La Facultad de Ciencias de la Información ha acogido, entre los días 17 de octubre y 14 de noviembre, el "Taller de igualdad de género y construcción de nuevos modelos sociales de mujeres y hombres", organizado por la Unidad de Igualdad de Género de la UCM. De esa actividad han surgido una serie de trabajos que han optado a llevarse los galardones de la primera edición de los Premios Proyecta Igualdad. En la entrega de los premios, celebrada en la tarde del 29 de noviembre en el salón de actos de dicha Facultad, el rector Carlos Andradas informó de que esta iniciativa forma parte de la celebración de la Semana por la Igualdad, "una lucha que sigue siendo necesaria". Para ayudar en el cambio de conciencia que hace falta en esa lucha, tras la entrega de premios, los asistentes al acto pudieron disfrutar del monólogo "No sólo duelen los golpes", de Pamela Palenciano, un proyecto político que trata de la violencia estructural que sujeta al resto de violencias.
María Bustelo, delegada del rector para la Igualdad, añadió que con esta Semana se ha pasado "de celebrar la igualdad a denunciar la violencia machista, porque en la base de la violencia de género está siempre la desigualdad". De acuerdo con Bustelo, "la violencia genera más desigualdad en un círculo diabólico que se alimenta a sí mismo".
Por eso, desde la UCM se trabaja "en el día a día para conseguir una universidad más igualitaria y libre de violencia". Para mirar a la "violencia de género de frente y sin miedo" la entrega de Premios tuvo como colofón el monólogo de Pamela Palenciano "No sólo duelen los golpes". Una actuación que consiguió llenar el salón de actos de la Facultad de Ciencias de la Información, algo que no es nada fácil de conseguir, como señaló su decana Carmen Pérez de Armiñán. Según ella ese lleno se debe a que "este problema nos afecta a todos y todos debemos implicarnos en su erradicación".
Los galardones
Los Premios Proyecta Igualdad cuentan con dos categorías. En la primera de ellas, sobre trabajos de Investigación y Diagnóstico el trabajo ganador ha sido "Análisis crítico del plan de estudios del grado de Comunicación Audiovisual desde la perspectiva de género".
Además ha habido dos accésit para los trabajos "Machismos en el espacio universitario" y "Posibles evidencias de la brecha de género en la Facultad de Psicología de la UCM".
En la modalidad de Intervención el premio ha recaído en el trabajo "Del teatro a la realidad: Jornadas de Promoción de la Igualdad de Género en el ámbito Universitario", mientras que los accésit han sido para "UCM: Igualdad y deporte" y "Escuela de Educación Infantil en la UCM".
El vicerrector de Estudiantes, Julio Contreras, indicó a los ganadores que, además de recibir diplomas, camisetas y cuadernos de la Unidad de Igualdad, desde la Universidad se hará todo lo posible para que estos proyectos premiados se puedan llevar a cabo.
El monólogo
"No sólo duelen los golpes" es un monólogo intenso de Pamela Palenciano, que recorre centros educativos y teatros de toda España de la mano de la asociación Nosotras en el Mundo. Celia Garrido, representante de esa asociación aseguró que este monólogo "es un proyecto político, una denuncia mucho más amplia, que no sólo trata sobre la violencia en la pareja, sino sobre todo la estructural que es la que sujeta esa violencia".
Considera Garrido que el trabajo que hacen en los institutos es "muy importante y muy eficaz", pero "también tiene mucho sentido en espacios académicos y profesionales, porque las instituciones no son entes abstractos y la mejor manera para combatir la violencia es que todos nosotros seamos capaces de transformar la realidad". Por eso, este monólogo es algo que "incomoda, porque si no nos incomoda, no cambiamos".
Pamela Palenciano cuenta, en algo más de dos horas, su propia experiencia vital, desde su primer novio que la maltrataba psicológicamente y ella a él físicamente, pasando por una etapa en la que ella se convirtió en un reflejo de ese maltratador, y llegando hasta su viaje a El Salvador, que realmente le salvó la vida y la convirtió en la activista política que es hoy en día.
En su interpretación, en la que no usa más que una silla, Palenciano se mete en su propia piel, pero también en la de hombres y otras mujeres con una facilidad pasmosa. Y mientras, en su discurso cuenta la terrible historia de su violación y de la muerte en vida a la que se vio abocada por un mundo en el que el patriarcado se casa con el capitalismo y montan el sistema actual de desigualdades estructurales en el que vivimos.
Palenciano denuncia la situación de esta "península histérica" en aspectos como la inutilidad del 016, cuando luego existen "juzgados como el de Plaza de Castilla lleno de pegatinas sobre feminazis, y donde siempre te quitan a los hijos".
Habla también de ese modelo de amor que nos han vendido en el que "hay que olvidar, entender y esperar que el otro cambie", cuando en realidad "esta sociedad no cambia, porque nadie quiere cambiar el lugar que ocupa". Porque para que haya una auténtica revolución hay que salirse de nuestra zona de confort y entender que "nos podemos encontrar en la equidad, que no en la igualdad", y que "el amor de verdad suma, no resta" y que "el amor de verdad, no duele".