Con un solemne acto presidido por el Rey Don Juan Carlos, el Instituto Universitario de Investigación Ortega y Gasset, centro adscrito a la Universidad Complutense, ha inaugurado este 19 de octubre su curso académico 2016-17, en el que se impartirán 10 másteres oficiales de posgrado, un programa de Doctorado, además de otros títulos propios. El rector de la UCM, Carlos Andradas, manifestó en el acto el compromiso de la Universidad de participar en la nueva etapa que ha iniciado el Instituto, con la llegada a la presidencia de la Fundación Ortega-Marañón -en la que se inscribe el Instituto-de Juan Miguel Villar Mir, y se mostró convencido de que esta estará basada en el rigor, la transparencia y el compromiso con la docencia y la investigación de calidad. En este sentido, animó al Instituto a obtener las principales calificaciones de excelencia que concede el Ministerio de Educación, para situarse a la altura de los más prestigiosos institutos universitarios del mundo. El Rey Don Juan Carlos, en su calidad de presidente de honor de la Fundación Ortega-Marañón, animó a que el Instituto continúe favoreciendo "con tolerancia y respeto" el necesario debate académico del que surjan "nuevas ideas para una sociedad mejor".
El acto, además de para entregar las medallas de Doctor y los diplomas de Máster a quienes finalizaron con éxito sus estudios en el Instituto el pasado curso, sirvió para presentar la nueva etapa que acaba de abrir la Fundación Ortega-Marañón. De acuerdo con su nuevo presidente, Juan Miguel Villar Mir, la apuesta es "el relanzamiento de las actividades de tipo académico". Para ello, según señaló, hace apenas un mes se han llevado a cabo una serie de nombramientos que darán el impulso necesario a la institución. Así, el director académico de la Fundación y también del Instituto Universitario Ortega y Gasset es Javier Zamora Bonilla. Fernando Rodríguez Lafuente será el encargado de "reforzar e impulsar" todo lo relacionado con la enseñanza del español y las relaciones de la Fundación con el Instituto Cervantes. Antonio López Vega, por su parte, es el máximo responsable del nuevo Centro de Investigación Gregorio Marañón, recientemente creado.
El acto inaugural del curso académico del Instituto se completó con la conferencia impartida por el profesor de Filología de la UCM y presidente de honor de la Asociación de Cervantistas, José Manuel Lucía Megías, sobre "Miguel de Cervantes y William Shakespeare ante el espejo de la escritura". El escritor complutense comparó, ahora que se celebra este año el 400 aniversario de la muerte de ambos autores, como uno, Cervantes, lo hizo siendo "viejo, soldado, hidalgo y pobre", y el otro "viejo, actor, autor de comedias y rico. Muy rico". También destacó Lucía Megías, que sólo 7 años después de su muerte los compañeros de Shakespeare en su compañía teatral de Los hombres del Rey reunieron sus obras en una excelente edición de lujo, mientras que la primera edición de lujo del Quijote, en la que se incluyó una biografía de su autor, no se publicó hasta 1738, es decir 122 años después de su muerte. "Además -recalcó el profesor complutense- son los ingleses los que rescatan a Cervantes, reivindicándolo como un genio creador, como uno de los mejores -si no el mejor- de los escritores en lengua castellana".
El profesor Lucía Megías explicó a los asistentes al acto que El Quijote pronto fue dejado de leer en España, mientras que en Europa sí se leyó de manera continuada, aunque en buena parte se hiciera "porque sus lectores pueden reírse de España, del enemigo que es España, de ese imperio que se tambalea". Son los ingleses los que ven en Cervantes el ejemplo de una nueva forma de novelar: la sátira moral, la novela moderna. Para José Manuel Lucía Megías, que Cervantes sea hoy, como también lo es Shakespeare, "guía de nuestras vidas", es en buena parte por tres razones que nos da la lectura de El Quijote: el valor del diálogo, el respeto al otro, y la voluntad de ser quien se quiere ser. "Él dijo «Yo sé quien soy y lo que puedo llegar a ser». ¿Y nosotros? Ha llegado el momento de escribir nuestra novela y de vivirla dentro y fuera de la literatura", concluyó su conferencia el profesor Lucía Megías.
