupo motor se lleve a cabo el próximo 29 de febrero al mediodía. El lugar y la hora exacta será anunciado en la web que la Universidad ha abierto para informar de todo el proceso: www.ucm.es/presupuestos-participativos
Calendario previsto
Tras esa primera reunión del grupo motor del 29 de febrero, se prevé que los días 1, 9 y 10 de marzo se lleven a cabo los talleres de autodiagnóstico sectoriales (por profesores, estudiantes y personal de administración y servicios). El 15 de marzo se celebrará una asamblea conjunta para hablar de ese autodiagnóstico, es decir de establecer cuál es el estado medioambiental de la Complutense y qué aspectos necesitan una mayor atención. Se abrirá entonces un periodo de presentación de propuestas. Estas se podrán hacer a través de la web y también de manera presencial. La intención es abrir urnas o buzones en todas o algunas facultades complutenses. El plazo de presentación de propuestas se cerrará el 10 de abril. El siguiente paso será la celebración de un taller de priorización el 13 de abril, en el que los asistentes darán su valoración ponderada de las propuestas. Las actuaciones apoyadas en ese taller se presentarán el 19 de abril y se someterán a una evaluación técnica por un comité creado por la propia UCM al efecto, y que velará por la viabilidad técnica o legal de los proyectos. El 30 de abril tienen que estar finalizadas las evaluaciones, ya que el 2 de mayo se realizará una nueva asamblea de priorización, de la que ya saldrán las iniciativas que se incluirán en el informe que el 30 de mayo se entregará a la Universidad.